𝐂 𝐇 𝐀 𝐍 𝐆 𝐄 𝐒 | 𝗛𝗮𝗻 𝗦𝗲𝗼𝗷𝘂𝗻.

t h r e e.

003: maybe

— ¿Y no se te ocurrió pedirle su número o algún contacto?—

Seojun se encontraba con su mejor amigo en la cafetería de la escuela. Le había contado todo lo que había pasado la noche anterior.

— Simplemente no se me ocurrió, además la conocí ayer. —le dió otro sorbo a su bebida. — Dudo que la vuelva a ver.—

— ¿ Por que lo dices? — interrogó su amigo nuevamente.

— Solo fue una coincidencia, Chorong las invito a comer después del pequeño incidente que tuvimos.—

— Pero mencionaste que es amiga de Herin, puedes preguntarle o algo así.—

— De ningúna manera.— negó. —No me interesa, ni siquiera hablo con ella.—

La mirada de Seojun se fija en el nuevo individuo que se sienta junto a ellos.

Nada más y nada menos que Lim Jukyung, la persona de la cual el estaba enamorado.

— Suho, lo lamento pero esta tarde no podré ir a comer contigo, quede en acompañar en Sooah a comprar algunas cosas.— dijo la chica con arrepentimiento en su voz.—

— Está bien jagi , no te preocupes.— dicho éso depósito un beso en la frente de la chica. —iremos a comer en otra ocasión.—

El solo veía desde su asiento como la pareja era cariñosa el uno con el otro.

¿Lo lastimaba? Claro que sí pero no le gustaba demostrarlo y mucho menos si ese par de encontraba cerca de el.

— Aún sigo aquí. — dijo llamando la atención de la pareja.

— ¡Oh, Han Seojun! — al parecer ella no se había percatado de su presencia.—  lo siento.—

El solamente negó.

—No importa, de todas formas ya me iba.— se levantó de la mesa. — Nos vemos en clase ¿Ok?— ambos jóvenes asintieron.

— Bien, nos vemos luego. — Se despidió de su amigo.

Seojun caminaba por los pasillos de la escuela cabizbajo, ni le gustaba ese sentimiento de no poder hacer nada al respecto en cuento a la persona que le gusta, ella no lo miraba con otros ojos más que con ojos de amistad y lo peor de todo es que era la novia de su mejor amigo.

Pero tambien pensaba en la chica que había conocido la noche anterior, le sorprendía un poco de que ambos se hubieran tratado con confianza a pesar de ser dos completos extraños pero de todas formas no fue pará nada desagradable.

— Al menos se que ella está pasando por algo igual. — se dijo para si mismo al recordar lo que sucedió cuando te dejó en tu casa, por alguna extraña razón le reconfortaba saber que había más personas sintiendo lo mismo que el.

Y no se equivocaba, tu día era simplemente desastroso. La relación entre Jay y Minji era demasiado evidentemente, toda la escuela lo sabía ahora y eso te incluía, te dolía pero no te sorprendía. Sabías perfectamente que esa era la razón por la cual terminaron, sabías perfectamente que todo lo que te dijo ese día era solamente una excusa para terminar te.

—Bueno, creo que por fin logré bajarte el novio.— Viste como Minji se sentaba junto a ti.  — ¿Verdad linda? —

Al parecer se quería burlar de ti pero de ninguna manera te ibas a dejar de ella.

— Acaso crees que me importa lo que hagas.— la miraste. —¿Verdad linda?— respondiste de igual manera.

— Tal vez pero se lo mucho que quieres a Jay pero mi amor, ustedes dos como que no combinaban juntos ¿Sabes? Alguien como lo es Jay y alguien como tú no podía ser.— Dijo con un tono de desprecio en su voz.— Al menos yo si estoy a su nivel.—

Tu solo la miraste con enojo por unos segundos para luego decirle.

— Todo esto que me estás diciendo sería muy interesante si tan solo hubiera pedido tu opinión pero como no lo hice te puedes meter esa opinión por el culo o por dónde te quede más fácil.—

Dicho esto te paraste te tu asiento y saliste del salón dejando a Minji con la palabra en la boca.

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Han pasado algunos meses y el año escolar estaba a punto de terminar, todos ese tiempo tuviste problemas con Minji, ella nunca dejo de fastidiar y Jay junto con la mayoría de personas estaban de su lado por lo que te molestaban constantemente.

— Realmente estoy harta. — dijiste a penas tomaste asiento en el autobús junto a Yeri.

— En serio te admiro.—  dijo tu amiga sacando su teléfono.  — de todas formas sabes poner a esos idiotas en su lugar, pero aún te duele Jay ¿Verdad?—

Tu solo asentiste triste.

— ¿Sabes? — volvió a decir tu amiga. — Lo he estado pensando mucho y creo que lo mejor sería cambiarme de escuela.—

Eso te había sorprendido, no estaba pensando en dejarte sola en ese lugar.

— No me mires así. — río. — La propuesta también va para tí.—

— ¿Pero yo ni siquiera se a que escuela transferirte? — es que en realidad no conocías muchas escuelas y de las pocas que conocías estaban bastante lejos o ni siquiera te llamaban la atención.  —¿Tienes algo en mente?—

—¿ No sé tenga pasado por la cabeza Seabom school ? —

¿Cómo es que no se te había ocurrido antes?

—¿Esa no es la escuela de Herin?— tu amiga asintió. — No había pensado en ella pero puede ser una buena opción. —

— Claro que lo es, así estaremos las tres en la misma escuela y hará que todo esté enredo con Jay te deje en paz de una vez por todas. —

Sonará muy masoquista que no te gustaría dejar de ver a Jay, aún lo querías y eso te hacía sentir aún más miserable ¿Cómo querer va alguien que lo único que hace es dañarte? Pero tu amiga tenía razón, el cambiarte de escuela hará que tú dolor disminuya, lo tenías que hacer por tí.