#FOUR;☁️

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Yeonjun se levantó a las siete de la mañana y, como de costumbre, fue al baño para fijarse en sus stickers.

Era algo que, en cierto modo, lo tenía obsesionado. Y no porque quisiera tener muchos, al contrario, quería tener los menos posibles para no dañar a la gente al no corresponderlos. Aunque, claro, amaba hablar, amaba que le den atención y, dentro de todo, intentaba ser lo más amable posible con todos. Era obvio que tendría muchos a sus pies y, aunque a veces lo atormentara, también le agradaba saber que le gustaba a la gente, ya que eso demostraba que estaba haciendo las cosas bien.

Pero, en momentos como ese, deseaba que no fuera tan así. Desde hace días ese sticker, grande y gris, no lo dejaba dormir tranquilo. Repasaba una y otra vez a la gente que conocía, intentando así reconocer a esa persona a la que hacía sufrir, pero nada se le venía a la mente.

Mientras tanto, el sticker seguía ahí, opaco y maltratado. Aunque, si se fijaba bien, podía notar cómo había cambiado un poco. Se veía un poco renovado, aunque sus características principales seguían allí. Tal vez lo estaba imaginando, pero eso, de alguna forma, lo reconfortaba.

Su teléfono vibró en su bolsillo. Beomgyu, con el que estuvo hablando día y noche, lo estaba llamando. Con gusto atendió, dibujando una linda sonrisa que acompañaba a su alegre corazón.

─Hyung~ ─fue lo primero que dijo, con un tono meloso que hizo reír al otro─. Sabías que eres mi hyung favorito, ¿verdad? El top de los top, el maestro de los maestros.

─¿Qué quieres, BG? ─lo cortó entre risas. Mientras hablaba, tomó el peine que reposaba en la mesa de luz para arreglarse un poco el cabello.

─El otro día compré un celular por internet ─comenzó a explicar─ y lo enviarán por allá. No tengo dinero para pagar el viaje, por lo que ¿podrías ir a recoger el paquete y, en cuanto consiga el cash, pago el envío hasta aquí? ─le pidió, con tono de súplica.

─Eres todo un oportunista, ¿eh? ¿De dónde aprendiste eso? ─cuestionó Yeonjun, gracioso─. Ah, cierto, aprendiste de mí, es decir, de el mejor. Como sea, lo haré, pero debes hacer algo por mí a cambio.

─¿Qué quieres, punk? ─Sonrió y su corazón se aceleró, aunque Yeonjun, obviamente, no lo pudo notar.

─Vi que ayer subiste una foto a instagram con un chico ─Se miró al espejo y posó para sí mismo, practicando posibles selfies, mientras hablaba con su mejor amigo─. Ni siquiera lo etiquetaste, por lo que quiero que me pases su usuario.

─¿D-de Soobin? ─Hizo un breve silencio, simples segundos que hicieron preocupar un poco al mayor─. Claro, pero ¿para qué?

─Para hablarle, idiota ─dijo simple, como si fuera lo más obvio─. Y ¡ah! No te pregunté a qué hora debo pasar a buscar el paquete.

─Alrededor de las dos de la tarde, hyung ─respondió, escuchándose más apagado que minutos antes─. No te preocupes, luego de la llamada te pasaré su usuario.

─Gracias, hermanito~

─Sí, adiós, hyung ─dijo, para posteriormente cortar la llamada.

Yeonjun dirigió su vista nuevamente al espejo, sintiéndose un poco mal, sin saber el por qué.

Stickers || YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora