Palabras honestas

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Te miró fijamente mientras estabas peleando con los pensamientos de cuánto tiempo has estado inconsciente, nunca imaginaste que tu lesión sería tan fatal que estuviste inconsciente durante 8 meses ... Reiner dio otro paso hacia ti y se sentó en la cama mirando tu cara.

—¿Cuánto te acuerdas? —preguntó curioso, sacudiste la cabeza.

—Nada realmente ... lo último que sé es ... Vi a Levi matándote ... quiero decir, pensé que lo hizo, te cortó el cuello ... —cerró los ojos.

—Sí ... casi lo logra, pero pude salvarme gracias a mis poderes de titán —estabas tan feliz de que estuviera vivo pero trataste de ocultarlo, estuvo en silencio por un minuto antes de hablar de nuevo.

—¿Por qué estoy atada? ¿Tienes miedo de que me escape ...? —Reiner miró tus manos y luego tu cara.

—Perdóname, pero esta fue la única forma en que te dejaron quedarte aquí —lo miraste confundida.

—¿Ellos? ¿Quién dijo eso? —sus ojos apartaron la mirada escondiendo algo.

—¿Dónde estoy? Esto no está ... dentro de los muros, ¿verdad? —el asintió.

—Estamos en mi ciudad natal al otro lado del océano ... —tus ojos se agrandaron.

—¿Q-Qué? ¿Por qué me trajiste aquí? —estaba nervioso, se notaba por su comportamiento.

—No tuve otra opción ... si te dejaba allí probablemente te atacarían por mi culpa —no entendiste.

—¿Qué? ¿Por qué? ¿No hice nada? ¿No? Por favor, quítame estas cuerdas —se paró y se puso a caminar en círculos, definitivamente te estaba escondiendo algo. 

—No puedo hacer eso, si yo ... te matan —dejaste de luchar.

—¿Quién? ¿Qué hice? —se pasó la mano por el cabello —Por favor, dime, no sé qué está pasando aquí, ¿dónde están todos? ¿Qué les pasó a mis amigos? —finalmente se detuvo.

—Perdóname por arrastrarte a este lío, te prometo que lo arreglaré y te salvaré, pero mientras yo ... tengo que arreglar las cosas primero hasta entonces tienes que quedarte aquí en esta habitación ... —trataste de reprimir tus lagrimas.

—Pero ... ¿por qué no me lo puedes decir? No me importa lo horrible que sea, solo quiero saber qué pasó —regresó a la cama y se arrodilló junto a ti. 

—Te prometo que te lo contaré todo, solo dame un poco de tiempo ... —viste el temblor de sus ojos y supiste que la situación no era fácil para él, estaba en un lío profundo por eso decidiste calmarte y darle el tiempo.

—Está bien, esperaré, pero por favor ... quítame estas cuerdas, me duele mucho el hombro —sus ojos temblaron sabiendo lo grave que era la lesión. 

—Está bien, pero por favor ... no hagas nada estúpido —asientes mientras él lentamente comenzaba a soltar las cuerdas. Tus manos estaban libres pero no podías moverte en absoluto debido a la postura en la que estuviste durante tanto tiempo, sostuviste tu hombro sintiendo el dolor correr por tu cuerpo. Reiner vio lo doloroso que era y se sintió tan culpable porque, después de todo, era su culpa—. Déjame echar un vistazo —insistió y tocó suavemente tu brazo, te quedas quieta y dejas que se deslice por la camisa por tu hombro, la herida ya estaba curada pero quedó una gran cicatriz, la trazó suavemente con el pulgar que te deja temblando. Su piel era tan cálida y suave, lo mirabas y viste la expresión en su rostro—. ¡Lo siento mucho! —se disculpó con ojos temblorosos—. ¡Lamento muchísimo lo que te he hecho! —tu corazón comenzó a latir más rápido y estabas congelada ante él, su cuerpo estaba temblando, se sentía tan culpable por lo que hizo. Sin dudarlo, levantaste las manos y lo abrazaste profundamente para calmarlo, su cabeza descansaba en tu hombro sano y susurraste palabras tranquilizadoras en su oído. Sus manos finalmente se movieron y se cerraron alrededor de tu cintura para acercarte, nunca estuviste tan cerca de él pero no se sintió mal en absoluto. Reiner enterró sus manos en tu camisa y respiró pesadamente, pasaste una mano por su sedoso cabello rubio y calmaste su cuerpo tenso. 

