Naufragio // Fanfic_FairyTail // Nalu ^^

Capítulo 10

Pov N.

Muchas veces chocábamos con los muchachos en cuanto a ideas. Este día era difícil ya que por la lluvia pocos animales salían de sus cuevas, por no decir ninguno, y con el suelo hecho barro en la mayor parte de la isla, nuestras pisadas no podían ser lo suficientemente silenciosas para no espantar nuestras presas.

- ¡Lo tenías en tus narices y lo dejaste escapar!

- ¡Era una cría, no me voy a comer una cría! ¡Tendrá más carne cuando crezca!

- ¡Por tu culpa mi familia se quedará con hambre!

- ¡Cierren la boca ambos! - Mi grito los silenció rápidamente - ¡Ya tenemos bastante pescado! ¡Nadie se morirá de hambre!

- ¡Mi familia quería conejo para comer! ¡Les prometí que llevaría uno!

- ¡He dicho que te calles! - Freed guardó silencio otra vez - No quiero más peleas entre tú y Gray, me tienen harto con sus discusiones, ya sé acerca el medio día y las mujeres deben estar esperándonos.

- Pero...

- Freed - Lo miré serio.

- Está bien.

- Adelántense - Todos me hicieron caso y partieron rumbo a la aldea.

Yo tenía que darme un baño antes de volver, pues me caí en el barro tratando de atrapar una liebre. Fui al lago y me lavé el cuerpo, no demore más de quince minutos. Una vez listo agarré mis herramientas y me dirigí a la aldea. Pero en el camino vi algo sorprendente, cerca de los arbusto había algo, un pequeño animal escondido. Me acerqué para ver qué era, sonreí fascinado cuando vi a la cria que Gray permitió vivir.

- Quédate quieto... - Me preparé para llevarlo conmigo a la aldea, pues haríamos un buen caldo con él

Aunque...

Gray tenía razón, los conejos bebés no aportan mucha carne y es un desperdicio comérselos. Aunque si lo dejaba solo, pues no veía a su madre, probablemente moriría en las garras de algún puma o tigre.

Pude dejarlo ahí, pero volví a pensarlo, tal vez Lucy se pondría feliz si se lo obsequiaba como regalo. Con eso en mente volví a la aldea y pasé por en medio de las familias que preparaban el almuerzo para llegar a mi hogar.

"Casa" recordé las palabras de Lucy.

- Volví - Entré, pero para mí sorpresa ella no estaba dentro.

- Ella está con mi mujer y los niños - Gajeel me interrumpió en la puerta - Creo que se han hecho muy buenas amigas.

- Eso es bueno - Sonreí - Iré a buscarla.

Lo dejé y partí rumbo a su casa, toqué y Levy me abrió, me sonrió y llamó a Lucy diciéndole que la buscaba.

Lucy salió segundos después algo nerviosa.

- Solo vine a conocer a los hijos de Levy.

- Que seas mi mujer no quiere decir que debas permanecer siempre en nuestra casa - Reí, ella pensaba que estaba molesto - Vámonos, te he traído un regalo.

El conejo estaba en una saco de piel ligera que colgaba en mi espalda.

- Bueno.

Tomé su mano y la llevé a nuestra casa, entramos y nos sentamos en el suelo, bueno, solo se sentó ella.

- ¡Natsu es hermoso! - Ella se vio feliz cuando saqué al conejo para mostrárselo - Espera - Su sonrisa se borró - ¿Te lo vas a comer...?

Mostró horror.

- Si lo quieres para ti, no - Sonreí - ¿Te gusta?

- Me encanta - Tomó en sus brazos al conejo - Es muy pequeño y lindo, gracias.

- Cuídalo mucho, podríamos meterlo al gallinero, pero las gallinas se asustarán.

- ¿Entonces?

- En la tarde no saldré de caza, me golpeé el hombro y quiero descansar, aprovecharé que estaré aquí contigo para hacerle una jaula.

- ¡Sería genial!

- En la entrada de la aldea hay plantas que le puedes dar, lo vi comiendo cerca de ahí cuando lo encontré así que debe estar saciado, más tarde ve y consíguele mas alimento para que no se muera de hambre.

- ¡Claro! - Sonrió.

Ella no comía con el resto, siempre se negaba a salir para convivir con otros de mi tribu, y tampoco quería forzarla. Salí un rato para traer lo que habían hecho de comer las mujeres y volví con ella para almorzar.

- En la tarde iré al lago, apesto.

- Yo no huelo nada - Ella se puso roja - De hecho, cuando estamos juntos, hueles muy bien, tu aroma me fascina.

- Basta, no digas esas cosas - Se oyó nerviosa - De igual forma quiero bañarme bien esta vez.

- Bueno, solo ten cuidado, ve con Levy para que te proteja si llega a aparecer algún animal salvaje.

- Si...

Ella seguía abrazando aquel conejo, este se veía feliz en sus brazos, luego lo soltó para comer. Su nuevo animalito no se escapó ya que era imposible, la puerta estaba cerrada, más bien se entretuvo oliendo cada rincón.

- Natsu...

- ¿Qué pasa?

- Levy me informó que muchas mujeres llegan a morir cuando dan a luz, me refiero a cuando llega la hora de parir, y que incluso los hijos nacen muertos porque las madres no se cuidan lo suficiente durante los meses que los llevan dentro, ¿Y si pasa pero pierdo al bebé? ¿Me dejarás ir?

- Si pierdes al bebe no sería solo tu culpa, sería de ambos - Ella no entendió - Yo también debo cuidarlo cuidando bien de su madre, así que no, no te dejaría ir por nada del mundo.

- Pero...

- Hablando de bebés, ¿Cuándo debe llegarte tu ciclo?

- Creo que en una semana más...

- Espero que nunca llegue entonces - Ella se puso algo pálida - ¿Estás enferma?

- ¡No! - Gritó rápido - Pero en mi familia las mujeres no suelen tener más de 1 hijo, incluso algunas no tienen hijos.

- ¿Qué me estás queriendo decir?

- Pienso que puedo ser infértil, lo mejor es que vayas haciéndote la idea de que puede ser muy difícil lograr que te de un hijo.

- Lo averiguaremos la semana que viene.

- Pero...

- Sé que hay mujeres a las que les toma más trabajo concebir, pero yo te daré un año.

- ¡¿Qué?!

- Eso, aunque no me des un hijo antes de la próxima luna llena, tendremos otras once para concebir uno, y créeme que me empeñare en lograrlo.

Por alguna razón la sentí con pánico, como si estuviera ocultando algo, ¿Pero qué podía ser?

- Hoy es nuestra última noche de fertilidad luego de la boda, veremos que sucede.

Lucy no volvió a decir nada más, solo mantuvo la mirada clavada en el suelo, ni siquiera volvió a probar otro bocado de su comida.

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Continuará***

Nota/: Lamento los errores que puedan presentarse; siendo franca no recuerdo mucho el sentido de la historia pero aún así busco terminarla de la mejor manera, eso sin descuidar la universidad.