Heechul
12⁚00 am
La fiesta había comenzado bien y estaba yendo bastante bien hasta el momento. Es verdad, desde el inicio se presentaron algunos contratiempos, pero no diría que era algo que pudiera arruinar el ambiente que se tenía aquí. Todos estaban divirtiéndose y pasándola genial, no había forma de que, en medio de toda esta celebración, fuera a darse algún tipo de problema.
Bueno, parece que mis palabras se volvieron en contra de mí.
Mientras caminaba por varios de los lugares de la casa, esperaba ver a todos con grandes sonrisas, bailando y claramente pasando la mejor noche de su vida. Sin embargo, aunque la mayoría de las personas se encontraban de esa forma, también me topé con situaciones en las que el ánimo era todo lo contrario. Me sentí preocupado por ello.
¿Había hecho algo mal? ¿Me faltó considerar algo para realizar esta fiesta? Fueron las preguntas que pasaron por mi cabeza al ver esos ánimos.
Al instante descubrí que la fiesta no era exactamente la razón por la que estaban así.
No tenía idea de lo que pasaba con exactitud, apenas podía ver qué algunos habían discutido fuertemente, otros habían tenido encuentros no muy agradables y otros cuantos, estaban siendo agredidos verbalmente.
En cuanto noté ese quise intervenir. Si peleaban o discutían en pareja o en grupo no era mi problema, pero si estaban ofendiendo a dos personas solo por algo que a mí también me afectaba, no iba a dejar que continuará de esta forma. Claro que, antes de poder llegar a dónde ellos se encontraban, un repentino tirón a mi brazo me evitó seguir con mi camino.
Gracias a la poca luz que había en la zona y a que el tipo que tiró de mí tenía una máscara que cubría todo su rostro menos su boca, no pude reconocer quién era. Solo hasta que llegamos a un pasillo no muy concurrido, fue que soltó de mi brazo y pude ver su cuerpo entero, aunque seguí sin reconocerlo.
– ¿Qué crees que haces? – pregunté dando un paso atrás – ¿Quién eres?
– Es una lástima que no me reconozcas así – sonrió – tal vez necesites sentarte encima de mí para que sepas quién soy.
En el momento en que dijo esas palabras algo hizo 'click' en mi cabeza. ¿Realmente era él?
– No puedes ser tú.
– ¿Estás seguro de eso?
De un solo movimiento acortó la distancia entre nosotros y sin darme tiempo a reaccionar, me acorraló entre la pared y su cuerpo, colocando ambas de sus manos a cada lado de mi cabeza. Tragué saliva en cuanto sentí su respiración tan cerca de mi rostro.
Sin embargo, en lugar de querer apartarlo (lo que se supone debí haber hecho) solo me quedé quieto, casi paralizado, en mi lugar.
Un escalofrío recorrió toda mi columna vertebral al sentir el toque de sus manos sobre la piel descubierta de mi cuello.
– Sin duda, ver esta belleza tan de cerca es un privilegio que solo algunos tienen – dijo con una voz tan grave que hizo temblar a mis piernas
Nuevamente tragué saliva – Me dirás tú nombre.
Negó – Temo que, si te digo mi nombre, no dejarás que vuelva a acercarme a tu lado.
– ¿Por qué tendría que hacer eso?
– Es algo difícil de explicar, pero no es necesario que lo sepas aún.
Sus palabras me hacían sentir confundido – Entonces, si no planeas decirme quién eres, ¿qué buscas está noche? ¿Acostarte conmigo?
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𝕌𝕟𝕠 ℙ𝕒𝕣𝕒 𝔼𝕝 𝕆𝕥𝕣𝕠 [𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫 𝐉𝐮𝐧𝐢𝐨𝐫]
Fanfiction⇒ Actualizaciones todos los miércoles o jueves. ¿Quién dijo que enamorarse era sencillo? Nadie les advirtió que, para poder ser felices, tendrían que atravesar muchos inconvenientes, pelear en más de una ocasión y cuestionarse a sí mismos sus propio...