Love Bites XXX [+18]

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La clínica estaba casi vacía.
Luego de una semana de arduo trabajo atendiendo pacientes se podía respirar un aire de tranquilidad.

El estres ya casi se evitaba. Era sabado por la noche y la mitad del personal se iba a casa.
Sólo quedaba una pareja de amantes en el lugar.

Esperaron a que la enfermera Petra terminara su turno nocturno.
El Doctor Ackerman se quedaría hasta la madrugada revisando unos informes.
Pero no estaba solo.

Unos pasos resonaban por todo el pasillo. Un hermoso joven de hebras castañas, piel pálida y ojos verdes brillantes caminaba tranquilamente, reluciendo su traje rosado de enfermera.
Llevaba los brazos hacía atras, moviendo las caderas de un lado a otro de manera atractiva.

Cualquiera pensaría que se trataba de una broma por parte del joven castaño, pero la verdad es que le gustaba vestirse de enfermera para excitar a su novio, que por cierto es un médico muy respetado de la clínica.

Levi mantenía su mirada fija en la pantalla de su laptop, enviando los últimos informes de unos pacientes. Sin darse cuenta de que su lindura estaba frente a él.
Ocultandose a un lado del marco de la puerta.
Tratando de llamar su atención.

---oh cariño~...---el castaño quería llamar su atención, sin embargo debía hacer más que eso.
Eren recargó su espalda en el marco de la puerta, subiendo una pierna de modo tal que se notaban sus muslos al descubierto. Aún así, Levi no le prestó atención--- si no vienes aqui no te daré dulces.

Sus medias largas de tela fina le daban un toque de enfermera sexy.
Desabrochó un poco la rosada camisa, dejando ver un poco su pecho.
Se acercó a pasos cortos hasta donde estaba el azabache con su laptop, envolviendo sus brazos en el cuello de su novio.

Levi seguía sin reaccionar.
Pero en el fondo quería ver cuanto podía aguantar su lindura sin sus toques.

Eren frunció el seño al ser ignorado por su novio.
Pero tenía varias ideas para sacarlo de su mundo de aburrimiento.

Pasó sus manos por dentro de la bata del azabache, tocando ese formido pecho. Dejó varios besos en su mejilla, bajando para lamer su cuello.

---Levii~...---le sacudió un poco, tratando de que su novio le hiciera caso a sus pedidos. Ya empezaba a perder los estribos--- sino me deseas entonces me voy.

El castaño no era de tener mucha paciencia. Era sabado y quería estar junto a su sensual doctor.
Estaba por irse cuando una mano le hizo detenerse.
Levi le sujetó por la muñeca, no iba a dejar que su lindura se vaya sin antes responder a sus pedidos.

---no te vayas, quedate aqui
---entrelazó sus dedos fuertemente. Emulando una sonrisa coqueta. Eren se dejó llevar por aquella mirada penetrante de su doctor.

Sentó al castaño entre sus piernas, bajando sus manos por esa fina cintura hasta ese esponjoso trasero.

El azabache apretó sus nalgas, haciendo que su lindura se sonrojara.
Eren deseaba besar esos labios carnosos de su novio, no quería esperar.

Tomó las mejillas del azabache entre sus manos para luego usar su lengua para rebuscar en esa cavidad.
Levi no se quedó atrás, mordió el labio inferior de su lindura para ingresar su lengua y unirla con la de su novio.

Entre tantos besos fogozos y hambrientos, el miembro del castaño comenzaba a despertar.
Se sentía apretado entre esa fina tela y necesitaba liberarlo.

---T-te deseo...---tomó la mano del azabache para dirigirla hasta su miembro ya recto. Levi notó lo excitado que estaba su lindura, sonrojado y jadeante por él.