Many Sides

7

Many Sides, Capítulo Siete.

"Supongo que te enterarás"

— Le voy a romper la cara.— Dice Draco, soltando mi mano y corriendo hacia Oliver.

— ¡No Draco!— Grité, pero era tarde, ya estaban ambos en el suelo, Draco encima de Oliver quien trataba de defenderse de los puñetazos.— ¡Draco para, por favor lo vas a lastimar!— Exigí, agachándome y intentando separarlos, no me hacía caso, hasta que oí unos pasos acelerados acercarse a nosotros.

— ¡Malfoy, Wood y Evans, los quiero a los tres en detención!— Mire a tras para saber quien logró que estos dos pedazos de idiotas dejaran de pelear, era Dumbledore, nos levantamos y hicimos caso tan rápido como nos lo ordenó. El salón de detención estaba igual de vacío que la otra vez que quede aquí con Oliver, solo que esta vez él esta con una nariz rota y nos acompaña Draco con la mano sucia con sangre.

— Bravo, lograron que estemos en detención.— Aplaudí sarcásticamente.

— Te dije que se fuera, era obvio que se molestaría, celoso.— Masculló Oliver, frotándose la nariz.

— No la dejaría sola contigo, imbecíl.— Dijo Draco enojado.

— Acéptalo, estas muerto de celosos, yo logre decirle mis sentimientos, tú no.— Escupió entre risas Oliver.

— ¿A qué te refieres con que el no?— Pregunte alzando una ceja, hubo un silencio largo. — Draco, ¿¡A que se refiere!?— Exigí, tomando su rostro, logrando que me mire fijamente.

— No tiene los huevos suficientes.— Se río Oliver. Vi a Draco abrir sus labios para hablar cuando la puerta de la biblioteca se abrió, haciendo que de un pequeño respingo.

— Hola, buscaba a Evans.— Era Cedric, entro sonriendo.

— No creo que sea momento, estoy castigada.— Resople mirando a Draco y luego a Oliver, ambos con caras de lamento y enojo combinado.

— De echo, hablé con Dumbledore, le conté que debes despedirte de Flynn con migo, y me dio permiso de secuestrate.— Sin dejarme responder, tomo mi mano. — Suerte con tu nariz, chico escoba.— Tuve que tapar mi boca para permitirme reír, le acaba de llamar chico escoba a Oliver. Fuimos hasta su sala común, pasamos la parte de los barriles y entramos. Flynn se encontraba en el perchero de madera junto a algunas camisetas de Cedric de Quiddtich, se veía tierno allí parado.

— Ven.— Llamo a Flynn tocando dos veces su hombro, este voló hacia el tan rápido como lo llamo Cedric. Apuesto que estuvo educándolo, el echo de permitirme imaginar a Cedric pasando horas con Flynn enseñándole trucos me dio ternura. Abrió su ventana, y acarició un poco al búho de plumas oscuras.

— Adiós Flynn.— Dije sacudiendo mi mano, el búho ni se movió, pero me despedí.

— Imagina que el búho soy yo, ¿Así te despedirías?— Pregunto con un puchero Cedric.

— Justamente no eres tú, ademas nunca saludaría a un búho de la forma en lo que lo haría con tigo.— Aclaré cruzando mis brazos, Cedric alzó ambas cejas.

— ¿Me permite ver que forma seria esa, pequeña?— Negué con la cabeza mordiendo mi labio inferior. — Está bien, de todas formas no me entusiasma descubrirlo.— Dijo acariciando nuevamente al búho. — Adiós Flynn, buena vida.— Dicho esto lo soltó, este salió por la ventana libremente.