CAP. 13

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—¿Te ayudo? — una voz masculina se hizo presente

— Hey Jae Beom, hola de nuevo —sonreí al ver a aquél chico de cabello negro

Se sentó junto a mí y volvió a ofrecerse en ayudarme

— Soy experto en desenredar audífonos —soltó una risa

— Bueno, entonces cada vez que se pongan así te buscaré

— ¿Estás en clase libre, o ya saliste?

— Ya terminé mis clases, solo que mi amiga se unió al equipo de baloncesto y estoy esperando a que termine, además mi hermano también termina sus clases a las 7:20

— Oh ¿tienes un hermano aquí?

— Sí, está en la clase B, es un año mayor que yo

— Lim Jae Beom, deja de molestar a mi pequeña Yeong Kyung —gritó Yugyeom mientras se acercaba a nosotros

— ¿Im Yeong Kyung es tu...novia?

Ambos nos miramos y soltamos una carcajada

— ¿Novios nosotros? ¡Imposible!

— Ella es mi prima,  como si fuera mi propia hermana, anda ven a jugar con nosotros y deja de molestarla —le dio unas palmadas en el hombro y entonces se levantó

— Toma Yeong Kyung, hablaremos luego —sonrió ampliamente y se fue a continuar su práctica

Sentí una mirada puesta en mí, me giré para echar un vistazo y efectivamente no me equivoqué, Chae Hyung Won me observaba. Al momento de mirarlo me sonrió ampliamente y agitó su mano para saludarme. Con cierta confusión respondí a su saludo y entonces se levantó y caminó hacia a mí.

— Hola Yeong Kyung —saludó mientras se sentaba a un lado de mí

— ¡Hola!

—  ¿Estás esperando a tu novio?

— ¿Mi qué? —Fruncí el entrecejo y señaló a Yugyeom, quien estaba encestando

— Kim Yugyeom, el mejor jugador del equipo de baloncesto

— Por dios ¡no es mi novio! ¿Por qué todos creen eso?

— Oh...no lo son? Eso es lo que aparentan

— Por supuesto no, ¡él es mi primo! tendré que pegarme un letrero justo en la frente para que dejen de pr.....

— ¡Cuidado Kiki! —gritó Shin Hye

De no haber sido porque Hyungwon se puso de espaldas cubriendo mi rostro, me habrían dado un golpe tan fuerte que hubiera hecho pedazos mis gafas. Ambos quedamos demasiado cerca, tan cerca que podía escuchar la respiración un poco agitada del chico pálido. Tenía bastantes lunares en su rostro, eran realmente lindos.

De pronto dejó salir un quejido y tocó su espalda adolorido

— Lo...lo siento mucho, ¿estás bien? ¿quieres ir a la enfermería?

Soltó una ligera risa y negó

— Estoy bien, no te preocupes

— ¡Lo siento mucho! —Shin Hye se acercó con cara de lamento a recoger el balón

— Descuida, no fue tan duro el golpe

— Vamos a la enfermería ¿sí? El balón de baloncesto es muy pesado, tal vez te haga un moretón —sin querer lo tomé de la mano y entonces me detuvo

— De verdad no te preocupes, mi mochila amortiguó un poco el golpe

Me regaló una sonrisa bastante despreocupada

— ¿No se te rompió nada?

Negó y volvió a sentarse a un lado de mí

— No tengo nada de valor más que mis libros, así que no te mortifiques por eso

— Ese si fue un gran golpe —habló Seulgi sentándose al lado derecho de mí, al fin con su libreta en la mano

— ¿Por qué tardaste tanto Seulgi?

— El profesor Han estaba ocupado con su siguiente clase, así que me hizo esperar a que terminara de revisar los demás trabajos

— ¿El señor Han de la clase de inglés? —preguntó Chae

— El mismo —asintió

— Sus clases no me gustan, es decir; soy bastante malo en inglés y suele regañarme muy seguido por hacer mal los trabajos

— ¡Agh, te entiendo perfectamente! A mí me pasaba lo mismo hasta que Yeong Kyung comenzó a ayudarme con los trabajos

— Entonces ¿eres buena con el inglés?

— ¡Ella es la mejor de la clase!

— Por dios Seulgi, el mejor en la clase es Wonho

— Bueno, aún así debes admitir que eres bastante buena

— Deberías enseñarme, podría pagarte para que me des algunas clases, en verdad quiero que el profesor deje de regañarme —sugirió Hyungwon

— ¡Sii! Sería genial que nos dieras algunas lecciones a ambos, podríamos ir a tu casa y te pagaríamos por ello

— Está bien, ¿qué les parece si les ayudo los fines de semana?

— ¡Claro! Puedo ir a medio día a tu casa, ya que a las 10 tengo mis prácticas de Karate

— Sí, también puedo a esa hora —agregó Chae

— Genial, entonces los veré el sábado a las 12

Arranqué un pedazo de papel de una libreta y con una pluma anoté mi dirección para dársela a Hyungwon, Seulgi sabía perfectamente donde vivía así que no era necesario hacer una nota doble

— Aquí tienes Hyungwon

Me miró sorprendido por unos segundos

— ¿Qué, dije algo malo?

— No —negó riéndose— Creí que habías olvidado mi nombre

Seulgi se burló con ironía

— Uy claro, como si pud...

Le di un codazo antes de dejarla terminar la frase y le sonreí a Hyungwon

— No tengo tan mala memoria como para olvidar nombres

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