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Los días iban pasando y ambos chicos aprovechaban para quedar con sus amigos, tanto juntos como separados. Además Kirishima también pasaba tiempo con sus padres.Entonces llegó el último fin de semana de las vacaciones y decidieron hacer un viaje juntos el sábado por la mañana.
Les costó decidirse pero terminaron decantándose por Yokohama.
—Me hace mucha ilusión ir, dicen que hay unos edificios históricos muy bonitos. Además que también quiero ver el parque Yamashita.—Comentó Eijirou emocionado.
—Sí, eso haremos.—Dijo Katsuki mientras hacía su maleta.—Oye, ¿te caben los condones y el lubricante en la maleta? ¿O prefieres que los lleve yo?
—No, está bien, ya los llevo yo.—Dijo avergonzado por lo directo que era su novio.
Bakugou lo miró y dijo burlonamente:
—¿No me digas que te has avergonzado?
—U-un poco, eres muy descarado.
El rubio cenizo se acercó a él, pegando su cuerpo al del contrario, para decirle:
—Pero así te gusto~—Afirmó para después besarle.
Kirishima sonrió de manera traviesa y le respondió:
—Tienes razón, me encanta que seas así.—Me gustas demasiado.—Admitió iniciando de nuevo un beso, siendo éste más apasionado que el anterior.
Seguidamente, sus manos acariciaron el cuerpo del contrario, sacándose jadeos el uno al otro.
—Vaya, parece que tendré que esperar para poder guardar los condones y el lubricante.—Dijo Kirishima.
El rubio cenizo no respondió, simplemente le dedicaba una mirada juguetona al más bajo.
Entonces, justo cuando iba a por ambas cosas, Mitsuki llamó a la puerta.
>Chicos, ¿podéis hacer un recado por mí? Necesito algunas cosas para la comida.
"Oh, no. Justo cuando lo íbamos a hacer."
"Maldita bruja."
—¡Sí, ahora vamos!—Contestó Eijirou.
>De acuerdo, ahora os digo lo que tenéis que traerme del supermercado.
La rubia se fue y los dos chicos tuvieron que colocarse bien sus ropas para que la señora Bakugou no sospechase que iban a hacer cosas de adultos.
—Esa vieja bruja...¡¿Cómo se atreve a interrumpirnos?!
—A mí también me fastidia un poco pero, este fin de semana, no nos interrumpirá nadie y pienso aprovecharme de ello.
—Vaya, qué pervertido, Eijirou~
—No más que tú, Katsu~
Se volvieron a besar, aunque no se demoraron mucho en separarse para no hacer esperar demasiado a Mitsuki.
Cuando estuvieron frente a ella, ésta les dio una lista con los ingredientes que precisaba para la cena.
—Toma, el dinero.—Dijo entregándoselo a su hijo para que después éste se lo guardase.—Procurad no tardar mucho.
—¡Sí, no te preocupes!—Dijo Kirishima con una sonrisa.
—Tchs, ni que nos fuéramos a perder, vieja bruja.—Dijo para darse media vuelta, no sin antes ser regañado por su madre por haberla llamado bruja.
Salieron de la casa y se dirigieron al supermercado más cercano.
***
Llegó el sábado por la mañana y los dos muchachos ya tenían preparadas las maletas; así que se despidieron de Mitsuki y Masaru para después tomar un taxi para que les llevase a la estación de trenes.Y como ya habían comprado sus billetes por internet, eso hizo que ahorrasen tiempo y no tuvieran que hacer fila para adquirirlas; lo que fue bastante bueno pues el tren no tardón más de cinco minutos en llegar.
—¡Ya está el tren!—Exclamó el pelirrojo emocionado.
Bakugou no dijo nada, se limitó a tomar la mano de Kirishima para pasar al tren juntos.
Una vez dentro, tomaron asiento y disfrutaron del viaje. Cuando llegaron a Yokohama, cerca de la estación de tres había varios taxis parados, así que se subieron a uno de ellos y le dijeron al conductor hacia dónde querían ir.
Una vez llegaron al hotel, le pagaron al taxista y entraron al edificio para dirigirse directamente a la recepción.
—Su habitación es la 54, está en el tercer piso, al fondo.—Les indicó la recepcionista.
—Bien, gracias.—Vamos, Eijirou.
—¡Sí, vamos!
Caminaron hacia el ascensor y subieron para apretar al botón del tercer piso. Enseguida llegaron y fueron a su dormitorio para dejar su equipaje.
—No puedo creer que estemos aquí juntos, ¡sin nadie que nos interrumpa!—Dijo Kirishima emocionado de pensar que iba a pasar tiempo con su amado.
—Sí, vamos a disfrutar mucho este fin de semana.—Te voy a dejar seco~—Dijo sensualmente acercándose al pelirrojo para iniciar un beso juguetón.
Eijirou no dudó en aceptar el beso de su novio y puso sus manos sobre la espalda de otro para intensificar el contacto.
—Lo estoy deseando, Katsuki~
Katsuki lo miró con perversión y le dijo:
—¿Quieres un anticipo?
—Por supuesto~
A Bakugou le encantó que aceptase, así que volvió a besarse con el pelirrojo de nuevo pero esta vez en la cama; quedando él debajo de Kirishima.
A los pocos segundos se separaron.
—Muéstrame el adelanto de lo que me espera esta noche, Katsu.
Katsuki sonrió y le pidió a su novio que se sentase en la cama, a lo que éste accedió sin rechistar. Bakugou procedió a desabrocharle los pantalones y a quitarle la ropa interior para ponerse de rodillas y hacerle sexo oral Eijirou.
—Aah...Katsuki...
El mencionado observaba a su novio, notando cómo disfrutaba de sus atenciones. Amaba complacer a Kirishima y es que sus gemidos y jadeos le excitaban demasiado.
"Tengo un novio jodidamente sexy."—Pensó sin apartar su mirada de él.
—Mnm...Katsuki...Ah...
El rubio cenizo continuó hasta que su novio se vino.
—¿Qué te pareció el anticipo~?—Le preguntó mientras se levantaba para limpiarse la boca con un pañuelo.
—Obvio que me encantó, estoy deseando tener más esta noche, cielo.
En respuesta Bakugou le sonrió y fue al baño para después salir del hotel con su novio para visitar algunos lugares de la ciudad.
—¿Adónde quieres ir primero, Katsuki?
—Me gustaría ir al observatorio de la Landmark tower, dicen que se desde allí se pueden ver unas buenas vistas del puerto y la ciudad. ¿Quieres ir?
—¡Sí!
Entonces se tomaron de las manos y caminaron hacia el lugar guiándose por un mapa de la ciudad que había en la habitación.
***
Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!
¡Espero que os haya gustado!
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Sexo sin compromiso [Kiribaku]
FanfictionEijirou y Katsuki se conocen una noche a través de Kaminari, un amigo en común, ambos se lo pasan muy bien, hablan bastante y se dan cuenta en seguida de la tensión sexual que hay entre ellos. Ninguno de los dos dejará pasar la oportunidad de desfog...