Quédate conmigo en este gran proceso, juntos en este convento lleno de mentiras y odio, seremos amor, paz y ternura, navegando a favor de la dulzura y junto a la locura que nos da el placer de amar.
Juntos seremos los dígitos del bario y procesaremos el amor a diario, no faltarán caricias en el calendario, tu amor y el mío harán eco en la cuidad del olvido, dándole sentido a todo esto que llamamos vida.
Recordaremos los malos momentos con una sonrisa y con alboroto en el corazón, sujetaras mi mano, yo la tuya y juntos haremos del amor una religión. Seremos la envidia del panteón, seremos el motor del corazón y brillaremos por saber amarnos en un mundo lleno de mentiras y odio.
¡Solos tu y yo corazón!