Guerra de venganzas parte 2/?
Antes que nada hay que pedirles perdón a todas ustedes por que tardamos más de veinte días en subir.
Es que es difícil escribir un capitulo bueno y largo sin comunicarnos. Sepan entender, mil disculpas.
En fin, esta es la segunda parte. Disfruten… y voten.
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Madison boy, estaba parado con los otros chicos, estaba sonriéndome y diciendo ‘si’ con la cabeza.
¿El existe? O… ¿Todo esto fue un sueño?
Me quedo inmóvil cuando el comienza a caminar hacia mi. Pero solo paso al lado mío, golpeándome con su hombro. Me doy vuelta para verlo ir directo a los vestidores.
- Nena, tu celular esta sonando. – dice Sarah acercándose a mi señalándome los bolsillos de mis jeans.
Saco el celular del bolsillo y veo una llamada entrante de mamá.
- Me olvide. De ir a casa. A despedirnos. – le dije a Sarah antes de contestar la llamada.
- ¡Madison! ¿Se puede saber donde estas? ¡Estamos retrasados! – dijo mamá desde la otra línea.
- Descuida, ya… ya voy. – le dije y corte la llamada. Mire a Sarah.
- Sarah préstame tú campera. Es por si mamá me pregunta donde estuve le diré que estaba en tu casa. Tú tranquila después ve a buscarla o te la llevo yo. – ella asintió con la cabeza y se saco la campera para dármela.
- ¡Gracias! – le grite a lo lejos. Ya había comenzado a correr hacia casa.
En el camino me puse la campera de cuero marrón que se había puesto Sarah y note que comenzaba a tronar.
Oh, genial. Va a llover en cualquier momento.
Comencé a correr aun más rápido. Estaba a solo media calle cuando comenzaba a caer gotitas de agua.
Llegue a casa y mis padres estaban con las valijas, parados al lado de las escaleras, con los brazos cruzados.
Ya estoy preparada para el castigo.
Papá me sonrío y se abalanzo a mí. – Te vamos a extrañar Madi.
Mamá hizo lo mismo.
Bueno si, bipolares, lo se. Lo se.
Se separaron de mí y tomaron las valijas. – Nos vemos la semana que viene Madi. – saludo papá. – Cuídate de la lluvia e invita a una amiga.
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¡Virgen, no tocar!
HumorMadison White y sus amigas forman uno de los grupos más populares en la escuela, pero Madison es diferente. Ella aun es virgen. Al empezar un nuevo año escolar Madison sigue con la misma idea: vivir la vida, divertirse, y no enamorarse. Pero un ru...