Would you come to the dark side with me? - Twilight

Capítulo 02

Semanas antes

Un par de nómadas corrían por el bosque esquivando cualquier cosa que se les Cruze, tenían un camino trazado del que se supone que ya deberían haber llegado, pero algo los retenida en ese pequeño problema, o bueno, solo lo retenida a él, su amiga solo lo seguía a regañadientes.

-Damien-Le regaño la chica por milésima sexta vez en todo el día, ya se había hartado.

-Ya Judith, ya-Se quejo deteniéndose un momento para pensar, no tenía ni idea de porque no podía salir si quiera del estado.

-Ya? Llevamos días intentando irnos a escocia, y no podemos por...

Damien se encontraba con la mirada perdida mirando a un punto inexistente, se veía demasiado callado, al menos más de lo normal... lo único que este quería es irse de una buena vez de este pueblucho, pero no podía. Algo muy dentro suyo le decía que debía quedarse, pero simplemente no sabía la razón, y cuanto más se lo preguntase menos tenía respuesta, solo un rostro, el rostro de una hermosa chica de cabellera del color azabache y unos brillantes ojos del color obsidiana.

-No pue...-El chico no pudo terminar de hablar porque unos fuertes ladridos y gruñidos se escucharon al otro lado del riachuelo.

Unos enormes lobos de diferentes tamaños comenzaron a parecer en su rango de visión, se veían enojados, aunque ya habían salido de su territorio, del que apenas habían salido sin un solo rasguño.

Damien se puso de pie de un salto al lado de su rubia amiga viendo cada movimiento que hacían, tanto la pequeña manada de metamorfos como a su amiga. Judid rodo los ojos con fastidios, no quería estar aquí y en cima tendrá que aguantar los ladridos de esos perros, ya no iba a aguantar más.

Enterró un poco sus pies para impulsarse, pero la mano de su compañero la detuvo sin decir porqué, solo miraba con atención a cada uno de los lobos.

-Ahora qué? ¿Tampoco puedo defenderme porque algo te dice que no lo haga?

-No, su cruzas el riachuelo te despedazaran en segundos.

-Cuál es la diferencia de quedarme aquí o que vaya haya? A mí me aparece la misma cosa.

-No pueden cruzar-Le mostro- No porque no quisieran...

-Porque no pueden... - Terminó la chica por él.

-Tienen un tratado-Dijeron al unísono Damien y una voz desconocida para ellos, los Cullen habían llegado al escuchar los ladridos desde su casa.

Ambos nómadas se mirado entre sí, por un lado, podían pelear por unos lobos que no dudarían un segundo para arrancarles las cabezas, y por el otro tienen a un clan de 8 vampiros, y una chica que parecía también una, pero con un corazón bombeando lentamente, claramente era algo más que una simple vampira, y tal vez su desconocimiento en ella podría matarlos.

-Cuál decides? ¿El clan que nos pone en desventaja o los lobos hambrientos? - Así era su dinámica, Judid era la de la fuerza y Damien el de las decisión que salvaría su vida.

-Ninguna es buena-Respondió poniéndose en el medio por que después de todo en ambos podrían morir y ella lo sabía.

-No es tan difícil escoger Robin- Se puso igual que el chico lista para luchar, llamándolo por ese apodo que el tanto odia por una razón, cuando se enoja deja atrás las posibilidades y cálculos y se lanza a la acción, pero esta vez fue diferente.

-No hay opción intermedia, Rose-Le recordó dejando en claro la posición de ambos, no había salida, llamándola como Rose de Titanic, un apodo que le puso cuando se enteró como murió.

Estaba confirmado, era su fin, o eso creían.

El lector de mentes estaba confundido, le era difícil entrar a la mente de ambos, y cuando por fin podía entrar, eran por escasos segundo, además que, pensaban en diferentes idiomas desconocidos para él.

En cambio, la pequeña vidente estaba extremadamente emocionada, por fin había llegado el momento, ellos serían sus nuevos hermanos. Sus hermanos en cambio, estaba alerta por los nuevos intrusos en el territorio, y extrañados, sabían que ella había visto algo, pero Alice no estaba dispuesta a tregua, tenían que enterarse por su cuenta.

-Buenos días- Comenzó Damien en un idioma que ellos conozcan, el inglés. Intentando sonar lo más cortes posible, sin que se note su nerviosismo.

-Buenas noches-Le contesto de igual forma Carlisle toman la palabra- Sus actividades de caza nos causando problemas.

-Nuestras actividades de caza les...-El chico a su lado la detuvo, su impulsividad no era lo que necesitaban en este momento.

-Eso ya no va a ser un problema, estábamos por irnos- Judid se tranquilizó al escuchar eso, a Damien viene de una época que lo que dicen es la ley, nada de mentiras, siempre cumpliendo con su palabra, o al menos así lo criaron.

-No, no pueden irse- La pequeña vidente se apresuró a decir, no podía dejar que se fueran.

-Ahora qué? ¿No podemos irnos porque nos van a matar y tiraran nuestras cenizas al rio? Adivina que linda, igual moriremos en algún momento- De un momento a otro esta dejo de intranquila a estar alerta, así era ella- sique sin haber posibilidades? -Pregunto, del mismo idioma del que hablaron al principio.

Judid quería saber si había al menos un 10 por ciento de que salieran vivos, a ella no le importaba morir, pero había le hecho una promesa a alguien muy importante para ella y no tenía la mínima intención de romperla.

El joven de aparentes 17 años repaso todo lo que paso en su mente, desde la aparición de los lobos hasta este momento, quien llego primero, quien llego de ultimo. Debe ser alguna característica de los poderes del cobrizo, además de ser un entrometido.

-No conocemos la zona, con suerte saldremos del bosque sin que nos atrapen-Murmure del mismo idioma que ella, indonesio. Las posibilidades en estos momentos estaban en su contra.

-Hemos salido de peores, Robin- Le recordó la chica, esperando a que el chico le diga el momento exacto de la acción.

-No pueden irse. No te has ido porque algo te retiene, eso es porque tu compañera vendrá aquí dentro de poco.

En cuanto salieron esas palabras de su boca, Damien se congelo en su lugar, eso nunca se le había pasado por la mente desde que se enteró de su posible existencia, simplemente creyó que nunca la encontraría, y ahora... le dicen que va a estar aquí, que esa es la razón por la que no podía irse.

Pero eso no soluciono nada, solo lo empeorada. Ellos estaban bien antes de todo esto, Judid... Por más que Damien la o lo quiera conocer, Judid es la única que familia que tiene, aunque no sea de sangre. Él no podría cargar con el remordimiento y la incertidumbre si llegase a abandonarla.

No podría....