- ¿Sabes una cosa? Siempre me he preguntado cuál es esa barba que tanto te afeitas.
Al escuchar las palabras de Seokjin, Namjoon dejó de mirar su propio reflejo en el espejo del baño y se enfocó en dirección al pelinegro. Las zonas aledañas a su barbilla, mejillas y la parte donde se suponía que debía nacerle el bigote, estaban repletas de espuma para afeitar, y un pequeño surco trazado por la cuchilla permitía ver un poco de la piel en su cachete izquierdo.
- ¿Has dicho algo, nene?
Jin, por su parte, se encontraba dentro de la ducha, con la cortina abierta, desnudo y frotándose el cabello con su adorado champú de coco, a la par que observaba tranquilamente cómo su novio se dedicaba a eliminar de su rostro unos supuestos vellos que él, en sus cinco años de relación, nunca había visto.
- Que no sé qué tanto te afeitas. Si nunca te sale barba. Te conozco desde hace tiempo y ni una sola vez te he visto bigote siquiera.
- Eso es porque me afeito, listo - El castaño contestó con voz de sabelotodo, dio un golpecito en su sien y nuevamente retornó la vista al frente, para posteriormente, volver a utilizar la máquina y eliminar una nueva franja del producto blanco - No la ves porque me la quito todos los días, si no lo hiciera, tuviera una barba como la de Steve Aoki - El mayor rió entre dientes por ese comentario, sin dejar de esparcir el producto por su cuero cabelludo.
- Uhm, es curioso. Recuerdo aquella vez que nos fuimos de acampada con los chicos una semana. Cuando regresamos, tu cara seguía tan lisa y suave como el primer día - El más alto se giró por segunda vez como si fuera la niña del exorcista, y al ver sus ojos entrecerrados que acompañaban una expresión que era una mezcla de rencor con indignación, Seokjin tuvo que morderse el labio inferior y hacer de tripas corazón para mantener la seriedad y no romper en risas.
Habían pocas cosas que hacían perder la paciencia a Nam, básicamente porque este chico era paz y amor con todo el mundo el 90% del tiempo, y resultaba gracioso cómo su carencia de cabellos en determinadas zonas de su cuerpo era una de ellas.
Jin había llegado a la conclusión de que por un motivo u otro, el moreno creía que este hecho le restaba masculinidad, pero ciertamente no había manera de que alguien pensara que el castaño no era masculino.
Era un hombre alto y corpulento, con músculos marcados y facciones duras y definidas.
Según el más bajo, era el sueño húmedo de cualquier mujer, u hombre homosexual, para el caso, y su opinión solo se hacía más fuerte cuando notaba cómo otras personas miraban a Namjoon.
Sin embargo, aún así, al menor le seguía sacando de quicio esta situación, y el pelinegro se aprovechaba de ello para molestarlo de vez en cuando.
- No empieces - Soltó estirando un brazo y apuntándole de forma "amenazante" con la cuchilla.
- ¿Yo? - Preguntó Jin con fingida inocencia, no obstante, en esta ocasión no pudo controlarse y dejó salir la sonrisa que llevaba rato reteniendo.
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El novio perfecto no exis... /Namjin🌻
FanfictionCuando Seokjin encontró aquella irrelevante publicación de Instagram, él no tenía idea de que terminaría obsesionándose un poco. Bueno... Tal vez obsesión sea una palabra un tanto fuerte, sin embargo, de un momento a otro, y sin saber bien cómo suce...