Vestirse para una ocasión especial siempre había sido un trabajo arduo. Cómo no recordar los reclamos de sus amigas cuando tardaba más de la cuenta en elegir un vestido, entre los cientos, de su closet para irse de rumba. - Ah, esa época de universitaria descontrolada. - Sin contar las reuniones de sociedad con sus padres y algunas que otras como modelo.
Cuatro años después, Lexa mantiene tal pensamiento en vigencia. Pero sus amigas no se quedan muy atrás en esta costumbre, tal vez vivir ocho meses de odisea en el que reunir a seis mujeres en una boutique de vestidos de novias para elegir el color, modelo y zapatos que llevarían las damas de honor se convirtió en el momento más lioso de su vida. Sabía que sería difícil, pero no imposible. Que, a una no le sentaba el rosa, a la otra se le veía un "cauchito" con ese modelo, que de blanco perlado opacaría a la novia y de negro la boda se convertiría en un funeral; lo mismo con el vestido de novia, que de blanco no porque no era virgen y la pureza se la debía a Dios y al padre. En fin, luego de un mes visitando la tienda de una reconocida diseñadora nacional pudieron quedar de acuerdo en el color y diseño de los vestidos.
El vestido de novia lo habían bautizado como el más hermoso que jamás habían visto, claro, si te lo diseñan a la medida no tendrías de lo que preocuparte por una pieza que literalmente es única y exclusiva al llevar tu esencia y alma. Todas se dieron a la tarea de que la futura esposa caminara por el altar con "el mejor" vestido de novia y no cualquier trapo con marca de diseñador. Ergo, invirtieron cuatro horas, dos días a la semana en probarle vestidos a la rubia que bajo el ojo crítico de sus amigas modelaba cada creación. Ninguna dejó de alabarla con las frases típicas de damas de honor <<eres la novia más hermosa que he visto en mi vida>>, lo decían de corazón y con lágrimas al borde de sus ojos al entender que una de ellas pasaría su status legal de "soltera" a "casada".
Meses después de niveles de estrés, que ni los porritos pudieron opacar, charlas de amigas a cualquier hora, lágrimas y miles de <<debería atrasar la boda>> se pudo ver el resultado de todo el calvario que llevaba la planificación de esta. A pesar de contar con la mejor wendding planer de la ciudad – la cual poseía la empresa de Nel – no se libraron de la presión y la angustia.
— Hey, hey, con cuidado. — se quejó Nel al recibir un tirón de cabello por el estilista — Mira que me cargo un ratón que no me deja ni pensar en los próximos pasos que daré.
— Si por una vez en tu vida dejarás de comportarte como una universitaria y bebieras como una mujer adulta, dueña de una empresa exitosa, creo que no estarías en esta situación... A veces pienso que, en vez de ser presidenta de una productora, puedes ser la Madamme de una casa de compañía, solo por no referirme de manera despectiva hacia las trabajadoras sexuales.
Nel desvió la mirada de su reflejo en el espejo, sin mover un milímetro de su cuello, mirándola de reojo en el espejo que reflejaba a Mandy. La castaña ni se inmutó ante su mirada fría de poker, y continuó antes de que Nel pudiera darle una mortífera respuesta: — o pudiste haber desayunado con nosotras si no te hubieses ido a putear a la casa del barman. — Mandy le dirigió unos segundos de su mirada inexpresiva — eso te pasa por ninfómana.
— Pasarán cincuenta años y tú todavía vas hacer uso de halagos cuando comenzamos una discusión — negó con fingida decepción — ¿Qué te puedo decir? No todos los días uno se encuentra con un hombre que posea un pene mayor a los veinte centímetros y tres dedos de grosor... — cerró sus dedos dudando del grosor correcto que había tenido entre sus piernas esa mañana — ¿O eran más?
Para quienes no estaban acostumbrados de escuchar a una mujer describir sin tapujos el miembro masculino en pleno siglo XXI donde el "Love Guality" y "Free Life" son la principal bandera, sinceramente aún se encuentra a un largo camino de integrarse a una sociedad tan abierta y liberal como en la que vive Nel. En este caso, el peluquero parecía pertenecer a esa población escandalizada, no pudo esconder su expresión de sorpresa al oír a Nel, quien se sintió ofendida de ser juzgada por un hombre que libremente dejaba en evidencia su preferencia sexual con sus actitudes amaneradas.
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Elevada Tentación [SDS #1]
RomanceLexa es el ángel de la casa ante los ojos de sus padres, familia y vecinos, todos adoran a la dulce y colaboradora rubia de mejillas sonrojadas. Esa luz se apaga cuando coloca el primer pie en la universidad y camina junto a sus fieles amigas, forma...