"Quémalo todo, que todo arda. Libérate de esa jaula y vuela lejos junto conmigo. Olvida la ley de Dios, olvida lo impuesto, que yo pondré, mi Tiempo en Ti..."
~*⚠️ A D V E R T E N C I A S ⚠️*~
Escrito con contenido +18. Escenas sexuales explícitas y...
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TaeHyung siempre se consideró alguien con muy mala suerte, aún si Dios estaba siempre muy presente en su vida. Los problemas parecían seguirlo a dónde quiera que iba.
Sin embargo, era un buen chico. Temeroso del mundo, cohibido y sin decisión propia gracias a sus protectores padres.
TaeHyung podía jurar que nunca en su vida había sido tan rápido para hacer algo, como en este caso; echar los seguros manuales al auto de su madre, ya que Jeon había decidido joderle la vida desde muy temprano e iba hacia él con intenciones de Dios sabe qué.
— Abre la puerta, TaeHyung — Ordenó el azabache después de haberse jactado del menor moviéndose de allá para acá poniéndole los seguros al auto.
—Déjame en paz, Jeon —
—Abre la maldita puerta o rompo el vidrio —
— ¡Es el auto de mi madre, ni siquiera te atrevas a tocarlo! — Como lo hiciera su madre lo mataba a él.
—Hay... ¿Tu mami te presta su auto? ¡Que mujer tan linda!, ¿Será tan linda cómo tú? — Bien. TaeHyung era una persona muy tolerante y paciente, demasiado a decir verdad, pero una cosa era tolerar y otra que se metieran con su bendita progenitora. Eso no.
Así que, quitando el seguro a la puerta, abrió de un pegón esta y se bajó de una encarando al pelinegro más alto.
— ¡Con mi madre no te metas pedazo de...! — "No digas malas palabras, TaeHyung, Dios todo lo ve" se recordó a sí mismo— ¡Pedazo de pecador! — Jeon se quedó muy serio mirándole y luego soltó a reír con gran diversión.
— Espérame un momento, pequeño tigre, ¿Acaso estás juzgándome tú, un alma de Dios? ¿De verdad? — Rió negando lentamente.
—¿Q-Qué? — Tartamudeo el pequeño tigre dándose cuenta de su error. Estaba mal.
— Que estás juzgándome sin conocerme, como todos. Más sin embargo, me sorprende de ti más que de nadie, tú quien ha sido educado bajo las denigrantes leyes del catolicismo — Echó a reír.
—Yo no estoy juzgándote —
—Acabas de hacerlo...— Contraatacó Jeon.
—¿Sabes qué? No tengo tiempo para esto. Con permiso, estoy llegando tarde a las clases — Dijo TaeHyung conservando la poca paciencia que le quedaba y sacando su bolso anticuado del auto para intentar vanamente pasar de largo a Jeon— Ten un buen día y que Dios te bendiga —
—¿Qué Dios qué? — TaeHyung estaba tan nervioso.
— Serás sordo, con permiso, Jeon — Dijo intentado ser amable ante todo.
—Tú y yo tenemos algo pendiente, tigre — Tae alzó la mirada para verlo y Jeon lo miró desde arriba — Te estaré esperando a la salida y ni pienses en huir de mi porque verás en la que te metes, ¿Entendido? — TaeHyung abrió los ojos grandemente, no creía que alguien que no conocía ni de cerca; le estuviese ordenando de tal manera. Así que con desesperación sonó la punta del pie contra el asfalto reiteradas veces y luego Jeon lo dejó huir de allí — No te atrevas a huir, TaeHyung —Le repitió solo para ponerlo más nervioso de lo que denotó, ya estaba. El muchacho medianamente lo ignoró y siguió caminando mientras se persignaba mentalmente una y otra vez, sintiendo su corazoncito bien agitado dentro de su pecho.
