Demons (Jerome Valeska X Reader) [Historia Interactiva]

Un Sauce Llorón

Narrador omnisciente

En Ciudad gótica no hay héroes

No hay mejor frase que describa a la ciudad. No hay mejor manera de describir a sus habitantes.
¿No me creen?
Entonces, ¿porque nadie ayuda al pequeño que está gritando de dolor?

Zachary Trumble no es un buen hombre. De hecho, es un asco de persona y más por el hecho de que sumergió la cabeza de su sobrino en sopa ardiente.

Y ni siquiera fue idea de Jerome robar las galletas.

Jerome pov

No es justo. ¿Por qué me hizo eso? ¿Por qué nadie me ayudó?
¿Por qué mentiste Jeremiah?

-Más te vale no volver a robar maldito mocoso. Me dijo el tío Zach.

Yo no pude contestar. Ni siquiera puedo hablar. Que te traicione tu único amigo es una sensación horrible.

Alguien entró al restaurante, aproveché el momento para salir corriendo de ese espantoso lugar.
Corrí y corrí, no me detuve hasta que llegué a un bosque.
El frío era intenso y yo ya no podía sentir mis piernas del cansancio.

Tuve que detenerme a descansar. Me senté debajo de un gran sauce y sentí como las lágrimas caían por toda mi cara.

Y recordé el rostro de mi hermano, aterrorizado. Es un cobarde por no ayudarme.

De repente, escuché un ruido. Me di cuenta que había una niña de mi edad del otro lado del sauce en el que me había sentado.

Es linda. Un momento, ¿cómo no la vi antes?

Me acerque a ella para hablarle y ¡está sangrando!

-¡¿Oye estás bien?! Claro que no lo está. Agh que pregunta tan tonta.

La niña no me contestó. Sólo se me quedo viendo con sus grandes ojos marrones.

Es algo callada.

-Necesitas un hospital. Al igual que yo.

-No me digas. Al fin habló.

Y de un momento a otro se desmayó. Seguro le sorprendió lo guapo que soy.

O tal vez fue por la puñalada que tiene en el estómago.

Nah, seguro fue por mi belleza.

Se escucharon algunas ramas crujir y entonces vi a un sujeto calvo vestido de negro. Huh me gustan sus armas.

-¡Ángelito! ¿Dónde estás? Dijo el hombre genial.

Sentí una mano agarrar mi brazo y otra tapar mi boca. La chica es intensa eh.

-No hagas ruido pelirrojo. ¿Pelirrojo? Me gusta como sonó eso.

Asentí con la cabeza y ella se apoyo con su brazo alrededor de mi cuello. Nunca había tenido a una niña tan cerca. Huele a bombones.
Con su mano señaló hacía el lado opuesto de donde provenía la voz del sujeto calvo.

-Tienes la cara quemada y a mi me apuñalaron por la espalda, literalmente. Vamos al hospital. Dijo la niña.

No tenemos de otra ángel.

-¿Quién es el sujeto que te busca? Y ¿tu nombre es ángel?

-Se llama Victor Zsasz, trabaja para Carmine Falcone. Y no, mi nombre es ___ pero puedes llamarme ángel, así me dicen todos.

Un verdadero ángel caído del cielo. O bueno de un sauce Llorón.

Nos alejamos lo más rápido que pudimos del bosque y de ese tal Victor. Pronto llegamos al hospital y una vez en urgencias los doctores la apartaron de mi.
Otros médicos me atendieron a mí, al salir decidí esperarla en el vestíbulo junto con los parientes de otras personas.

Todas éstas personas están esperando e incluso llorando por alguien por la cual se preocupan. Y aquí estoy yo, sin nadie que me espere o si quiera que se preocupe por mí.

-Pelirrojo, ¿cómo estás?

O tal vez si tengo a alguien.

-Yo bien, después de todo no fue a mi a quien apuñalaron.

-Los doctores dicen que necesito permanecer en el hospital durante unos días, para reposar.

-Y, ¿no deberías de estar descansando entonces?

-Tu me ayudaste a llegar aquí sin que Víctor me atrapara, quería saber si estabas bien. Después de todo, a mi no me quemaron la cara.

-No quiero hablar de eso.

-No te pedí que lo hicieras.

Empiezo a creer que es más que sólo una niña bonita.

-Si me quedo aquí mucho tiempo Falcone enviará a sus hombres por mí. Me tengo que ir. Me pregunto por qué un mafioso la persigue.

-Te diría que vinieras conmigo pero realmente no creo tener algún lugar al cual ir. Ah eso sonó más triste de lo que pensé.

Ella me sonrió. Que bonita sonrisa tiene.

-Conozco un lugar, puedes venir conmigo si quieres. Genial, espero que no sea una psicópata y me vaya a matar.

-Soy Jerome. Finalmente me presente ante mi futura esposa.

Me mostró una sonrisa hermosa sonrisa y nos fuimos del hospital hacia realmente no sé dónde.