Capítulo 44

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-¡Abracadabra!

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-¡Abracadabra!

Las flores que Jungkook recientemente había pedido colocar en el jardín estaban siendo regadas por su hermano mayor mientras ambos tomaban su merienda. Jimin, mientras tanto, estaba en medio del todo tratando de averiguar cómo utilizar el anillo que llevaba en su mano derecha.

-¿Wingardium leviosa?

Taehyung soltó una risilla apretando el gatillo del rociador en la última maceta.
El día parecía lindo, el cielo estaba despejado y los rayos del sol tocaban sus cuerpos de forma cálida.

-Vivir fuera del palacio fue más difícil de lo que creí -Rió suave- Era apenas un adolescente, y fui tonto al creer que lo que empaqué sería suficiente.

-Tienes mucho apetito, es cierto.

-Pasé días sin comer en una cabaña y trabajé en una panadería para ganar un poco de dinero. Y cuando conocí a SeokJin él me enseñó a cazar y cocinar... Era un Príncipe, jamás pensé que algún día podría llegar a necesitarlo... Fui muy tonto.

SeokJin... No podía odiarlo ni mucho menos; de hecho, estaba seguro de que si lo hubiese conocido de una forma diferente habrían sido muy buenos amigos. Era del tipo de persona que aunque no fuese el plan, acababa por agradarte o tenerle cariño. Ese era su efecto en las personas, e incluso a él quien era algo como su "enemigo natural" había llegado a simpatizarle un poco.

-Siendo sincero, de pequeño te envidié un poco... Ya que tú podías salir con más libertad, tener los amigos que quisieras, salir a cazar con los sirvientes o guardaespaldas... Tenías más libertades, y aunque haya deseado poder convertirme en Rey, también habría querido tener una vida tranquila.

-En cambio huiste, y ahora tienes tu vida soñada.

Taehyung notó la molestia en su voz, y pensó que sería mejor cambiar de tema antes de que esto pudiese terminar en una discusión. Porque después de tantos años se habían encontrado, y no podían pelear apenas y se vieran de nuevo, se trataba de un momento especial, y debía seguir de esa forma.

-Cuéntame de ti, ¿Qué ha pasado en mi ausencia?

-Cuando te fuiste, nuestros padres quedaron devastados. Me odiaron por meses, fue pasando el tiempo y creo que hayaron la forma de perdonarme... Pero me castigaron quitándome mi sueño, al final me convertí en lo que tú debías ser y ahora estoy casado con Jimin.

-Lo cuentas como si fuera algo terrible. -Dejó el rociador sobre la mesa y se sentó a su lado.

-Al inicio lo fue ya que Jimin estaba de pareja con SeokJin, y me odiaba. -Tomó una bocanada de aire antes de continuar- Cuando él murió yo me hice cargo de todo, del funeral, la salud mental de Jimin... Porque yo lo entendía, ver gráficamente el cadáver de tu pareja el día de tu boda con alguien a quien tú no amabas sería horrible.

-Estuviste para él en todo momento, ¿No es así? Lo sacaste de mamá...

-No es mi madre, Tae.

-No biológica, pero sabes que te ama como si lo fuera. -Sonrió.

Le miró con el celo fruncido durante unos segundos y terminó por soltar un suspiro cansado. En todo ese tiempo no había tenido la valentía de contarle dichas partes de su vida a quien era su esposo; sabía que eso era una parte fundamental para la fortaleza de su relación, pero nunca había encontrado el momento adecuado, y ahora que estaban peleados y estaban cerca de un peligro inminente parecía algo imposible.

-Pasó el tiempo y por fin pudimos congeniar, y después nació Jihyun... Quién no es mi hijo.

No se lo esperaba para nada, pero ahora las lágrimas que tanto había luchado por contener estaban corriendo de sus ojos como si fuesen cascadas o de una llave que se averió.
Sus mejillas hirviendo en rojo fueron escondidas por sus piernas siendo apresadas por sus brazos sobre la silla.
Se sentía pequeño, y ahora que sus verdaderos sentimientos estaban siendo vulnerados su cuerpo temblaba.

-Y-Yo se que esto va a funcionar... Pero si supieras cómo duele, Taehyung... Si supieras cómo se siente saber que la persona que amas tiene un hijo con alguien más, sentirte tan insuficiente para él...

-Shhh, tranquilo, respira, vamos. -Algunas palmadas y sobadas en su espalda llegaron a reconfortarle un poco, haciendo que tan sólo algunos hipidos se escuchasen anunciando que había terminado de llorar.

-¿Sabes qué es esto? No debería, pero no hay ni un sólo día en que piense que no soy nada en comparación a SeokJin. Cada que lo veo sonreír pienso que estaría mejor con él, porque ni siquiera puedo saber del todo si me ama tanto como yo a él...

-Eso deberías preguntárselo a él, Kook, aunque no creo que diga lo contrario. Porque tú no sabes cómo te mira, pero yo puedo verlo y se que es así...

-Ni siquiera me deja hablarle.

-Los Omegas son complicados, Kook. Pero él te ama, nadie podría estar tan alejado de la persona que ama por tanto tiempo. Recuerda que eres suficiente para ti, y para Jimin u otra persona más, y si no lo valora entonces quien no es suficiente para el otro es él, ¿Está bien?

Jungkook asintió y para finalizar la conversación se sentó de manera correcta y limpió con una servilleta las lágrimas que habían manchado su rostro.
A lo lejos vieron a Jimin cruzarse de brazos completamente frustrado y momentos después volverlo a intentar; Jimin era una persona demasiado orgullosa, y ambos sabían que no iba a detenerse hasta que algo realmente interesante pasara, aunque no tuviese ni idea de cómo ese anillo funciona.

Tomó un bocado del pequeño panquecito de moras que por minutos había sido ignorado.

-Mi sobrino es lo más hermoso en el mundo, mirateee~ Cosi, mira hacia aquí -El mayor tomó las manitas del pequeño cachorro inflando sus mejillas.

-Se parece muchísimo a Jimin. -Sonrió mirando hacia el recién nombrado; podía sentirse triste pero siempre en su corazón sentía una calidez cada vez que le veía ser feliz, eso no lo cambiaría por nada.

-Di tío, ¿Sí? Ti-o, ahora dilo tú...

-Bwaaah~ -Jihyun soltó una risilla mientras aplaudía con sus minúsculas manos.

-Si dices tío, te llevaré a caballo apenas y cumplas los cinco años. Es una oferta que jamás se va a repetir, ¿Qué dices?

-Deja de intentar sobornar a mi cachorro, Taehyung, es inmoral.

-Diji di intintir sibirnir i mi cichirii, Tiihying, is inmiril. Hay que enseñarle de estas cosas a los bebés, no sabe cuándo lo podrá necesitar. Vamos dulzura, di tío.

En cambio tan sólo recibió a su cachorro alzando sus manos para alcanzarle y después su cabello siendo jalado por él. Taehyung ya rendido soltó un suspiro y terminó por besar sus mejillas regordetas.

-Para otra será entonces, pero esto no se queda así, ¿Eh? -Le miró retador.

Crown; 국민Donde viven las historias. Descúbrelo ahora