"R e e n c u e n t r o" Sashanne AMPHIBIA

Pijamada

-Entonces una pijamada será -sonrió determinada Sasha.

La rubia de coleta se levantó del colchón para dirigirse hacia su vieja mochila, la misma reposaba sobre el suelo junto a las pertenencias de Anne. La última la miró desconcertada.

-¿Hm? ¿A dónde vas Sasha? -preguntó curiosa Anne, la ex-teniente buscaba algo entre sus objetos.

-Jamás creí que llegara este momento, es hora de abrirlos -dramatizó Sasha, la morena jijeó¹.

-¿Qué es? ¡No me dejes con la duda, Sash! -plañió² infantil Anne arrojándole un cojín cercano.

-¡Sorpresa!~ -chilló emocionada la rubia mostrando uno varios esmaltes de tonos brillantes, los ojos de Anne adoptaron un brillo reflejante de emoción y en un segundo se unió a la guerra de chillidos con la contraria.

-¡Debes estar bromeando! ¡¿Dónde los conseguiste?! -cuestionó intrigada la castaña observando con admiración los botecillos. -Tengo tanto tiempo sin pintarme las uñas.

Anne se limpió una lágrima imaginaria, acto que divirtió a la rubia.

-¿Vas a seguir alabándolos con la mirada o iniciamos de una vez? -preguntó divertida Sasha, Anne asintió con una sonrisa decidida.

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-Y pues terminamos por gritarnos bien el uno al otro -confesó nostálgica Anne girando la lata de soda tibia en su mano, sonrió levemente. -Aún no entiendo cómo conservas esto.

-Oculto, por supuesto -respondió desinteresadamente Sasha sorbiendo de su soda. -Si Grime las hubiera descubierto no estaríamos bebiéndolas ahora mismo ¿O sí?

-Te creo -admitió divertida Anne.

Las chicas se quedaron en silencio unos segundos, Sasha sabía que Anne aún no había sacado el tema por completo.

-El problema es con Sprig, es tan caviloso³ y dramático -continuó desilusionada Anne.

Sasha dejó de lado su gaseosa y se recargó sobre sus brazos hacia atrás mirando el techo.

"Anne

Creo que estás mejor sin mí"

Recordó las últimas palabras que compartió con la chica de tes chocolatada. Un pequeño dolor pinchó su pecho.

-Quizá el mocoso tenga razón -habló desganada Sasha. -Quizá yo sea el problema.

Anne abrió los ojos con demasía ante su confesión.

-Sasha... -objetó la morena.

-Quizá hubieras estado mejor sin mí -confesó apenada la rubia. Anne la miraba incrédula y molesta. -Piénsalo bien, Anne. Intenté herir a su abuelo y te obligué a algo que obviamente no querías, es normal que esté enojado conmigo. Hasta yo misma estaría enojada conmigo.