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— ¿Tu crees que Karol te sería infiel? - No dice nada, solamente agacha la cabeza - eres increíble Pasquarelli.

— Solo lo pensé.

— Con pensarlo es suficiente para saber que no confías en Karol, en tu novia. ¿Te suena?. Ella hizo todo por ti y tu lo desprecias de esa manera. Me parece que le estás conveniendo muy mal Ruggero.

— ¿Donde está?

— Esta dormida en el sofá - Estaba apunto de ir por ella, cuando lo detuve - No, no, no, no, ¿A dónde crees que vas?. Yo la voy a llevar a su cama.

Ambos fuimos a la sala. Tome a Karol en mis brazos y la lleve hasta su cama. La cubri con las sábanas y deposite un beso en su frente, provocando que sus ojos se abrieran de apoco.

— ¿Ya te vas? - Susurro como una niña pequeña -

— Si, pero no te preocupes, mañana vendré y tendremos un día de chicas.

— Okey - Me sonrió y volvió a cerrar sus ojos -

—Y tu - Señalando a Ruggero - me la cuidas, porque o si no te va a ir peor.

Ruggero.

Cuando Sabrina se fue, me saqué la ropa y me puse mi pijama. No sé porqué se enoja. Lo único que hice fue ir a la casa de Carla y tomar algunas cervezas. No fue para tanto. Ni que tampoco fuera el fin del mundo.

Camine hacia el baño y me cepille los dientes, al terminar, apague todas las luces y me acosté al lado de Karol. Estábamos cara a cara, teniendo la suerte de verla. Parecía un bebé como dormía. Acaricie dulcemente su cabeza y deposite un beso en su frente.

— Sabrina... - Susurro adormilada -

Creo que sigue enojada conmigo, pero haré lo posible para que me perdone. No debe ser tan complicado. Digo, solamente con despertarla de buena manera arreglará las cosas.

[••••]

Sentia como la alarma de mi celular intentaba despertarme, hasta que por fin pude habrir los ojos. Apague la alarma y me fui al baño. Hice mi típica rutina y bajé a la cocina para prepararle algo especial a Karol. Seguramente estará feliz de esto.

Ya eran las doce de la mañana y a esa hora Karol se despertaba. Todo estaba preparado especialmente para ella: Panqueques con Nutella y fresas, jugo de naranja, ensalada de fruta, cupcakes y pan tostado.

Si esto no hace que me perdono, no se que más hacer.

Estaba esperando a Karol, cuando la veo salir vestida así:

Estaba esperando a Karol, cuando la veo salir vestida así:

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Se veía extremadamente hermosa con esa falda. Fue bajando las escaleras viendo su celular, hasta que levantó la mirada y me miró de manera diferente. Siempre, cuando se levantaba, me miraba con dulzura y con un brillo en sus ojos, y ahora me ve con ojos de..... no me toques ni me hables.

— ¿Qué es todo esto?

— Es para ti, ¿Te gusta?

— La verdad.... no. Voy a desayunar con Sabrina. Si quieres, puedes invitar a Carla y desayunar con ella - Sonrio y se sentó en el sofá de la sala, dándome la espalda -

Ahora sí no se que hacer para que esta mujer me perdone. Esta tan.... amargada enojada conmigo. Me pare de la mesa y fui hasta donde estaba sentada ella. Me senté a su lado, pero en cuestión de segundos se cambió para el otro sofá, siempre viendo su celular y escribiendo.

¿Con quién estaría hablando?. Seguramente con Sabrina, o con sus amigos.

— Karol, ¿Podemos hablar?

— Si, si quieres

— Que bueno, porque.... - Me interrumpe -

— ¿De qué quieres hablar? - Guardando su celular - ¿De cómo me dejaste sola en el penthouse?, ¿De como te fuiste con una chica, sin mi?, ¿De como tuve que llamar a Sabrina para que me acompañara horas y horas a esperarte?. Tu dime de que quieres hablar y lo resolveremos.

— Karol, ¿Podrías dejar tus celos por un momento por favor?.

—Mira quien habla, el señor que no quiere que esté con otros chicos, a excepción de los gays.

— Pero por lo menos yo no harmo una escena como tu. Creo que deberías trabajar de actora señorita Sevilla.

— Ah, ¿Ahora sí soy señorita Sevilla, no?. ¿Después de haberme cogido en la ducha?. Muy tarde lo tuyo señor Pasquarelli.

— Solo te cogi esa vez, porque te traía ganas desde hace tres años. Discúlpame que no me haya contenido.

— Ya somos dos. Siempre quise saber como se sentía que un profesor te cogiera, pero yo nunca quise quedarme.

— ¿Y por qué no te fuiste?. Sabias que esto no iba a funcionar y te quedaste - Le gritó enojado -

— Si, me quedé.... me quedé.... porque, cada vez que me castigabas o decías que iba a fallar, me dolía. Pero nada me dolió más que estar todos los días en mi casa. Me quedé, porque si me quedaba contigo, todos esos momentos horribles que tenía en mi cabeza, se irían.

Veía como de apoco, sus lágrimas caían por sus mejillas. Ella intentaba no llorar, pero era inútil. Se dio media vuelta y se limpió, para luego mirarme a los ojos.

— Creo que fue mala idea venir contigo - Tomo su celular y corrió de ahí rápido -

Intente seguirla, pero algo dentro de mi, me decía que la dejara a solas. Ahora que lo pienso, creo que fui muy dura con ella. Solo estaba celosa y yo como un tonto tuve que echarle todo en cara. Ahora sí que no me va a querer perdonar.

Ya la perdí...😔

Karol.

Cunado salí del edificio, me puse unos lentes oscuros, para que la gente no me viera llorar. No podía dejar de llorar. Las lágrimas salían por si mismas, como si tuvieran voluntad propia. Mi corazón y mi cabeza no ayudaban mucho tampo, ya que estaban en guerra. Uno de ellos me decía que lo dejara, que deje de estar atrás de él y que siguiera con mi vida (Mi cabeza). La otra parte me decía que estas cosas van a pasar, pero que no durará por siempre. A veces las perso as se enojan y dicen cosas que no quieren decir (Mi corazón).

Estaba tan mareada y no sabía a quién escuchar primero. Era un sube y baja sin sentido. Una montaña rusa, con la cual me mareaba y que tarde o temprano tendría que bajar y decidirme por mi misma. O quisas solo era un juego, en el cual estaba perdiendo.

[••••]

💋ᴍI sᴇxʏ ᴘʀᴏғᴇsᴏʀ ᴠᴏʟᴠIᴏ ᴘᴏʀ ғIɴ💋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora