Solo Tuyo Idiota! |•KiriBaku•| - BL (Republicada)

#9#

Esta es la ultima parte de este fanfic, la cual sera para mayores de edad, si tu no tienes la mayoria de edad recomendada (+18) te pido amablemente que te abstengas de leer esta ultima parte, ya que el contenido no sera muy apto y no quiero causarte traumas , pero si decides continuar es bajo tu propio riesgo.

Dicho esto, comencemos.

(Oh mierda JAJAJAJJAA, yo escribí ésta cosa cuando tenía 14 años... mini yo de 14 años, ¿qué mierda hacías escribiendo algo tan pobre?)

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Sabía que nunca se iba a acostumbrar a tener ese tipo de compras.

Claro, debía disimular, pero... ¿hacerlo de esa forma?

Ya llevaba dos litros de leche en el carrito, una mano de limón y dos pasteles.

¿Para qué?, bueno, simplemente para comprar dos condones.

— Kiri... ésto es estúpido, simplemente ve y pídelo – Katsuki susurró, mientras veía a su novio tomar algo de algún estante y luego volver a dejarlo.

El pelirrojo era demasiado penoso para algo cómo eso, y Bakugo disfrutaba verlo apenarse al pedir los preservativos, por lo que nunca cedía a comprarlos él.

— Es que – los ojitos de cachorrito regañado le hicieron reír.

Últimamente, junto a Kirishima, su humor había cambiado drásticamente. Ahora ya no estaba todo el día molesto, más bien simplemente serio.

Pero era fácil desbordar el río de su ira.

— Anda, no voy a dejar que sigas gastando dinero innecesario simplemente porque quieres meterme el pene – tan vulgar como siempre, Katsuki dejó el carrito dónde sea y lo jaló mientras el menor lloriqueaba, parando frente a la cajera.

— Buenas noches, ¿en qué puedo ayudarles? - la chica los observó amablemente. Ya los había visto dar vueltas de un lugar a otro, pero sin tomar nada en específico.

— Anda – Bakugo lo observó, quedándose pardo junto a él, mientras la chica paseaba su mirada curiosa por ambos.

— Ehh...– los colores subieron con rapidez a su rostro, dejando algo sorprendida a la chica, quién confundida los observaba sin decir ninguna palabra.

Kirishima atinó a tartamudear, moviendo sus manos de un lado a otro tratando de encontrar la manera menos directa de hacerle saber qué era lo qué pedía, y a Katsuki le causaba demasiada gracia.

Si bien, él sabía qué Eijiro era bastante lanzado y poco penoso en la cama, la manera tan tímida en la qué tartamudeaba le sacaba leves risas, tapando su rostro y viendo a otro lado para no mostrar esa expresión burlesca negándose a ayudarle a pesar de esos ojitos de cachorro.

Kirishima sabía qué eso era maldad pura por parte de Bakugo, por lo qué con simpleza suspiró, llevando sus manos al mostrador y observando tras la chica.

Ahí estaba, la cajita de condones marca durex tamaño mediano qué necesitaba, pero simplemente tratar de pedirlo era demasiado para él.

— Bakugo... por favor, al menos por ésta vez – se volteó a su novio, quién lo observó de reojo aún riendo, soltando una carcajada ante la expresión qué puso al recibir la negativa.