Videogames (2/2) 🎮

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Sentían placer al besarse, pero también alegría mezclada con libertad. Para Eugene, era intenso, pero tan adictivo que quería seguir disfrutando, mientras que Luke quería hacer placentera la experiencia, daba caricias en la cadera y cintura del castaño, debes en cuando pequeñas mordidas en sus labios, rozando lentamente ambas lenguas.

Suspiraban dulcemente, era como un juego, ver quien podría darle más placer al otro, Eugene aprovechando su estatura, podía darse el lujo de dar pequeñas mordidas en el cuello del moreno y unas pequeñas pero lentas lamidas en su piel, mientras que Luke recorría con sus dedos, la poca piel expuesta del castaño, presionando suavemente en las áreas sensibles de su cadera para darle cosquillas cuando sentía una mordida en su cuello, suspiraba suavemente, sabía que a Eugene le gustaba oírlo.

—Es mejor de lo que pensé —Hablo Eugene dejando escapar un jadeo cuando sus labios eran chupados con suavidad y sentía la lengua del moreno entrar a su boca, jadeo nuevamente cuando sintió que volvieron a rozarse ambas lenguas.

Más besos, más caricias, el corazón les latía con fuerza y sentían cosquilleos por sus cuerpos. Querían parar para intentar aclarar todo, pero no querían, simplemente no. Después de todo, el tiempo corría en contra suya, porque, así como llegaría la mañana, el alcohol acabaría por desaparecer y ya no podrían expresar su amor como quisieran sin una excusa de por medio.

Sepa cuanto tiempo estuvieron así, solo sabían que, en algún punto de la noche decidieron acostarse en una de las camas y seguir con lo suyo.

Eugene estaba acurrucado sobre el pecho de Luke, se sentía cómodo ya que por el constante ejercicio que su amigo hacía, tenía los pechos grandes, por lo cual eran como una almohada suave

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Eugene estaba acurrucado sobre el pecho de Luke, se sentía cómodo ya que por el constante ejercicio que su amigo hacía, tenía los pechos grandes, por lo cual eran como una almohada suave. Bendito sea el entrenamiento que Luke se sometía cada mañana para estar en forma, pero no paso mucho para que la alarma de un celular sonara.

Ambos adolescentes gruñeron por ese molesto sonido, Luke, sintiéndose cansado, estiro su mano hacía la mesita que tenía cerca de su cama, tomando su celular y apagando la alarma, normalmente a esa hora estaría levantándose, preparándose para su ejercicio y despertando a su compañero, solo que esta vez quería permanecer en la cama. Todo el día se si pudiera.

—Eugene —Nombro a su compañero, tenía la voz ronca y un dolor en la cabeza, recibió como respuesta un "¿Qué?" con tono de mal genio— Levántate, es hora.

—Luke, tú te levantas siempre a las 5 am, yo al mediodía, ahora cállate y déjame seguir durmiendo —Sentencio Eugene mientras abrazaba el torso del moreno y se acurrucaba aún más en su sitio.

—Nerd —Hablo con fastidio por eso, normalmente no se molestaría tan temprano, pero por no haber dormido ayer como corresponde le ponía de mal genio — O te levantas ahora mismo o te empujare para que te caigas de la cama.

—Lo haces y te vienes conmigo idiota —Eugene también estaba de mal genio, más que por no haber dormido, era por el dolor de cabeza que tenía. —¿Qué hago para convencerte de que te quedes acostado?

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