Todos los presentes quedaron mudos y boquiabiertos por la sorpresa, algunos no podían creer lo que veían, otros pensaron que estaban alucinando, la música que sonaba de fondo parecía haber desaparecido, solo el trinar de las aves se escuchaba en el jardin.
Ahora era más que evidente el porqué les habían pedido no hacer comentarios con respecto al ángel, para ellos era como estar viendo a Bulma, su muy querida amiga, la que todos conocían aunque ahora su aspecto fuera algo diferente, no se podía negar que era ella
Buruma ignorando a los demas se acerco a Vegeta y mirándolo a los ojos le dijo:
-Lo lamento mi señor, me tomé el atrevimiento de pedirle al supremo kaioshin que me acompañase a buscar un obsequio para el pequeño...
Se gira para ver a la nueva madre.
... Espero sea de su agrado... -ahora dirigiéndose a Mai con su acostumbrada sonrisa y extendiendo su mano hacia ella para entregarle un pequeño libro azul atado con un lazo dorado.Mai al igual que todos estaba impactada y sin querer un par de lágrimas ruedan por sus mejillas
-Es... Es... Es usted....
-Es mi ángel guía y como dijo anteriormente su nombre es Buruma -hablo el príncipe en tono alto como tratando que todos despertarán de su sorpresa -
Todos miraron a Vegeta y luego se miraron entre ellos, algunos también con lágrimas en los ojos
El ángel volcó su atencion en el bebé que el príncipe tenía en sus brazos, sus ojos brillaron maravillados al ver al pequeño y un sentimiento extraño se apoderó de su corazón, sentía que su pecho se iba a reventar de la felicidad y las ganas de tomar al pequeño en brazos eran tan evidente que Vegeta pregunta:
-Quieres cargarlo?
Por un momento ella duda, pero en un impulso hace desaparecer su báculo y luego con delicadeza toma al pequeño en sus brazos, este abre sus ojos y le regala una sonrisa al ángel.
Mientras lo observa embelesada de la boca del ángel se escapa un pensamiento:
-Tus ojos se parecen a los míos!
Todos se sorprenden con esa frase y era cierto, los ojos del pequeño eran idénticos a la que ahora lo miraba con ternura
El nuevo dios solo veia con atención la escena.
Buruma acercó su rostro al del bebé y con delicadeza plantó un beso en su frente para luego decirle:
-Eres perfecto...
Trunks y Bra estaban inmóviles observando la escena y aunque Trunks ya sabía quién era el ángel y creía estar preparado para verla, no pudo evitar emocionarse cuando la tuvo frente a él, Bra tenía lo ojos llenos de lágrimas pero estaba en shock no podía moverse tan siquiera, ambos deseaban poder correr y abrazarla, extrañaban demasiado a su madre y al ver al ángel frente a ellos, era imposible no pensar en ello.
El bebé comenzó a agitarse y a sollozar, Buruma sólo sonrió y camino hacia Mai, entregandolo en sus brazos dijo:
-Creo que tiene hambre y quiere a su mamá...
Mai que aún no se recuperaba de la sorpresa asintió con la cabeza
-Tienes un niño precioso, cuidalo mucho quieres?
Los ojos de Mai se abrieron a más no poder, la voz del ángel sonó exactamente igual a la de Bulma cuando le daba algún consejo, ese tono de voz condescendiente que usaba para darle ánimos.
Ella la considero como lo más cercano a la madre que nunca tuvo y le guardaba un aprecio muy especialMai no podía expresar palabra alguna, solo pudo mover la cabeza en respuesta al ángel
Buruma giro la cabeza y vio a Trunks y Bra, que tenían sus ojos puestos en ella desde que llegó.
Camino hasta estar frente a ellos-Ustedes deben ser los hijos del señor Vegeta, es un honor conocerlos! -dijo sonriendo-
-Ehhh... Igual... mente -dijo Trunks casi sin respirar
-Tu debes ser Trunk no es así? tienes un bebé muy hermoso, te felicito.
-Gracias... -dijo algo sonrojado y bajando la mirada
-y tu debes ser Bra no es cierto?
Ella no podía pronunciar palabra su cuerpo no paraba de temblar y solo podía observar al ángel con los ojos llenos de lágrimas
-Porque estas llorando? Ya sé, estas emocionada por ver a tu padre de nuevo no es as...
Buruma no tuvo tiempo de terminar la frase porque Bra se lanzó sobre ella aferrándose con todas sus fuerzas, ante la mirada atónita de los presentes...