𝗡𝗮𝘁𝗮𝗹𝗶𝗮 𝗦𝗮𝗹𝗮𝘀 ─ [ 𝐇𝐨𝐠𝐰𝐚𝐫𝐭𝐬 𝐌𝐲𝐬𝐭𝐞𝐫𝐲 ➛ 𝓟𝓪𝓻𝓽𝓮 2 ]

Capítulo 11: Guerra de los gigantes

Multimedia: Penny Haywood (Amanda Seyfried)

Natalia bajó a las mazmorras para asistir a clase de pociones, su primera clase del día. Cuando llegó, vio que Liz, Barnaby e Ismelda hablaban en la puerta del salón.

Mente de Natalia: ¿Qué hace Ismelda con ellos?

Liz: —entusiasmada de ver a Natalia— ¡Natalia! ¡Reúnete con nosotros! ¡Estamos hablando de Thestrals!

Natalia: —confundida— ¿De Thestrals?

Liz: ¡Sí! Escuché que hay Thestrals en el bosque prohibido. ¿Puedes verlos, Natalia?

Barnaby: —sonriente— Le he dicho a Liz que tú vas mucho por ahí para cuidar a las criaturas de Hagrid.

Natalia: —torció la boca levemente— Se suponía que no debías contar eso a todo el mundo...

Barnaby: —la expresión de su cara cambió completamente— Lo siento, Natalia.

Natalia: No importa. —intentó sonreír— La verdad es que al bosque prohibido no suelo ir para cuidar a las criaturas de Hagrid... Tampoco he oído nada de que haya Thestrals, ni mucho menos, he visto alguno.

Ismelda: A mí me encantaría poder ver un Thestral.

Natalia: Pero eso significaría... —Ismelda la interrumpió.

Ismelda: —con una sonrisa malévola— Sí.

Natalia: —incómoda— Bueno... —señaló la entrada al salón con el dedo índice— Creo que voy a ir entrando...

Ismelda: Cuando salga de Hogwarts, me mudaré a Pequeño Hangleton. He escuchado maravillas de su cementerio. —Natalia rodó los ojos y entró al salón.

Barnaby: —Natalia escuchó su voz desde el interior del salón— Si yo fuera un fantasma, no me quedaría en Hogwarts. Creo que me mudaría a una playa.

Natalia: Profesor Snape, necesito hablar con usted sobre algo.

Snape: —hablando con su habitual semblante serio— ¿Tienes pruebas de que Patricia Rakepick es una maleante que quiere destruirnos para su beneficio personal?

Natalia: —tras una leve pausa— No.

Snape: Entonces podemos hablar al final de la clase. Siéntate.

Natalia se dirigió a su mesa habitual, tan solo estaban sentadas Rowan y Mérula. La rubia le dedicó una sonrisa a la primera y una mueca de desprecio a la segunda.

Mérula: Podríamos ser un buen equipo, Salas. Siempre y cuando sigas mis órdenes.

Barnaby: —entrando al salón junto a las chicas— Snape dijo que yo sería un buen conejillo de indias. ¿Cómo sabe que yo amo a los animales? —se sentaron en los huecos que quedaban libres en la mesa.