Gaara y Sakura

3.7K 281 56
                                    


Jamás estarás sola

Salí del hospital muy emocionada con los resultados de sangre en mano, la enorme sonrisa que tenía en mi cara no me la quitaba nadie. Imaginaba como se lo diría a mi esposo Naruto, quizás la llegada de un bebé podía arreglar nuestro matrimonio que hace meses se ha enfriado.
Fue hace dos años que nuestros padres nos casaron para unir ambas empresas y hacerle competencia a los Uchiha, yo en verdad que estaba enamorada de Naruto y lo sigo estando es un joven alto de cabello rubio, tiene unos hermosos ojos azules que me enamoran y su piel canela hace resaltar todo de él; siempre fue atento conmigo, pero, cuando se enteró de nuestro compromiso su actitud hacia mi cambio un poco. Al principio pensé que todo esto lo tomo por sorpresa y que después de la boda seríamos la pareja más feliz del mundo... Grave error porque solo estaba concentrado en el trabajo y rara vez nos podíamos ver.
Suspire cansada al desanimarme yo misma con mis pensamientos negativos, debía de estar feliz porque estoy embarazada del amor de mi vida, porque seremos padres.

-¿Sakura?-escuche una voz muy masculina atrás de mí.

Me pare de golpe asustada hasta que reconocí aquella cabellera roja y esos ojos color acua que me miraban con mucha alegría.

-¿Gaara? No puedo creer que eres tú-este día no podía mejorar más. En frente de mi estaba mi mejor amigo de la infancia, aquel con quién solía jugar todo el día hasta que se tuvo que mudar de casa con la repentina muerte de su madre-. Dios estás cambiado.

El me abrazo con fuerza duramos dos minutos así abrazados disfrutando del tacto del otro, Gaara ya me ganaba bastante por altura incluso diría que es más alto que Naruto y eso que él mide 1.81.

-Estas muy hermosa... ¿Cómo haz estado? ¿Estás ocupada? Te invito a comer-todo esto me lo dijo sin soltarme en el abrazo.

Yo estaba impactada al tenerlo más de cerca podía oler su perfume varonil combinado con menta del chicle, esos labios delgados me dieron tentación de besarlos, esa nariz pequeña y respingada era justo como la recordaba. No pude evitar acariciar su rostro embobada por con hermosura, Gaara era un niño que siempre ocultaba su rostro tras un peluche y ahora que lo veía como un adulto era imposible no sentirse atraída.
Me di cuenta de las caricias que le daba ya tarde lo peor es que el parecía disfrutarlas porque tenía los ojos cerrados y su mejilla estaba apoyada en mi mano.

-Ejem... No estoy ocupada y claro que comería contigo-retire rápido mi mano de su rostro como si este quemara.

El me sonrió de manera coqueta sin soltarme, hizo unas señas con sus manos y rápido unos hombres con traje abrieron la puerta de un carro negro para que nos subieramos, Gaara en todo momento me tenía pegada a él que hasta ya pude sentir su vientre plano bien ejercitado provocando un enorme sonrojo por estar pensando en aquellas cosas.
Nos sentamos en la parte trasera del carro que estaba muy limpió que parecía nuevo, sus hombres se sentaron al frente para manejar y le picaron a un botón haciendo subir un vidrio para darnos privacidad.

-Wow Hasta... Pues ¿De qué trabajas? Jajaja-el se rió de mi chiste pero no contesto mi pregunta.

El camino estuvo tranquilo solo platicábamos de anécdotas de nuestra infancia, él solo reía y se apenaba cuando le recordaba lo gordito que era de niño. Debido a la distracción llegamos rápido a un restaurante donde varios de sus hombres nos escoltaron hacia nuestra mesa allí Gaara les dió la orden de vigilar afuera del edificio dándonos privacidad.

-Lamento si soy entrometido pero ¿Que son esos resultados clínicos que llevas allí?- estábamos ya sentados en la mesa frente a frente.

-Oh bueno no es nada malo-le sonreí-. Hace un par de semanas que me sentía mal y así que fui hacerme unos análisis de sangre, y resulta que estoy embarazada- su mirada se volvió completamente sería casi sin expresión que logro ponerme nerviosa.

One-shot's MultiSakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora