02 | ¡Enloqueciendo por un chico!

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« Crazy For You ; Madonna »


—¡Sunoo aléjate del televisor! —Gritó con un tono molesto, sus manos estaban posadas a los costados de sus caderas—. ¿Cuantas veces te he dicho que no te mantengas cerca de él? ¡Te vas a lastimar la vista mocoso!

El más pequeño giró su rostro hacia la dirección donde se encontraba Sunghoon, Justo detrás de él, observándolo con autoridad. Él hizo un puchero que era de lo más tierno para los ojos Park, aunque trató de resistirse observó las intenciones del mocoso. Si su mocoso, él había decidido llamarle de esa manera en los días que habían transcurrido.

—¡No quiero! ¡No quiero! ¡No quiero! —Negó repentinas veces con la cabeza, poniendo sus ojos llorosos a propósito. Sunghoon entró en un momento de desesperación, al ver que el chico estaba apunto de romper en llanto, Park lo dejo hacer. Sentándose en el sofá mientras sacaba un suspiro de cansancio, pero entonces, observó a Sunoo sonreír con malicia.

Esa sonrisa fue la que derramó la gota del vaso. Como su mayor, decidió actuar de una manera, no tan... normal.

—Sunoo.

—¿Hmm? —El pelinegro giró la cabeza con una mirada inocente pero en eso sintió como tomaron su mano y entrelazaron sus dedos con los de él.

—Como decidió... No se qué pasa conmigo —Musito, empujando el cuerpo de Sunoo y posicionándose encima de él, manteniendo una mano entrelazada con la de él, y la otra en su muñeca, dejándolo a su disposición—. Pero cuando estoy contigo pierdo la razón.

Sunoo estaba visiblemente tenso y no le sacaba los ojos de encima a Sunghoon, el dedo índice del mayor dibujo el contorno de sus labios con lentitud. Dentro de él, Park sabía que aquellas palabras eran sinceras, pero trataba de convencerse de que todo lo hacía por jugarle una broma a ese chico.

—¿Qu-que? —Su cara comenzó a tornarse de un color rojo que llegaba hasta sus orejas—. ¿Que estás diciendo?

—Tu lo quieres, ¿No es así?

Sin esperar, junto su boca con la del contrario, al principio fue un simple pegue de labios pero luego comenzó a tomar forma. Aquellos eran dulces, suaves, y se moldeaban a la perfección con los de Sunghoon, no lo iba a negar, el menor amaba la forma en que le tomaba. Sunghoon había soltado el agarre un momento para comenzar a acariciar su cabello. Le encantaba, como sin previo aviso abría pasó a su corazón, y sin permiso alguno exploraba su boca. Gimió por la sorpresa que se había llevado y Park se sobresaltó.

Disfruto del beso un poco más hasta que se separaron por decisión del mayor. Con la respiración acelerada Sunoo le miró a los ojos mientras le regalaba la vista de sus mejillas coloradas. Sunghoon se congelo un momento, se suponía que solo jugaría con su estabilidad un rato, no que él comenzara un beso y encima, le diera una entrada más gratis a su vida amorosa.

Maldita sea, ¿Por que lo había besado? A penas llevaba unas semanas en su hogar, ni siquiera lo conocía completamente, aunque el daño ya estaba hecho y no podía repararse. La diferencia es que Sunoo aceptaba sus sentimientos, mientras que Sunghoon, era una bola de hilos tratando de desenredarse. El chico abajo de él podía lograr que su corazón latiera rápido por alguna razón, le creaba sensaciones que nunca había sentido antes.

Era capaz de escuchar los latidos frenéticos de su corazón. Le aterraba lo que estaba sintiendo en ese momento, tenía miedo de la forma en que Sunoo lo miraba, como si esperase algo de él, porque no sabía si él podía dárselo; de que un dia, perdiera el control y se perdiera a sí mismo, de que un día no le importara la forma tan extraña en que era él menor era. Tenía mucho miedo de la manera en que se estaba incrustando en su vida.

hyena vacant  › sungsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora