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Después de una dura semana, llegó el sábado. Agatha decidió tomarse el tiempo para su proyecto, quería enfocarse en encontrar esas fotografías que en verdad la convencieran

Rodrick le había llamado para decirle si quería hacer una pequeña sesión de fotos para la famosísima modelo Gigi Hadid, que se encontraba ahora en París, disfrutando el gran éxito de su carrera, pero ella se negó, debía tener sus fotografías si o si

Una de las fotografías más importantes que ella quería, era una buena fotografía de la gran iglesia Saint Sulpice

Tomo el gran autobús con su maleta en mano y emprendió su camino

|Narra Agatha|

No es extraño ver a fotógrafos afuera de las grandes atracciones turísticas de París, familias tomándose fotografías y tratando de fotografiar la atracción para ir a presumirles a sus conocidos

Y si, este lugar está llegó de americanos, muy poco de personas de este lado del mundo

Pero en este momento ya estoy sintiendo esas miradas extrañas que siempre obtengo, fotografió cada detalle y quiero todo perfecto, incluso trayendo luces y flash enormes

Mientras termino de fotografíar, satisfecha comienzo a guardar mi equipo, me acomodo en una de las bancas que hay en la iglesia, los turistas suelen solo venir a observar y ni siquiera se sientan a escuchar lo que se supone que dicen aquí

Mientras guardo mis cosas, puedo ver al otro extremo de la banca un maletín, un pequeña mochila en forma de maletín café de cadena larga, miro a todos los lados, nadie parece preocupado por el maletín
Terminé de guardar mis cosas y espere una minutos más a que alguien venga por la mochila... Pero nadie llega, la gente sale y sale, pero nadie llega... No recuerdo haber visto esa mochila en cuanto me senté

Camino hacia ese lado de la banca y tomo la mochila, la cuelgo en mi hombro y salgo de la iglesia.

Mientras espero el camión, sostengo muy bien la mochila, espero y tenga una identificación o algo que me deje saber de quién es

El autobús se detiene frente a mi, con un poco de dificultad subo con mi maleta, me dirigí a uno de los asientos y me acomodé bien, el autobús no está tan lleno
Es hora de comenzar mi transbordo hasta el museo Louvre, tengo que sacarle el mejor provecho a este día

Y creo que también necesito ya, conseguirme un auto...

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—Estupida paloma, muévete —Dije entre dientes para mí misma

¡Ay!

Me estoy estresando de más, tanto que ahora peleó con una paloma, en verdad estoy muy mal

Creo que debería comer algo

Tomo mis cosas y guarda todo, tendré que volver a casa o conseguí un restaurante lejos de aquí, estos lugares abusan de los turistas y quieren sacarle hasta el último dolar

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Me siento en una de las mesas, pongo mis cosas frente a mi y comienzo a mirar la carta, creo que un poco de pasta estaría bien, le doy al mesero mi pedido y solo me queda esperar

Mis ojos se clavan en la mochila que encontré hoy, sin pensarlo, tomé la mochila y la abrí

Tengo que saber de quién es, no?

Lo primero que me encuentro es un cuaderno algo grueso y más grande que los comunes, lo saco de la mochila
Puedo notar que debe ser uno de esos cuadernos especiales para dibujar, también hay una pequeña bolsita con unos lápices y grafitos, algunas cosas más que no conozco, pero puedo notar claramente que es de un dibujante

Mi curiosidad me gana y tomo el cuaderno para comenzar a pasar las hojas
En cuanto lo abro, puedo verme sorprendida

¡Pero que arte!

Son dibujos realistas, son dibujos hechos a mano tan realistas que parecen una misma fotografía a blanco y negro

Comienzo a pasar las hojas con rapidez, dándoles una pequeña pero rápida vista, es totalmente sorprendente aquellos dibujos, me gustan demasiado y el cuaderno está casi lleno de dibujos de personas, de atracciones, incluso de la noche... En verdad es sorprendente

El mesero me trae la comida y yo guardo el cuaderno, comienzo a buscar un poco mas en la mochila hasta encontrar una cartera de imitación cuero café algo desgastado, la abro con cuidado y puedo identificar una licencia de conducir, la saco del compartimento y la observó

Christopher Vélez

Inconscientemente comparo la firma que se encuentra ahí con la que hay en una esquina de los dibujos de aquella libreta

Él es el dueño...

Por una fotografía||Christopher Vélez||TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora