Amor Donde No Debería Estar RivaMika

18.- Muro María

-Hange-san, por favor ni una palabra a Levi.-
Mikasa por fin pudo pronunciar palabras después de 6 minutos de absoluto silencio.

-Mikasa...¿Sabes lo que me estás pidiendo?, Levi tiene que saberlo, ¡es el padre!.- Hange no estaba nada contenta con el pedido de la azabache.

-Hange-san, si le dices no me dejará ir a recuperar el muro.-

-Obviamente.- la interrumpió la castaña.

-Si no voy, ¿Quién le cuidará la espalda a Levi?.-

-Toda la legión.- dijo Hange como si fuera lo mas obvio.

Mikasa hizo un rostro de molestia.

-Hange-san, si no voy y algo le pasa, no me lo perdonaré nunca, y a ti tampoco por decirle y evitar que vaya.- Mikasa tenía un rostro de decisión.

Hange suspiró derrotada.

-Levi va a matarme, literalmente, va a acabar con mi vida.-

-¿Eso significa...-

-No Mikasa, no le diré una palabra.-

-Gracias Hange-san.- la azabache le dio un abrazo apretandola.

-Si, si, sal, vamos.- ambas chicas salieron y se encontraron a Levi recargado en la pared.

-¿Y?.-

Mikasa se congeló, en todo el tiempo que estuvo con Hange no se le ocurrió ninguna excusa para su malestar.

Sin embargo Hange era muy buena para inventar excusas.

-Solamente una mala reacción Levi, debió haber comido alimentos en mal estado.-

El azabache frució el ceño.

-Lo que tu digas
cuatro-ojos, ¿Vamos?.- Levi le tendió su mano a la azabache, Mikasa la tomó y empezaron a caminar.

La pelinegra sólo le dijo un "gracias" moviendo solo los labios, pero la castaña sólo tenía una cara de preocupación, incluso Mikasa sabía que ir a una misión extremadamente peligrosa estando embarazada era probablemnte la peor idea de la historia, pero por ser una misión donde había una gran probabilidad de morir, que no podía dejar que Levi fuera solo, aunque pudiera su vida y la de su bebé en riesgo.

-¿Sucede algo?.- el azabache la sacó de sus pensamientos cuando habían llegado a la habitación.

-Nada, hay que ducharnos.- el chico sólo sonrió.

-Lo que tu digas.-

1 semana después

Mikasa agradecía al cielo que su panza de embarazada no se notara aún, ya que ese era el día en el que irían a recuperar shiganshina.

-Mocosa.- Levi estaba vistiendose en el baño, tenía la puerta abierta asi que Mikasa podía ver perfectamente todo lo que ocurría.

-¿Sí?.- el azabache caminó hacia ella, quien se encontraba sentada en la cama, puso una mano en su mejilla y le dio un beso casto.

-No mueras, por favor.- Mikasa sabía que a pesar de que su rostro no lo denotaba, estaba aterrado de la misión, ahora el azabache tenía miedo de morir, y dejar a Mikasa sola, o peor, que ella muriera y volviera a quedar sólo.

Ambos terminaron de vestirse, y salieron de la habitación, Mikasa primero, y Levi algunos minutos después.

El azabache fue a reunirse con Hange y Erwin, y Mikasa fue con sus amigos, Armin y Eren.

Cuando llegó, vio que Eren hablaba muy de cerca con Historia, e incluso reían bajo, Mikasa se alegró, ya que quizás Eren volvería a enamorarse, y quitaría a Historia de Levi.

Sin embargo, Armin se acercó a ella con una mirada seria.

Ambos estaban alejados del resto así que no podían escucharlos.

-Armin, ¿Ocurre algo?.- preguntó la chica completamente curiosa.

-Hange-san me lo dijo Mikasa.- en ese instante, la chica se le heló la sangre, maldijo a Hange en su mente.

-Es una terrible idea, ¿Sabes que haría el capitán si se enterara?.-

-Hago esto por Levi, Armin.- dijo Mikasa algo molesta.

-¿Y si te ocurre algo?, ¿Crees que el estaría bien con eso?.-

-¿Y si algo le ocurre a él?, si el termina lastimado o muerto, quizás si voy pueda evitar eso, y regresemos a salvo.-

El chico relajó su mirada.

-Irás de cualquier manera, ¿cierto?.-

- Si.-

El chico suspiro.

-No apoyo esto en lo absoluto, pero no puedo detenerte, espero que sepas lo que estás haciendo Mikasa.- dijo el chico bajando la mirada.

La chica lo levantó del rostro, le sonrió, y lo abrazó.

-Gracias Armin, se que es algo muy difícil, pero gracias. Por eso eres mi mejor amigo.- le dijo de corazón.

-Sólo, hagamos esto y regresemos a salvo, ¿Si?.-
Dijo el chico en un tono desanimado.

-Es una promesa.- dijo la azabache, y junto a su amigo, regresarían donde estaban todas las tropas reunidas.

Levi solamente la miró con un rostro preocupado, y ella le dio una sonrisa y le asintió.

Las tropas de la legión regresaron al muro, y lo cruzaron, irían al muro María a pie.

Erwin había hecho algo muy raro, ya que había gritado antes de salir de las murallas, pero todo eso motivo a las tropas.

Cuando por fin estaban afuera de las murallas, Erwin habló.

-¡Ahora!, ¡es cuando recuperamos lo que es nuestro!, ¡y mañana, nos enfrentaremos a los titanes, y luego regresaremos aquí, triunfantes, con la libertad!.-

Incluso Hange fue motivada por las palabras del rubio.

Y así, Mikasa y compañía regresaron a los muros, a su hogar.

1 día después

-¿Qué vas a hacer qué?.-

-Erwin es quién salvará la humanidad, la inyección se de la daré a él.-