Un corazón roto es todo lo que queda, aun estoy arreglando todas sus grietas y perdí un par de piezas cuando lo lleve de vuelta a casa.
Admito que me asusta lo que soy, mi mente se siente como una tierra desconocida, hay un bullicioso silencio en mi cabeza el cual solo grita...
¡Llevame! ¡Llevame! ¡Llevame a casa!