-Bai Long - me llamó Caleb, ofreciéndome un sobre de una carta - Ha llegado esto para ti.
-¿Aquí? - la tomé en mis manos, observando que fuera cierto - ¿De quién es? ¿Cómo saben que estoy en tu casa?
-Sí. No lo sé. Tampoco lo sé - contestó a mis tres preguntas.
Le dediqué una mirada de fastidio, y centré mi atención en el sobre de color blanco, únicamente manchado por las letras que pronunciaban mi nombre. Busqué algún indicio del propietario, pero no había nada que me diera alguna pista. Decidí abrirlo para descubrir qué contenía en su interior. Dentro había un papel doblado.
Lo extendí, y ante mí apareció quizás el mensaje más claro y preciso que mis ojos leyeron nunca. Me comunicó lo siguiente:
Tenemos algo que aprecias, ten cuidado con lo que haces.
-¿Y ya está? ¿Nada más? - me quejé - Un saludo o una firma por lo menos.
-Me apuesto lo que quieras a que es del Sector V - el castaño cruzó sus brazos.
-Y claramente hablan de Tezcat - añadí.
Un silencio repentino y profundo hizo acto de presencia en la sala. ¿A qué venía eso? ¿Cómo narices habían conseguido localizarme? Y si les resultaba un obstáculo, ¿por qué no me apartaban de su camino, en vez de mandarme una nota?
-Caleb - rompí el frío silencio - ¿Crees que debería dejar todo esto de la Revolución?
-¿Y esa pregunta? - se extrañó.
-No quiero que le ocurra nada a Tezcat - le miré a los ojos - Si no me detengo le harán daño.
-Esto es decisión tuya - levantó ambos brazos, impasible como siempre - Piénsalo un poco antes de tomar una decisión.
Me crucé de piernas. En ellas posé los codos, y sujeté mi cara con ambas manos. ¿Por qué tenían que presentarse situaciones tan complicadas? ¿Qué hacer?
"No olvides nuestra promesa"
La promesa... Ni siquiera me acordaba. Otra piedra en el camino, ¿podían salir las cosas peor? No quería ayudar más al Raimon para proteger a Tezcat, pero a la vez quería derrotar al Sector V para cumplir mi promesa. ¿Por qué le di mi palabra? ¿Y ahora qué se suponía que tenía que hacer?
-La final es en un par de días - me recordó - Si quieres echarte atrás, creo que ya es un poco tarde.
-...
-Dime, Bai Long - su mirada era amenazante - ¿Por qué motivo decidiste cambiar de bando, si conocías perfectamente las consecuencias?
-Porque se lo prometí - le miré con ligera tristeza - Le juré que derrotaría al Sector V.
-Muy bien - asintió - ¿Pero es lo que tú quieres?
-Sí, es por eso que huí del Santuario.
-Entonces no deberías dudar tanto - alzó el tono de voz - Deja de esconderte, actúa y no dudes.
-Esto es más difícil de lo que tú piensas - le repliqué - ¿Por qué no tratas de comprenderme?
-Porque es imposible - contestó - Aclara tus ideas, no deberías cuestionarte tanto las cosas, haz lo que tú deseas y todo saldrá como tenga que salir.
-No se trata de mí, sino de Tezcat.
-¿Ah sí? ¿Y por ese motivo traicionarás ahora a la Revolución? - se alejó - Entonces ve a buscarle, yo me voy al Raimon - abrió la puerta, y se largó.
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La Promesa [Inazuma Eleven]
FanfictionLo que juramos ese día bajo las amenazantes nubes grises del cielo se convirtió en uno de mis más grandes errores, pero, muy profundamente de mí, siento que lo hice por ti, y no me arrepiento. Una historia de Inazuma Eleven. Los personajes no me per...