𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐬𝐞𝐝 / Jenlisa

𝒂𝒓𝒎𝒐𝒏𝒊́𝒂

5 meses después.

El tiempo para estas dos enamoradas pasó rápido, los días llenos de sonrisas y amor nunca faltaban.

Lisa y Jennie decidieron quedarse a vivir en la casa de David, pero no solo eso, trabajaron todo este tiempo en remodelar la casa.

Justamente hoy terminaban de pintar la habitación que faltaba, Lisa pasaba la brocha por la pared haciendo movimientos de arriba hacia abajo con esta, mientras Jennie intentaba pintar la parte superior de la pared.

-¡Maldición!-gritaba una perfeccionista Jennie intentando pasar la brocha llena de pintura blanca por un pequeño hueco sin pintura, esta saltaba lo más alto que podía.

Lisa dejó de pintar y miró divertida a Jennie, esta no lo dudó ni un segundo, dejó la brocha a un lado y tomó a Jennie de la cintura alzándola con fuerza y ayudándola a llegar.

Jennie pintó con la lengua afuera y el ceño fruncido el hueco que quedaba y después sonrió como una niña pequeña al ver todo perfecto.

-¿Ya quedó?-preguntó Lisa divertida

-Sip.-dijo Jennie y Lisa la bajó

Las dos mujeres miraron la pared y sonrieron orgullosas de su trabajo, la casa había cambiado mucho.

-¿Uh? Amor, tienes una mancha aquí.-dijo Jennie llevando sus manos al rostro de Lisa y intentó limpiar las manchas de pintura- Aquí tambien...y aquí..y aquí..-decía Jennie divertida y a la vez limpiaba

Las dos mujeres soltaron una carcajada mientras se veían fijamente y después sonrieron levemente.

-¿Estás lista?-preguntó Lisa y Jennie asintió

Lisa fue por las herramientas, sacó un martillo y un clavo mientras Jennie la miraba.

Lisa pegó el clavo a la pared y con el martillo comenzó a darle golpes hasta que este quedara fijo.

Después se alejó y buscó el portarretrato, lo miró con una sonrisa y lo posicionó en el clavo dejándolo fijo.

Lisa miró a Jennie y se acercó a ella, Jennie veía la foto con una pequeña sonrisa.

Era una foto que se habían tomado los primeros días viviendo todos juntos, David estaba abrazando a Jennie, Holly y Lisa tenían una gran sonrisa mientras intentaban que Lucas mirara hacia la cámara.

Y además de eso ahí estaba el dibujo que había hecho la hija de David al lado de la foto, llena de sangre, pero ahí estaba.

Lisa tomó la mano de Jennie mientras la miraba.

Jennie no podía escuchar nada sobre David porque se echaba a llorar, los días fueron muy difíciles para ella, David era como su padre, pero afortunadamente Lisa estuvo ahí para ella, apoyándola y intentando sacarle una sonrisa todos los días.

Jennie sonrió viendo la foto fijamente y después miró a Lisa que esta aún la seguía mirando.

-Gracias.-dijo Jennie con su voz dulce

-¿Por qué?-preguntó Lisa confundida

-Por no dejarme...por no escapar cuando podías..por quedarte conmigo.-dijo Jennie con sus ojos tristes

Lisa soltó un pequeño suspiro y después la abrazó.

-Nunca te dejaré..siempre estaré a tu lado Jennie.-dijo Lisa y Jennie asintió con su cabeza en el pecho de Lisa conteniendo las lágrimas

-¿Aunque te haga dormir en el sofá y no te deje acercarte a ninguna mujer?-preguntó Jennie y Lisa soltó una carcajada

-Sí, aunque me hagas dormir en ese sofá y no me dejes hablar con nadie por tus celos.-dijo Lisa divertida y Jennie apretó la tela de la camisa de Lisa atrayéndola