Demons (Jerome Valeska X Reader) [Historia Interactiva]

Castigo

-Bueno querida, sólo faltas tú. ¿Cómo un Ángel terminó en el infierno?

Y por segunda vez en un rato, me digne a hablar.

-Asesiné a mi violador. Dije mientras una sonrisa enorme se formó en mi rostro y las ganas de matar a otro infeliz me invadían.

Elegiste: Atacar a Greenwood

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Narrador pov

Cuando dijo esas palabras todos quedaron atónitos, en especial un joven pelirrojo que sentía como la ira y la impotencia se apoderaban de él. No la protegió como alguna vez se prometió a sí mismo.

Sionis, no podía creer que esa niña fuera una asesina pues aún cuando se encontraban en Arkham, él veía bondad en los ojos de la chica.

El hombre caníbal no sabía que esperar, su hambre por primera vez en meses despareció y un sentimiento de terror tomó su lugar en su estomago.

Todo sucedió muy rápido, pareciera que _____ realmente era el gato sonriente. Pareciera que lo único que podían ver todos era esa sonrisa sádica en su rostro.

Todo sucedió muy rápido. De un momento a otro ______ ya se encontraba encima de Greenwood con la boca ensangrentada y la oreja del caníbal en su boca pero siempre con su gran sonrisa.

Jerome pov

La primera vez que la veo en años y me doy cuenta de lo mal que la vida nos trató.

Nunca debí dejarla.

Nunca debí escuchar a Jeremiah.

No sucederá de nuevo.

Haremos pagar a todos los que nos han hecho algún mal.

Empezando ahora.

Sabía que los oficiales y enfermeros no tardarían en llegar. Así que decidí aprovechar.

Alcé delicadamente a mi Ángel por la cintura y le sonreí de la manera más tierna que pude para calmarla. Luego me tomé su lugar sobre el gordo para empezar a golpearlo como si no hubiera un mañana.

Se sentía tan bien tener su sangre entre mis manos, saber que la podía proteger de cualquier idiota. No pude evitar ponerme a reír.

Aunque no esperaba que ella se me uniera.

-Deja un poco para mi pelirrojo. Me apartó para ella poder seguir dando golepe tras golpe.

Se ve demasiado bien cubierta de sangre.

Ella ha cambiado pero yo también. Quien diría que la muerte nos uniría.

Narrador pov

Un reencuentro dramático es lo único que podía esperar de esos dos. Y aunque para muchos de los enfermos les parecía divertida y entretenida la escena, al director del lugar le parecía todo lo contrario.

Aproximadamente unos veinte enfermeros y cuatro oficiales entraron por las puertas listos para anestesiar y castigar a los alborotadores.

Y como los más escandalosos eran Jerome y ______, no dudaron en que ellos eran los responsables.

El primero en ser inyectado con un calmante fue Jerome, al cabo de unos segundos se desmayó. Si no hubiera estado tan distraído riendo no hubiera sido tan sencillo.