Naturales

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Su siguiente clase era ciencias naturales con el sr.Betto. El grupo entró en la amplia aula, la cual estaba casi en penumbra. Se sentaron donde pudieron, esperando al profesor.
-¿Crees que vendrá?- le dijo Alex a Sofie.
- No sé. Pero me he encontrado con mi hermano por el pasillo. Y por como hablaba del profesor, no creo que queramos conocerlo.
Olivia que las estaba escuchando intervino.
-¡Shhhh! Ya está aquí el profesor.
Toda la clase quedó en silencio.
-Buenos días, niños. En mi mano tengo las pruebas de nivel. Soy el Señor Betto. Quiero que me llaméis así siempre. - dijo entregando las hojas - No me hagáis preguntas sobre el examen. Lo que sabéis, lo sabéis y lo que no, no. Estoy aquí para ayudaros a que esas cabezas jóvenes e insulsas no se olviden del temario que han dado en sus institutos. Así que, terminad rápido y devolvedme las pruebas cuanto antes. Mientras, no quiero que hagáis ruido. Tengo otras pruebas que corregir.
"Creo que Emma tendrá que hacerle los deberes a Alex toda una semana" pensaron todos. Pero Emma seguía teniendo esperanza de que hubiera algún otro profesor que les gustara. No podía perder contra su hermana.
La prueba era muy difícil, se notaba que el profesor lo había hecho a propósito. Alejandro y Hugo no tuvieron ningún problema para hacer el examen, pero cuando los demás terminaron se les veía cansados y desorientados.
-Creo que no he acertado ni una- dijo Alex.
-Ni yo- dijo Olympia.
Recogieron sus cosas y salieron del aula. Eran las once y media por lo que tenían un recreo de veinticinco minutos. Los chicos decidieron irse a su cabaña, excepto Héctor y Hugo. Hugo y Sofie decidieron ir al bosque juntos, ambos tenían necesidad de explorar el bosque. Héctor se fué a dar un paseo con Alex y Olympia por la playa y las demás se fueron a su cabaña.
-¿Qué le pasa a tu amigo?- dijo Sofie directamente.
-Perdona, ¿qué?
- Me refiero a ... El que está todo el rato contigo. Se me ha olvidado su nombre.
-Necesito que seas mas especifica, porque llegué ayer y no me he separado de mis compañeros de cabaña. Bueno si no cuentas que uno ha pasado su primera noche en enfermería.
-Me refiero al que se sienta siempre a tu lado.
-Ahh vale. ¿Diego?
-Sí, ese.
-¿Qué le pasa?
-Me he sentado detrás de vosotros dos en las dos clases que hemos tenido y no he podido evitar fijarme en que no para de mirar a Olivia.
-¿Olivia? No creo, no es su tipo.
-¿Perdona?
-No, no me mal interpretes. A Diego siempre le han solido gustar más las chicas, ¿cómo decirlo? Extrovertidas. Olivia es más bien tímida.
-Lo que tu digas.
-A ver, la verda...
-Shh! Escucha.
-¿Qué pasa?
-¿Podrías dejar de hablar tan alto?- Hugo cerró la boca de repente y asintió con la cabeza.- Creo que el sonido viene de detrás de los arbustos.
Los dos se acercaron sigilosamente hacia los arbustos y los movieron un poco. Detrás de ellos de repente cayó una rama de un árbol. Los dos se giraron asustados.
-Creo que es mejor que volvamos en otro momento. Las clase debe de estar a punto de empezar.- dijo Hugo temblando.
-Sí, vámonos ya.
En la playa, mientras, Héctor, Alex y Olympia paseaban.
-No puedo creer que Emma sea tu hermana, y además mellizas. Es que no os parecéis ni en el color del pelo.
-Sabes la cantidad de dinero que tendría si cada vez que alguien dijera que no me parezco a mi hermana me dieran un céntimo. Podría estar ahora mismo en una isla en el Caribe. - respondió Alex. Olympia se rió.
-Pues no me negaría si me quisieses llevar contigo. - dijo Héctor.
Los tres empezaron a hablar sobre sus viajes, los sitios a los que querían ir, etc.
Al cabo de un rato se dieron cuenta de que tenían que volver a clase y empezaron a andar hacía allí.
Hugo y Sofie corrían para salir del bosque lo antes posible, los dos se habían asustado mucho. Corriendo llegaron a la playa, donde fueron a chocar con Alex, Olympia y Héctor.
-Heyyy. Relajaos un poco casi nos matáis del susto. ¿Por qué venís corriendo, no que vosotros adoráis el bosque?- dijo Alex.
-Hemos...
-Hemos hecho una carrera. El primero que llegara hasta aquí ganaba.- interrumpió Hugo.
-Oye chicos, me parece muy bien que os guste correr por correr pero tenemos que volver a clase.
Héctor, Alex y Olympia empezaron a andar hacia la clase. Hugo se iba a unir a ellos pero Sofie le cogió del brazo y le empujó hacia atrás.
-¿Por qué les has mentido?
-Sabes lo penoso que sería contarles que dos scouts se han asustado porque una rama se rompió detrás de ellos.
-Pero Olympia es mi mejor amiga. Nunca le oculto nada, por muy vergonzoso que sea.
-Haz lo que quieras... Ahora me has dejado con la intriga. ¿Qué cosas vergonzosas?
Sofie se rió sarcásticamente.
-A ti te lo voy contar. No te lo has creído ni tú.
-Bueno tampoco hace falta ponerse bordes.
-No lo he hecho.- finalizó Sofie y salió corriendo para unirse con Olympia.
Hugo, un poco confuso, comenzó a andar hacía sus amigos.

Campamento PersoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora