Reginald estaba... ofuscado. Sí, estaba hasta el cuello de papeles, libros, documentos...
Junto a Tech, había estado buscando en la segunda biblioteca de su solar, que obviamente era secreta, todos los documentos de Daisy, para ver si encontraba algo relacionado con Annie. Todos los trabajos, experimentos, investigaciones, planos de inventos... lo que fuera.
Si los niños antes no lo veían, ahora habían olvidado que vivían con él. Bueno, casi.
Había pasado ya otra luna nueva, lo que hacen tres meses desde que Annie Hargreeves se llama "Hargreeves."
—Tech, comprueba los documentos ya revisados.
—Número de documentos revisados: 4133; Número de coincidencias con la búsqueda: 0. —dijo para desesperación de Reginald
—¿Cariño? ¿Va todo bien? —preguntó Grace.
Ella estaba sentada en una de sus tantas estaciones de carga, con los cables insertados en sus oídos y sus ojos de color azul eléctrico. Eran cerca de las dos de la mañana, por eso era raro el encontrar a Reginald Hargreeves en la biblioteca privada, con el pelo revuelto, con aspecto de no haberse bañado en días, en pijama y sin monóculo.
De verlo le echabas diez años menos.
—Nada, Grace. ¿Recuerdas el nombre de Daisy Rivers?
—¿Rivers? ¿Como Daniel Rivers, uno de los investigadores que ayudó a criar a Pogo? —preguntó la mujer sorprendida.
Cuando olvidas un nombre no sueles esperar recordarlo. Y mucho menos que sea Reginald el que lo menciona. Si Reginald preguntaba algo, realmente estaba desesperado.
—Sí, era su hija. Una investigadora fantástica. ¿Sabes de algún proyecto relacionado con robots que ella tuviera?
—Su padre solía mencionar que tendría una hermana, pero recuerdo que la madre murió en el parto junto con la hija.
Eso tomó por sorpresa a Reginald. Daniel era alguien que amaba mucho a su mujer, Marina, y repetía constantemente lo lindo que se le hacía el tener otra hija. Que la mayor estaba muy emocionada y no paraba de hablar sobre ser una hermana mayor.
—¿Y recuerdas algo más, Grace?
—No, señor. Nada más.
—Es igual, no importa. Buenas noches.
—Buenas noches.
—Tech, busca los documentos de Daniel Rivers. Personales.
—Diez archivos encontrados. Una coincidencia. Mostrando en pantalla...
Era una versión dibujada de su libro de familia. Salían el nombre de Daniel, de Marina, de Daisy y...
¿Annie? ¿Iban a llamar a su hija Annie?
—Pero eso no cuadra... Annie dijo que se llamaba así porque su madre se llamaba así. ¿Será algún apodo?
Pero seguía sin tener sentido. La historia le estaba consumiendo por momentos así que el hombre tomó aire y empezó a reorganizar toda la biblioteca.
—Tech, pon "Las fantasías" de Teleman.
—Reproduciendo aleatoriamente obras de Teleman, las Fantasías.
La música clásica cubrió toda la biblioteca.
El señor suspiró y comenzó a trabajar.
Eran ya las cuatro de la mañana cuando acabó de recoger todos los documentos. Reginald se duchó, se puso un pijama limpio y rápidamente se tumbó a dormir.
Los brazos de Morfeo le ayudarían a pensar.
[...]
Los niños estaban desayunando, tranquilamente, cuando su padre entró al comedor con el ceño fruncido y unas ojeras muy marcadas.
—Padre...
—No le esperabamos aquí, señor. —interrumpió Annie a Luther.
—Yo tampoco. —dijo sentándose.
Y como de costumbre, Herr Carlson volvió a sonar en el comedor.
El Sr. Reginald desayunó muy rápidamente y no lo volvieron a ver. Pogo mantenía sus entrenamientos mientras su señor estaba ocupado.
—Ocho, Cinco. Empiecen. —sentenció.
Ambos empezaron a practicar todos los movimientos nuevos que habían aprendido aquella semana aunque probablemente con más fuerza de la que deberían.
Son resentidos pero no idiotas, saben aprovecharse de la situación.
—Está bien, paren. Haremos algo nuevo hoy.
—¿Nuevo? —dijo Annie con un brillo en los ojos.
Cinco elevó un poco las comisuras de sus labios al verla tan emocionada. Por mucho que le fastidie, el verla menos risueña que de costumbre le afectaba.
Pero se sorprendió cuando Annie se mordió el labio en un acto inocente, haciéndole sonrojarse y revolviéndole las entrañas haciendo que dejara de mirarla abruptamente, preguntándose por qué lo hizo en un principio.
—Mpft. —dijo Klaus llevándose una mano a la boca ocultando su risa.
—¿Te pasa algo o son tus pastillas, Klaus? —preguntó Cinco con desdén.
—No son mis cosas, sino las tuyas. En concreto la número och- ¡AGH! ¡Imbécil, no hagas eso!
Cinco le había pisado.
—Bueno niños, déjenlo ya. Será un ejercicio de rescate. Con los equipos con los que lleváis luchando, haréis varias rondas de salvamento.
—¿Salvamento? —preguntó Luther confundido.
—La señorita Allison usará su don sobre los demás, que serán víctimas, mientras uno de los equipos tiene que salvar a los demás para que Allison anule el efecto. Empiezan ustedes dos, Señoritos Annie y Cinco. —sentenció mirándoles con una sonrisa divertida y por encima de sus gafas.
—Ustedes se esconderán por la mansión y sufrirán lo que Allison determine, y tienen que tratar de que Annie y Cinco los encuentren. ¿Está claro?
Annie y Cinco compartieron miradas. Rayos de rivalidad se atisbaban en ambas, era realmente preocupante.
—Claro y cristalino como el agua, Pogo. —dijo Annie sin dejar de mirar a Cinco.
—Pues Allison, cuando quiera.
[...]
I'm back bitches :D
La VIRGEN. Estoy superMegaUltraHiper bloqueada.
Lo juro, es una soberana mierda, pero tardé DOS SEMANAS DE ESCUELA en PENSAR esta cosa (normalmente tardo un día o dos por eso el shock ok? Ok)
Y son las cuatro de la mañana, o sea, la mejor hora donde fluye la inspiración como sangre por las venas.
Pero nada de nada, ni gota.
bueno, un besazo y feliz semana cabrones 💕😛
✨Annie has disconeccted from wattpad✨
ESTÁS LEYENDO
Cinco ¿Qué fue lo que pasó? ~Cinco Hargreeves y tú~
Fanfic-Llegué Van... ¿¡CINCO!? [...] - ¡ANNIE! ¡ES PELIGROSA, NO TE ACERQUES! - ¡PERO ES MI HERMANA! ¡JODER! ¡TAMBIÉN ES TU HERMANA! ¿ACASO NO TE IMPORTA? [...] -¿Por qué tienes trece otra vez? -¿Por qué no podría tenerlos? -No tiene sentido. -Lo tendrí...
