One-shot's MultiSaku

Sai y Sakura

La pintura de Sakura

El era un ninja de elite que fue entrenado para no sentir emociones teniendo como único objetivo no desobedecer las órdenes de sus superiores. Todo en su vida marchaba relativamente bien con misiones de alto peligro que tentaban contra su vida era el pan de cada día y la verdad que no le interesaba morir porque no había nadie quien llorara en su tumba.
Nunca tuvo curiosidad por ver el otro panorama que los demás ven el siempre estar sonriendo, llorando o peor aún amando; amar no existe en su vocabulario quizás cuando era más joven antes de quedar huérfano sus padres debieron de amarlo, pero, ¿Será lo mismo el amor de padres con el amor hacia una persona?
Cegado por la curiosidad y aprovechando que estaba en una misión en la aldea de la lluvia busco una biblioteca en dónde había casi nada de personas leyendo, busco la sección de romance y empezó a leer las portadas para saber cuál le llama más la atención.

-¿Buscaba algo en particular?-la dulce voz de una mujer logro ponerlo en guardía, no había sentido su presencia hasta que hablo.

Aún lado de él estaba una joven de 18 años que tenía un exótico cabello color rosa que hacía juego con sus ojos verdes los cuales lo miraban con interés, su piel era pálida no tanto como la de él pero si le hacía competencia quizás porque todos los de Amegakure no conocen la luz del sol.

-Busco libros sobre romance-respondio sin emociones.

La joven volteo a ver hacia los estantes con el ceño fruncido de concentración.

-Este libro trata sobre lo que busca-le paso uno que tenía la tapa color dorada y tenía como imagen a dos jóvenes abrazados-. Romance y suspenso.

Sai no estaba muy convencido sobre si esa bibliotecaria sabía en verdad lo que él estaba buscando aún así acepto el libro y fue a qué le dieran su tarjeta como miembro de biblioteca.

-En 15 días deberá de regresar el libro sino se le pondrá una multa-la joven siempre le estaba sonriendo ¿Porque le sonríe a un desconocido?

-Gracias...-al mirarla con más detalle se dió cuenta de la placa de metal que tiene sujeta en su lado derecho donde dice su nombre-. Sakura.

Sakura sonrió despidiéndose de él. Ninguno de los dos sabía que su historia se había sellado.

Pasado 13 días Sai regreso a esa misma biblioteca con más dudas que respuestas, terminó de leer el libro ese mismo día que lo rento pero no tuvo ninguna misión cercas de Amegakure para poder regresar hasta ahora. Cómo siempre en la biblioteca había pocas personas y en mostrados estaba la joven Sakura terminando un crucigrama.

-¿Le gustó?-volvio a sonreír cuando lo vio en frente del mostrador.

-Yo... No lo entendí muy bien-no sabía lo que era el sentimiento de pena por lo que no se le complico decir que aquel libro no lo había entendido para nada-. No entiendo porque sacrificarse por otra persona ¿Que obtienes a cambio?

Sakura guardo silenció mientras sellaba la tarjeta de Sai.

-Cuando uno hace sacrificios por alguien no espera ser recompensado, simplemente lo haces por el amor, la hermandad, el compañerismo o simplemente porque ambos son humanos.

Mientras ella hablaba, Sai comenzó a fijarse más en sus expresiones y en la forma que se movía su largo cabello.

-Eso vuelve vulnerable a una persona.

-Eso vuelve humano a una persona- tal argumento lo dejo sin palabras-. Creo que ya se que libro te ayudará a comprender mejor las emociones, sígueme.

Sakura era más pequeña que él llegando le solo hasta los hombros, allí se dió cuenta de lo delicada que se veía. Pasaron por algunos estantes hasta llegar a la sección de psicología dónde la joven tomo varios libros sobre la razón del comportamiento humano y se los entregó a Sai.