Pasó una semana, Katsuki había dejado de ir a la escuela, había pedido un permiso para faltar por al menos dos semanas y media. Monoma lo visitaba casi todos los días, lo que más le preocupaba al rubio es que Katsuki dejara de comer, así que cuando iba se encargaba de que el cenizo comiera aún que sea un plato de arroz.Con lo que no contaba es que cada que se iba el cenizo vomitaba absolutamente cualquier alimento que hubiera ingerido en el día.
Una tarde que Mina y Monoma se encontraban hablando en la sala del cenizo, este tuvo la "necesidad" urgente de usar el sanitario, lo curioso es que tenía ahí alrededor de quince minutos.
—¿No crees que Kat ya tardó mucho?— Preguntó volteando por quinta vez a las escaleras
—Si... pero no te preocupes, quizás lloró de nuevo, sabes que no le gusta que lo vean así— dijo mientras acariciaba ma mano del rubio para tranquilizarlo
Se escuchó la puerta del baño abrirse, y después los pasos de Katsuki caminando hacia las escaleras.
Bakugo estaba mareado, vomitó una, dos, tres veces y las arcadas continuaban, cuando por fin pudo salir se sentía fatal, su estómago y garganta ardían, se sentía cansado, débil, sin fuerzas y con un mareo que parecía terremoto.
—Kat porqué- — se detuvo al verlo en el balcón —Kat, ¿Te sientes bien..?
El cenizo no respondió, sintió que si abría la boca aunque sea un poco volvería a vomitar. El mareo regresó más fuerte, obligándolo a recargarse en una pared.
Estaba teniendo problemas para respirar, todo a su alrededor le daba vueltas y sus párpados estaban luchando contra el para cerrarse.Monoma subió rápidamente las escaleras, llegando justo en el momento que Katsuki perdió el equilibrio y cayó inconsciente.
—¡Kat!— dijo tomando el cuerpo del cenizo entre sus brazos —¡Mina llama una ambulancia!
Izuku había llegado corriendo a la sala del hospital en cuanto recibió la llamada de Mina, donde para su desgracia, se encontró cara a cara con Monoma. Quien para aclarar, no le agrada en lo más mínimo.
—¿Cómo está Kacchan?— preguntó
—¿Dónde está el tío Masaru?—No me han dicho nada aún— contestó seco —Y el señor Masaru tuvo que viajar por trabajo
El peliverde apretó los puños, sea lo que sea que le pasó a Katsuki fue culpa de ese maldito rubio, de eso estaba seguro.
—Si yo hubiera estado con el, esto no habría pasado..— dijo en voz baja, pero lo suficientemente alto para que el rubio escuchara
Monoma se mordió la lengua antes de contestar, en menos de un segundo ya había se visualizado rompiendole los dientes al chico.
—¿Disculpa?— preguntó lo más calmado que pudo
—¡¡Si tu hubieras cuidado bien de él esto no hubiera pasado!!— exclamó, aguantando severamente las ganas de golpear al rubio
—¿Perdón?— dijo con una voz siniestra, estaba enojado, y mucho
—¿Tu que demonios sabes? Katsuki no ha querido verte desde el funeral, ¡¡No tienes una idea de cómo está!!—¡¡Pues para ver que terminó aquí no necesito verlo para saber!!— Monoma suspiró, ya había lidiado con ese fastidioso peliverde muchas veces, no tendría ningún problema en hacerlo de nuevo
Sonrió, como es típico en el, se metió las manos a los bolsillos y se dirigió al peliverde
—¿Tanto te duele que me haya elegido a mi en vez de a ti verdesito?— dijo con veneno, logrando que el peliverde se enojara aún más
—El no debería estar con alguien como tú, es todo
—¿Ahh? Bueno quizás no debería pero lo está,después de todo no iba a quedarse con el tipo que arruinó su vida ¿O sí?
El peliverde se quedó estático, ¿De qué demonios estaba hablando?
—¿De qué mierda hablas?
—¿Ya no lo recuerdas?— dijo en tono burlón —Ese día que tu y los bastardos de tus amigos le metieron una paliza, ¿Me creerías si te dijera que aún tiene las marcas?
El peliverde se quedó helado, solo quería darle un susto, una pequeña venganza,¿Realmente lo habían golpeado?
—¿De que mierda hablas?— Preguntó seco
—Sabes por fuera Katsuki puede parecer demasiado frío y sin sentimientos, pero una vez que conoces todo de el, te das cuenta quien es el verdadero monstruo entre ustedes dos— Dijo el rubio mordiendo su labio
—No te entiendo
—Haber— Dijo cruzando los brazos
—¿Tu querías vengarte de él verdad? Dime una sola vez que el te haya puesto una paliza como la que tu le mandasteModoriya se quedó callado.
—Una sola vez, una, que te haya dicho que te tiraras del ultimo piso, o que te haya dicho que eres un maldito villano con carácter de mierda, una, nada más
—E-eso n-no-
—¿No es lo mismo? Tienes razón, a diferencia de el, tu casi lo matas— Monoma apretó los puños con fuerza, hasta casi sentir como sus uñas de clavaban en la palma de su mano, aún recuerda aquel día que se encontró a Bakugo tirado en el suelo y sangrando, tuvo que llevarlo al hospital de emergencia ya que tenía rota una costilla
En eso un doctor apareció por el pasillo, interrumpiendo el casi homicidio del sucesor de All Might.
—¿Familiares de Katsuki Bakugo?— Preguntó leyendo la hoja
—Yo, soy su novio— Dijo rápidamente el rubio. El doctor hizo una mueca más no hizo ningún comentario al respecto.
—Su cuerpo estaba muy débil debido a la mala alimentación que ha estado llevando los últimos dias, por eso se desmayó
Monoma se mordió el labio, sabía que había algo mal cada que hacía que Katsuki comiera, seguramente vomitaba todo cuando el se iba.
—¿P-puedo verlo?— Preguntó el rubio, el doctor asintió y señaló el cuarto, Monoma caminó a paso veloz hacia la habitación
El rubio abrió la puerta rápidamente, la habitación estaba ordenada y las cortinas abiertas, dejando paso a la luz del sol, que iluminaba el rostro de Katsuki, quien miraba fijamente hacia afuera.
—¡Kat!— Habló el rubio, captando la atención del chico
—Creí que estarías enojado conmigo— Dijo con una voz débil, Neito se acercó a la camilla, sentándose a su lado
—Si lo estoy— Dijo firme pero calmado
—Pero primero debes estar bien, ya después me enojare contigoEl cenizo se rió ligeramente, para después tomar la mano de su pareja.
—Me asustaste Kat, crei que tenías algo serio— Dijo con una voz preocupada, Katsuki se sintió mal por su pareja, lo hacía preocuparse demasiado
—Lo lamento...— Dijo en voz baja
—¿Te causé muchos problemas?—Un casi infarto solamente— Dijo con algo de gracia, pero suspiró pesado al ver la expresión de Katsuki
—Lo siento— Katsuki estaba avergonzado, solo había preocupado a sus amigos y a su novio, por algo tan simple que era comer
—Ya no importa— Monoma le sonrió a su novio —Ahora no importante es que te pongas bien
Aunque ya me las pagarás por darme el susto de mi vida
—Namji🍒