—¡Nunca te culpé por lo que sucedió, si solo me hubiera mantenido al margen, no tendrías que sentirte culpable ahora! ¡Si tan solo hubiera podido controlar mis emociones entonces podría haberte salvado! —te acercó aún más.

—¡No! Es mi culpa que te involucraste, si tan solo hubiera actuado antes podría haberte salvado y llevarte, pero en cambio empeoré tu vida y te traje aquí en diferentes circunstancias que no me permitirán tenerte —sus palabras dejaron que tu corazón saltara y te sonrojaste, él notó tus emociones y aunque se sentía de la misma manera no dio el siguiente paso. Estaba demasiado asustado de que te rompiera aún más de lo que ya estabas, con admitir estos sentimientos te haría sufrir y eso era lo último que quería. Si esto terminaba, finalmente podría confesar todo lo que estaba pasando dentro de su corazón, pero en este momento mantenerte a salvo era la principal prioridad de la que tenía que ocuparse. Poco a poco te soltó y puso ambas manos en tu hombro haciendo que lo mires. 

—Lo prometo, cuando esto termine, nos alejaremos de este lugar juntos ... comenzamos una nueva vida en algún lugar donde nadie nos conozca, solo tú y yo —sacó suavemente el collar de su bolsillo y lo colocó alrededor de tu cuello. Te lo había quitado antes de traerte aquí, todo lo que estabas usando se te fue quitado, así que se aseguró de que no te quitaran el collar —He cometido muchos errores desde que te conocí, te mentí y te causé dolor, nunca pensé que podría cambiar ... mi corazón se corrompió con el odio y el miedo, pero después me hice amigo de ti, empecé a abrir los ojos de nuevo y ver este mundo desde un lado diferente. Sé que esto puede sonar extraño después de todo, destruí la vida de tantas personas, pero tenía que hacer lo que tenía que hacer ... esta misión nos fue encomendada y quería terminarlo sin importar cuál fuera el precio, usé a Eren y la amabilidad de todos para engañarlos, incluso a ti, planeé matarte junto con todos ... pero cuando estaba a punto de cruzar esta línea, algo me impidió hacerlo, tenía tantas ganas de hacerlo pero simplemente no pude hacerlo, dejé que las oportunidades se me escapan de los dedos tantas veces que ya no soy digno de mi título. Ahora mismo no soy más que un cobarde que no sabe lo que es correcto y qué está mal ya, tengo que encontrar la respuesta por mí mismo sólo entonces podré seguir adelante. No te estoy pidiendo que me perdones, pero quiero que entiendas mis razones, no nací malvado, tengo un corazón y emociones, pero son inestables, por eso no puedo ver mi yo real, sé que no tengo derecho a preguntarte esto y no tienes que hacerlo si no quieres pero ... por favor quiero que me ayudes a encontrar mi verdadero yo, quiero saber quien soy realmente y poder volver a sonreír, no estoy pidiendo perdón por mis pecados, no, quiero aprender a vivir con ellos —Sus palabras fueron honestas y te invadieron pero feliz , sabías que tenía un buen corazón pero siempre actuaba como si fuera una mala persona, esta confesión de sus pecados solo confirmaba su buen corazón y te alegrabas de escucharlo hablar contigo de esa manera. No buscó tu perdón, solo quiere que lo entiendas y lo aceptes tal como era, pero incluso si no te hubiera dicho esto en absoluto, ya lo aceptaste con todos sus errores y lo amabas desde el fondo de tu corazón. 



El mundo que ella vió [Reiner y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora