Mi Vecino||Christopher Vélez||CNCO

14🌟

Me levanté temprano en la casa de Emely, fui la primera en despertar, y como las dormilonas de mis amigas no despertaban, dejé una nota, tomé mis cosas y me fui.

Quería llegar a casa y acostarme en MI cama. Odio dormir en camas ajenas con almohadas ajenas. Necesito mis cosas para pasar una noche digna durmiendo.

Iba llegando a mi casa cuando no te que Christopher estaba sentado en la entrada con una caña de pescar. Comencé a reír desde lejos. Yo estaba en pijama, con unas notorias ojeras y con el cabello mal recogido. Que vergüenza.

-Mira nada más quién decidió aparecer-dijo mientras se levantaba y me ayudaba con mi bolso.

-¿Que haces aquí Vélez?-reí-Y con eso-señale la cama de pescar.

-Recuerdo que una vez me dijiste que ibas a pescar a un lago cerca de aquí, y me dieron ganas de pescar-sonrío-¿Donde están tus modales enana? No me saludaste-puso un dedo señalando su mejilla, pero cuando quise darle un beso en la mejilla el rápidamente giró su cara y terminamos dándonos un corto pico.

-Te odio-reí-Voy a vestirme y vuelvo.

-¿Para que? Esa pijama te queda hermosa-sonrío.

-Seran 2 segundos-entre corriendo y subi trotando las escaleras hasta mi habitación.

Agarre una blusa blanca un pantalón rastado y una camisa amarrada a la cintura. Recogí bien mi cabello, me puse perfume y bajé.

-Lista-sonreí.

-¿2 segundos eh?-dijo-Tardadte 10 minutos.

-10 minutos son 2 segundos para las mujeres-sonreí mientras caminábamos a su auto.

-Pero si tu no eres chica, eres un duende-comenzó a reír y golpeé su brazo.

Todo el camino íbamos cantando la nueva canción de CNCO Que va a ser de mí. Era divertido por qué el criticaba como cantaba y yo lo criticaba a él, pero no importaba que hiciéramos por qué siempre terminaba dándole un pico. Creo que la mitad eran por qué no me resistía y la otra mitad por qué el me los robaba.

Llegamos al afortunado lago galleta y sacamos la comida que Christopher había empacado y bajamos las cañas de pescar. Ni Christopher ni yo servimos para esto.

-¡¡Enana!!-grito-Pesqué algo algo-fui corriendo hacia donde esta Christopher tenía la mano en la orilla del lago-Aquí tengo el pez, ayúdame.

-Sueltalo a la cuenta de tres y yo lo agarró-dije-Uno, dos y tre...-Caí al agua, y no fue un accidente, Christopher me había empujado.

-Caíste-comenzó a reír hasta tirarse al suelo.

-El lago está sucio Christopher Vélez-crucé los brazos por debajo del agua-O te tiras ahora o nunca más te doy un bes...-Christopher se tiró de un chapuzón al lado mío.

-Voy a usar esas amenazas siempre, así haces todo por mi-sonreí.

-De todas formas, siempre voy a hacer todo por ti enana-acerco su cabeza y nos volvimos a besar por un largo rato.

-Enana-dijo.

-Feo-dije.

-Sigues sin tener trasero.

-Y tú todavía no sabes cantar.

-Tampoco creciste.

-Y tú no aprendiste a cocinar.

-Enojona.

-Agresivo.

-Me gustas asi-dijo y sonreí.

Mariposas del tamaño de un elefante devoraban mi estómago. Era hermosa y distinta la sensación que tenía al besar a Christopher. Sonreí mientras nos besabamos.

-¿Por que sonríes?-sonrío.

-Por esto-Christopher tenía la boca abierta y aproveché para meter en su boca al pequeño pez que atrape mientras nos estábamos besando.

Chris lo escupió y comenzó a limpiarse la boca mientras yo reía a carcajadas.

-Ahora vas a ver-comenzo a perseguirme nadando mientras yo nadaba y gritaba, pero por más que nade fue imposible por que termino atrapandome.

Me cargo en sus brazos y salimos del agua. Me dejó acostada en el suelo. No entendía que pensaba hacer, hasta que se acostó sobre mi sin apoyar todo su peso y comenzó a besarme desenfredamente.

No se cuantos minutos pasaron exactamente, pero para mi había pasado una eternidad desde que empezamos a besarnos. Nos separamos por falta de aire y nos recostamos boca arriba viendo las nubes.

El agarro mi mano y comenzó a jugar con ella.

-Enana.

-Vélez.

-El viernes son los premios Latín AMAs-dijo-Además necesito que me ayudes a elegir que usar-sonrío-¿Quieres ir conmigo?

-¿Yo?-pregunte confundida.

-No enana, estoy practicando para decírselo a otra chica?-dijo con sarcasmo.

-¿Lo dices enserio? ¿No dañare tu reputación o algo así?

-¿De que reputación me hablas enana fea?

-Entonces llévame a casa-dije-Debo buscar que usar.