No Me Importa...Te amo.

Capítulo 22

Los días pasaron, siendo un tanto ocupados para la banda. Luce había regresado al colegio, mientras que Charlie, aún no sabía si regresaba a Alemania.

—No hay de otra —Andrea dijo mientras se sentaba a un lado de su hijo menor.

—Queremos tenerte cerca —dijo Gary sonriéndole—. Siempre ha sido así.

—¿Entonces, no me voy?—preguntó Charlie con una gran sonrisa.

—Claro que no, cariño— Andrea lo abrazó por los hombros atrayéndolo hacia ella.

—Pero estaremos un poco ocupados, pero puedes acompañarnos—dijo Gary, mientras le revolvía el cabello.

—¡No me lo perdería por nada!—exclamó aún más feliz.

—Bueno, entonces, te vemos abajo, nos vamos a reunir con los chicos—Gary dijo levantándose de junto de Charlie.

—De acuerdo, ya bajo—dijo Charlie, yendo a cambiarse a su baño.

Gary bajó hacia la sala junto con Andy, ambos habían pasado un tiempo separados, por asuntos de la banda.

—¿Te he dicho lo hermosa que luces hoy?—dijo Gary atrayéndola hacia él.

—¿Sólo hoy?—Andrea lo cuestionó con ambas cejas levantadas. Gary soltó una pequeña risa.

—Tú sabes que todos los días te ves hermosa —dijo Gary, dándole un corto beso en los labios.

—¿Qué tenemos para esta semana, Barlow?— dijo Andrea sonriéndole.

—Muchas cosas —dijo Gary, mientras colocaba su cabeza a un lado del cuello de Andy.

Andrea pasó una mano por su cabello y sonrió. Después de tantos años, aún seguía con Gary, jamás se había imaginado llegar hasta aquí con él. Ni siquiera con hijos.

—¡Mamá, papá! ¡Estoy listo! —dijo Charlie, que bajaba las escaleras.

—Vámonos —dijo Gary separándose de Andrea.

Los tres se dirigieron hacia la camioneta Range Rover negra que se encontraba en la puerta y se subieron. El trayecto fue un poco largo, se encontrarían en el estudio. Se estaba llevando a cabo un pequeño documental sobre los seis y su regreso.

—Deberías estacionarte ahí —señaló Gary, mientras observaba con cuidado a Andrea.

—Sí, confía en mí, no vamos a chocar —dijo en broma Andrea, no era la primera vez que manejaba.

—Bien, entremos —dijo Gary desabrochándose el cinturón de seguridad.

—Aquí vamos —dijo Andrea, mientras hacía lo mismo. Charlie se bajó primero y esperó a sus padres en la entrada.

—Qué rápido —dijo Gary sonriendo hacia él—. Entra, ya nos esperan.

—Antes de que comiencen las preguntas, voy a hablar con Robbie—dijo Andrea hacia Gary. No habían hablado con Robbie, pero era mejor que Andy lo arreglara.

—De acuerdo, amor—Gary se giró y le dio un beso en los labios.

Andrea sonrió y se dirigió hacia dónde estaba sentado Robbie.

—Hola a todos —dijo Gary sonriendo con emoción hacia los presentes.

—¿Cómo han estado? —preguntó Howard, que se había levantado de su asiento para saludar a Gary y a Andrea.

—Muy bien, ¿Qué tal ustedes? —decía Gary, mientras saludaba a todos.

—Cansado, pero no podemos quejarnos —dijo bromeando Jason.

—Sí, sí, estamos listos —dijo Mark con su sonrisa, animando a todos.

—Robbie, ¿podría hablar contigo un momento? —preguntó Andrea, después de que se saludaran todos.

—Sí, sí, ¿hay algún problema? —decía Robbie mientras ambos se levantaban y se dirigían hacia la puerta trasera.

—Sí, creo —dijo Andrea suspirando.

—¿Luce está en el colegio? —preguntó Robbie.

—Sí, ella está bien —dijo Andrea —. Robbie, tú entiendes que nada de eso va a ser posible, ¿verdad?

—Sí... Entiendo —respondió con cierta tristeza—. Digo no sé que estaba pensando, ella, aún es joven.

— Si Luce te habla, es mejor que se lo expliques, creo que es mucho mejor si tú se lo dices —dijo Andrea poniendo una mano sobre su hombro—. Lo siento, Rob... Ya encontrarás a alguien...

—Sí...—dijo Robbie cabizbajo. Andrea entró al estudio, dejándolo un momento solo—. Sólo que, me he enamorado —terminó de decir en un murmullo sólo para él.

Pasó una mano por su rostro y su cabello. Podría hacer caso omiso a Gary, pero no a Andrea, ella se lo había pedido. No podía hacerle eso. Tendría que alejarse de Luce Barlow.

Regresó al estudio, dónde ya estaban preparados para que se grabe parte del documental. Las cámaras ya estaban grabando.

Tenía que actuar normal, como si fuera un día normal de grabación.

—¿Todo bien? —Gary preguntó mientras tomaba un poco de café.

—Sí, sólo fui a tomar un poco de aire —dijo Robbie sentándose a un lado de Mark.

Andrea lo miró y desvió su mirada, estaba más desanimado que antes. Ella soltó un suspiro y miró a Gary, que estaba hablando sobre algunas canciones y el setlist. Charlie se encontraba en la cocina. Iba a ser un largo día.