One-shot's MultiSaku

Minato y Sakura

Mi jefe es un lobo

La vida de Sakura Haruno había sido caótica a partir de los 15 años que su padre la termino abandonando junto con su mellizo Sasori el cual poco tiempo después también termino abandonándola en su cumpleaños número 18. No dejo ninguna carta en la que explicara el porque se tenia que ir o cual era la gravedad del problema que él tenia que lo haya orillado a irse sin decirle nada a nadie, simplemente una mañana que despertó él ya no se encontraba ni tampoco sus cosas. Lo espero por días junto al teléfono y algunas veces junto a la ventana donde siempre se le encontraba viendo hacia afuera como cámara de vigilancia, al pasar el mes supo que ya no tenia caso seguir esperando así que continuo con su vida; al cumplir los 21 años por fin tenia un trabajo estable pero estaba cargando con uno de los peores errores de su vida y era su novio Sasuke que conoció una noche en el bar y desde entonces no se lo ha podido quitar de encima.

-Sasuke por el amor de Dios estoy trabajando-dijo molesta por el teléfono. 

Estaba trabajando como secretaria de un importante empresario de Japón el cual a sido muy bueno con ella permitiendo le estudiar un poco en sus ratos libres o no le encarga tanto trabajo para llevar a casa. 

-¿Como se que estas en tu puto trabajo?-grito él enfadado casi dejándola sorda por lo alto de su voz-. Escúchame Sakura si se te pasa por la cabeza serme infiel te juro por tu padre ausente que me las pagaras ¡Te quiero puntual en la casa!-corto la llamada sin darle tiempo de contestar. 

Colgó el teléfono también molesta pero sobre todo herida por el tipo de hombre que se había convertido Sasuke en pocos meses de comenzar andar, se sobo su frente con ambas manos tratando de calmar la migraña que comenzó a nacer.

-¿Se siente mal señorita Sakura?-una agradable voz varonil hizo que levantara con rapidez la cabeza del escritorio encontrándose con su jefe recargado en la computadora-. Si te sientes mal puedes irte a tu casa temprano.

Minato Namikaze era el tipo de jefe que muchos soñarían tener por lo comprensible que era con sus trabajadores al igual que también tiene un gran carisma que no puedes odiarlo por más que te lo propongas.

-Señor Namikaze lo lamento mucho. Me encuentro bien, gracias-continuo escribiendo en la computadora sin dejarse cohibir por la mirada azulina del rubio sobre ella-. Es solo que...-se mordió la lengua dudando si hablar de sus problemas personales con su jefe.

Minato noto en seguida su inseguridad de seguir hablando por lo que le sonrió para tranquilizarla y con una voz calmada le dijo:

-Señorita Sakura siéntase libre de contarme sus problemas aun que no lo parezca doy muy buenos consejos-le mostro su pulgar animando más a la joven.

-Mi novio... tiene ya meses comportándose de manera muy celosa y solo me esta complicando más el seguir adelante no solo con nuestra relación sino también con mi vida- sus ojos verdes brillaban con amenaza de querer llorar.

Minato se puso serio más de lo normal.

-Sakura... cuando un hombre no respeta a una mujer en todos los sentidos no se le considera un hombre sino un animal. Tienes que ver por ti porque él día de mañana nunca sabrás lo que él te puede llegar a ser.

Sakura guardo silenció con la mirada en la computadora sabía que su jefe tenía razón, pero, la idea de dejar a Sasuke le aterraba no porque lo amara sino el como reaccionaria.

—Yo... No me sentiría cómoda estando con él encerrados en una casa–su boca la había traicionado al decir aquello.

Minato la miro con una sonrisa tierna mostrando sus dientes blancos y perfectos que era imposible que un humano normal tuviera esa dentadura.