Secreto (chilumi) +18; genshin impact lemmon

Capítulo 7

Tartaglia

La cojo del brazo atrayéndola hacia mí y besándola suavemente. Me separo para mirarla a los ojos pero ella me atrae rápidamente de nuevo hacia sus labios.

No me puedo controlar, ya no en este punto.

La conduzco hasta la cama mientras nos besamos. Solo se separa para tumbarse en esta y yo me pongo encima. Junto nuestras caderas mientras nos besamos con pasión. Una de sus manos recorre mi cuerpo sin control y con la otra juega con mi pelo, intentando atraerme más a ella.

¿Lumine me deseaba tanto como yo la deseaba a ella?

Bajo los besos por su cuello hasta llegar a donde termina la camiseta y la cojo con los dientes para quitársela un poco e indicarle que se la quite.

Lo hace y se queda solo con la ropa interior de abajo. Ya me había dado cuenta de que no llevaba sujetador, no quiero sonar como un pervertido pero me excitaba que llevase mi camiseta sin nada.

—Que bonitas.

—Cállate estúpido —Me dice tapándome los ojos, es tan adorable.

—Está bien.

Sonrío y pongo mi boca en uno de sus pechos, masajeándolo con la lengua, mientras juego con el otro con mi mano.

—N..no me refería así...

Me incorporo mirándola aún.

—¿No te gusta?

—No te he dicho que pares.

Lumine es tan tímida y atrevida a la vez que no sé qué pensar de ella, ni qué está pensando.

Me quito los pantalones rápidamente quedándome en calzoncillos pero cuando miro hacia la cama la rubia se ha levantado y se dirige hacia mí.

—Ven.

Me conduce de nuevo hasta la cama y hace que me siente, apoyando mi espalda contra la pared. Se sienta encima de mí y empieza a moverse mientras me besa. Mierda, estoy perdiendo el control.

Pasa de besarme en los labios a besarme en el cuello, sin dejar de moverse.

—L..Lumine...

—Mierda.

Se queda completamente quieta de pronto.

—¿Qué pasa? —Toco su mejilla preocupado, ¿hay algo mal?

—¿Tienes protección?

—Mierda.

Yo también me quedo paralizado, nunca pensé que terminaría en una situación como esta así que no estoy preparado, ¿qué hago?

—Podría llamar a recepción y que trajesen...

—Como esa amiga tuya se haya quedado pese a lo que le has dicho estás jodido.

—Para empezar no es mi amiga, pero sí, tienes razón, no puedo confiar ni un pelo en ella.

Suspiro al darme cuenta de que no podremos continuar por algo tan tonto, debería ser más previsor, aunque, comprendedme, no pensaba que Lumine estuviese interesada en mí, y no es que tuviese en mente hacerlo con nadie más...

La chica, sin embargo, más que entristecido por no poder seguir como yo, se encuentra con una sonrisa de oreja a oreja.

—Al parecer vuelvo a ganar yo —Sonríe de manera pícara haciendo que me entren aún más ganas de comérmela.

—De eso nada.

Le pego un pequeño empujón haciendo que caiga sobre la cama y me sitúo sobre ella. Con mi mano derecha le acaricio el muslo desde la rodilla hasta la cintura, para después pasar a su zona íntima y masajearla.

—C..Childe... —Suspira en un pequeño gemido.

—Creo que esta vez voy a ganar yo.

Le quito la ropa interior delicadamente, Lumine está tan roja y adorable...

Sigo masajeando y empiezo introduciendo un dedo, haciendo que Lumine empiece a hacer pequeños ruidos y se mueva al compás.

Mientras tanto le beso el cuello y los labios mientras sostengo su mano con fuerza. Como odio no poder unirme a ella en este momento.

Nunca me había fijado bien en la figura de Lumine, es muy poca cosa, y no lo digo como algo malo, me gusta cada parte de ella, pero es delgada y bajita, apenas tiene músculo pese a lo fuerte que es, estoy sorprendido, me ganó a mí e incluso a un dragón, eso podría imponer a cualquiera, pero a mí sólo hace que excitarme más.

Pego un pequeño grito de dolor al notar sus uñas clavarse ferozmente en mi espalda, esta chica debe haberme dejado unos cortes profundos.

—C..Childe... P..para...

Dejo de tocarla y besarla y la miro a los ojos, ¿habré hecho algo mal?

—¿Qué pasa? ¿Estás bien?

—H..he acabado...

—¿Por eso me has desgarrado la espalda?

—P..perdón...

Le cuesta hablar y mirarme a los ojos, y tapa su cuerpo de manera torpe.

—¿Quieres vestirte?

—Perdón, es que es muy incómodo.

Creo que nunca había visto a una persona tan roja. Definitivamente he ganado yo.

Me he quedado sin final feliz pero... Solo con ver su rostro avergonzado ha valido la pena.

Veo como vuelve a ponerse la ropa interior y mi camiseta, ¿piensa ir así toda la mañana? Porque voy a tener que ir a la tienda al final...

—¿D..Desayunamos?...

—Bueno, yo creo que ya te he desayunado a ti.

—¡Ahhhhh, para!

Me mira rabiosa aún sonrojada y se lanza sobre mí a hacerme cosquillas, quién entiende a Lumine.

—Vale, vale, perdón, no volveré a hacer bromas vergonzosas —No dejo de reírme.

—Eso espero.

El reloj del campanario empieza a sonar, ¿ya es tan tarde? ¿Cuánto tiempo hemos estado jugando?

—¡Mierda! ¡El picnic! ¡Deben estar búscandome!

La chica se levanta y empieza a cambiarse rápidamente.

—¿Hola?

—Había quedado para comer con mis amigos, tengo que ir, ¿nos vemos a la noche en el camino?

—Creía que comeríamos juntos y pasaríamos la tarde...

—Eso podemos hacerlo otro día, voy a ir a Liyue, ¿recuerdas? Tengo que preparar todas mis cosas y decirles a mis amigos que me iré un tiempo. ¿Qué pasa? ¿Me vas a echar de menos?

Sí.

—No.

Lumine sonríe haciendo que mi pena desaparezca, pero aún así esperaba que mi día libre lo pasasemos juntos.

—Nos vemos luego.

Abre la ventana para salir a escondidas.

—¿No vas a darme un beso de despedida?

Lumine rueda los ojos y se lanza por el ventanal. Al parecer a los dos nos gusta hacer una salida triunfal.

Mi sonrisa desaparece y me quedo mirando hacia el desayuno.

—Bueno, tendré que recuperar fuerzas.