Cuando Seokjin encontró aquella irrelevante publicación de Instagram, él no tenía idea de que terminaría obsesionándose un poco.
Bueno... Tal vez obsesión sea una palabra un tanto fuerte, sin embargo, de un momento a otro, y sin saber bien cómo suce...
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Lo único malo del departamento donde vivían Namjoon y Seokjin, era que estaba en un sexto piso.
Tampoco suponía esto un gran problema, pero las cosas cambiaban un poco cuando el ascensor estaba roto.
Y, casualmente ese sábado en particular, en el que Seokjin llegaba un poco más cansado que de costumbre pues tuvo clases en la noche anterior y además, que hacer un par de horas extra en su empleo, un gran cartel amarillo se encontraba pegado en la entrada del elevador que decía: "Estropeado".
Sus piernas estaban adoloridas por todas las horas de pie en el trabajo, así que cuando dio la pisada en el último peldaño, ya estas le temblaban como gelatina.
¡Había conseguido llegar!
Solo quería tomar una ducha calentita, comer algo y lanzarse a dormir a su cama, y si podía estar envuelto en el acogedor calorcito de Namjoon (quien ya debía haber llegado también), mucho mejor.
- ¡Hyung! - La emocionada voz de su hermano, quien le recibió en cuanto abrió la puerta, supuso una ola que destruyó su castillo de arena.
Y cuando alzó la vista, que no solo lo vio a él, sino a Taehyung (la pareja de Jungkook), Yoongi, Hoseok y Jimin, supo que su descanso tardaría un poco más en presentarse.
- Oh, hola chicos - Saludó sin demostrar su leve desilusión, y tras cerrar a sus espaldas, correspondió al abrazo que el más pequeño le ofrecía - No sabía que vendriais hoy.
- Soy tu mejor amigo y Kook tu hermano, no tenemos que avisar para allanar tu casa - Informó Yoongi con el mayor tono de obviedad del mundo, dándole un rápido sorbo a una botella de cerveza. Tras observar bien, el pelinegro se percató de que casi todos tenían una.
Esos jenízaros + alcohol = Todo el día ahí, algunos extremadamente ebrios y Jimin llamando a algún ex influenciado por los efectos del licor.
El único que no bebía era Kook, ya que a pesar de haberse recuperado, era muy cuidadoso con su salud en todos los aspectos, así que a él un botecito de leche de plátano le bastaba.
- Y si vienen ellos, también nosotros - Comentó Hobi, señalándose a sí mismo y a Tae - Ya sabes, somos como un combo - Eso a Jin le hizo sonreír, el hombre le caía estupendamente y agradecía que hubiese aparecido en la vida de cavernas y murciélagos que antes llevaba Min.
- Y yo también tengo que estar aquí, porque pos en todos los grupos tiene que haber un soltero borracho - Añadió Jimin, sin levantar la vista de la pantalla de su móvil.
- Enano, no utilices tu soltería como justificación, tú eres borracho con o sin pareja - Tras la burla de Taehyung, un par de risas hicieron eco, pero el más bajo no le dio mucha importancia. Simplemente se encogió de hombros y alzó su botellín al aire en un gesto de brindis.
- ¿Soltero? ¿Y ahora qué ha sucedido con Taemin? - Inquirió el Seokjin, dejando su mochila sobre una de las sillas del salón-comedor.
- No quiero saber más de ese hijo de perra en la vida.
