Capitulo 8 🎭

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-Descansa, Karma.

Lo tape con su sabana y le di una ultima caricia en su mejilla en esa noche, porque no se cuando podre tocar su piel de vuelta. Y sin más, salí de la casa para dirigirme a la mía que estaba bastante lejos. El camino lo use para ponerme nostálgico.

En mi niñez, era un poco apartado de los otros niños, por ser un poco solitario. A los 10 años conocí a Karma, y juro que, no solo tiño mi mundo de rosa, si no de todos los colores brillantes y mas hermosos que puede existir. Estuvo conmigo, éramos un dúo, mejores amigos. Aun no se porque él me eligió entre tantas personas, tal vez fue algo del destino o simplemente el azar, pero sea lo que sea, lo agradezco. Sonreí con calidez, recordando cada momento en esa poca. En parte, creo que concordamos tanto por la ausencia de nuestros padres en nuestra vida, en alguien nos debíamos apoyar, y eso era entre nosotros. Por esa ranzón yo tenia su llave y el tiene la mía, después de todo, entre nosotros la confianza sobraba.

Por eso no quiero a una tercera.

Quiero que Karma solo confié en mi, tanto como yo lo hago con él. Que me quiera a mi, solo a mi. Pero anhelo su felicidad, y si eso significa apartar mi egoísmo, quizá deba hacerlo. Era una discusión interna que desde que Karma empezó a interesarse en chicas. Me sentía algo estúpido, pero que puedo hacer, es un sentimiento que de tanto ignorarlo ya se hizo imposible de contenerlo.

Cruce mis brazos buscando calor, la madrugada era fría, acelere el paso para llegar canto antes a mi casa y lograr dormir. No se que pensar de esa noche o si Karma recordara todo lo que paso. No pude evitar sonreír, sus labios eran suaves.

Ojala, no me odies.

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-QUE CREES QUE HACES.

El grito me asusto tanto que sentí que salía mi corazón del pecho, luego me empujaron, sintiendo dolor por mi espalda, mire al causante, ¿Quién mas podría ser? Karma me miraba totalmente enojado, creía ver sus ojos soltar chispas de rabia.

-Explícame, por favor, que mierda pasa por esa cabecita tuya -Empezó a andar un trecho a otro, como si fuera animal enjaulado, a punto de devorarme. Temblé un poco asustado.

-N-No podía aprovecharme, ¡No cuanto estabas casi inconsciente! 

-Si, de poder, puedes -Se acerco a pasos fuertes y me agarro de la remera para estar cara a cara- Y lo quieres, es lo peor de todo. Me deseas, haz algo mierda -Me quede callado un momento, mirando esas orbes cobres que me miraban enojado, y por alguna razón, sentí un cosquilleo en mi cuerpo.

-No, no lo hare- Agarre sus manos entre las mías, con la esperanza de que afloje el agarre que me dolía.

-Veremos si sigues pensando así, luego de mostrarte cuanto me quieres... dentro tuyo.

De un movimiento brusco, me coloco en cuatro, me quería mover y correr de ahí. Esto parecía una pesadilla. Sin embargo, mi cuerpo no respondía a mis peticiones, mire a Karma con suplica, de que me deje. Pero su mirada de lujuria y su lengua pasando por sus labios me indicaban otra cosa.

-No quiero... Karma, basta.

-Nagisa, soy parte de tu mente, esto es lo que te pone. Es lo que tu cuerpo quiere -Di un respingo al sentir sus dedos tocar mi culo, aun con pantalón, dándome escalofríos- Ya no puedes negarlo, date cuenta.

Me sonroje tanto al darme cuenta que así era, porque sentía húmeda mi entrepierna por culpa del presemen. No pude evitar sentirme enfermo por esto, ¿Acaso me ponía que Karma este enojado y me fuerce?

-Si -Lo mire tímido, arqueando mi espalda, ya era inútil luchar contra mi cuerpo- Te quiero.

-¿Ah si? -Vi como se iba liberando del cinturón que él llevaba puesto, dejándome en mi imaginación el resto. Sentí que babeaba- Prométeme que la próxima vez, actuaras y harás que sea tuyo. No seas cobarde.

Me mordí mi labio al verlo desabotonarse su camisa, tanto él como yo no nos apartamos las miradas del otro. El pelirrojo, como si fuera a propósito, tardaba en desbotonarse. Estaba considerando una tortura esto. Entendí luego que simplemente estaba esperando a que respondiera.

-Lo... prometo.

-Que buen chico que tengo -Y sin mas, él me bajo los pantalones, y con poca sensibilidad, me abrió las nalgas, rozando mi entrada a lo que no pude evitar gemir, sin apartar mi mirada de él- Pero sabes... Aun estoy enojado contigo, te tocara masturbarte tu solito -Me sonrió con travesura, soltándome y alejándose.

-¿E-Eh?

Abrí los ojos con cansancio, de reojo vi la hora encontrándome que solo logre dormir 3 míseras horas. Me levante y, en definitiva tenia una erección. Me tape con mis manos mi cara  y solté un grito de frustración.

-¿Hacia falta? Karma estúpido.

Sin más me recosté en mi cama, agarrando con mi boca la camisa que aun no me cambie y desabrochándome mi pantalón, y sin perder tiempo me saque mi miembro de mis bóxer. Realmente, estaba tan cansado y frustrado que no tenia ganas de hacer esto. Con mis manos jugué con el de arriba a abajo, parándome a ratos en mi glande, bordeándolo con mis dedos. Solté un bufido, esto no era suficiente.

-Lo odio y lo quiero.

Pase por mi boca un par de dedos míos, lubricándonos, recordando el sueño y lo que Karma pudo hacer. Cerré mis ojos, metiendo mis dedos dentro de mi parte trasera, intentando con todas mis fuerzas imaginar que era Karma el que me hacia eso. Hundido un poco en la fantasía, me auto nalguee y solté un gemido.

-¿En serio esto es lo que me gusta? -Escondí mi cabeza en la almohada, avergonzado metiendo mas profundamente mis dedos, logrando rozar mi punto un par de veces para después venirme, cansado, vi mi mano con el semen blanquecino e hice una mueca- La paja mas triste de mi vida, puta madre.



xd

saben que signo, asc y luna son?? díganme 7u7. Yo soy solcito en capi, asc en leo (bien diva ysi) con luna en géminis uwu.

¿Qué les va pareciendo la historia?

Te deseo - KarmagisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora