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Dominique me llevo a mi casa más temprano de lo que habíamos planeado, Miranda había optado por dejarnos solos, había dicho que iría a ayudar a tía Margaret, mi amigo y yo habíamos subido a mi habitación, el se sentó en la silla giratoria frente a mi escritorio, jugó un poco con la lámpara de noche que estaba sobre este, la computadora estaba cerrada

—Hacía mucho que no entraba... —dijo matando el silenció, yo lo observé desde mi cama

—Usualmente íbamos a la habitación de Josh... La última vez creo que aún tenía mis Barbies en la juguetera —rei un poco mientras miraba el lugar donde ahora se encontraba mi estante de libros, habían cambiado algunas cosas

—Tienes razón, Sam y Ash te molestaban —rio al recordar yo tambien lo hice

—Arrancaron la cabeza de mi Barbie favorita, y se la dieron al perro del vecino —dije mientras recordaba como había estado tan enfadada con ellos

—Te hicieron llorar y Josh estaba como loco, era solo un niño pero no le gustaba que otros niños te molestarán... Y ahora ya tienes 17... Y en una nada estarás en la universidad —se puso en pie y se sentó al lado de mi, miro por un momento el techo —Cuando comencé la secundaria —rio mientras se tiraba de espalda a la cama —yo estaba muy enamorado de ti —volvio a reír —ha decir verdad, fuiste mi primer amor... Pensaba día y noche en tu sonrisa —yo lo mire con la boca abierta, el río al ver mi expresión ¿Como es que no me había dado cuenta de eso? —Luego de eso conocí a Sofía, mi primera novia, dejé de pensar en ti de esa manera, me obligué a hacerlo, Josh me iba a matar si lo sabía y no solo él —dijo mientras reía —Eres mi mejor amiga y siempre querré lo mejor para ti, siempre me importaras, aunque te cases y tenga 20 hijos, yo no dejaré de preocuparme por ti... ¿Ese tipo... Te hace feliz? —su pregunta me sorprendió, me puse en pie, camine en dirección a mis libros

—Gustavo... Es como un libro, un libro con una pésima portada, esos que cuando los ves deduces que son malos, sin embargo si le das la oportunidad, te das cuenta que todo el libro está correctamente escrito, con una elegancia en cada palabra, que te atrapa con el trama y no puedes evitar seguir leyendo porque quieres saber el final de la historia, y sin más te das cuenta que te ha seducido con su proeza y no quieres salir de ahí, porque es un libro reconfortante, relajante... Ha si es Gustavo para mí, en un principio lo juzgue mal, creí que era alguien al que no querría conocer por ningún motivo, hacía que cada vez lo odiara más, o eso creía yo, porque con cada acción que había hecho, me fue envolviendo en un lugar reconfortante donde jamás pensé en estar... Él no solo me hace feliz, me hace sentir cómoda, relajada y olvidó todos mis problemas con él

—Asi que lo amas —me sobre salte al escuchar aquellas palabras y no pude evitar un sonrojo eminente de mis mejillas

—No sé si es amor, creo que es demasiado pronto para poder afirmarlo, pero lo quiero, y quiero hacer cada cosa a su lado —dije volviendo a ver a mi amigo

—Bueno yo mejor bajo a ayudarle a la cena a tía Esme —dijo, golpeó el hombro de Gustavo que me había estado mirando todo este tiempo desde el respaldo de la puerta, me sonrojé aún más cuando sentí como sus manos rodeaban mis brazos y me mirada desde su altura, me sentía una pequeña niña expuesta, frente a él, eso parecía, me miraba directamente a los ojos, penetrando en mis secretos, se inclinó y me besó, podía sentir cada minúsculo milímetro de sus labios, su respiración chocando con la mía, sus brazos envolviendo mi cintura, mientras nuestras lenguas danzaban un Vals armonioso, era un beso profundo, lleno de sentimientos, se separó un poco de mi

—Lamento lo de hace ratos, no debí tratarte de esa manera ¿Puedes perdonarme?







Capítulo corto!
Espero que les guste!
Que les pareció la confesión de Dom?

Espero y les haya gustado
Gracias por leer
Atte. F

FabiolaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora