te aleje...

XVI.

La brisa pasaba por su rostro haciendo danzar su oscura melena, el kimono era a la medida y de alta gama, se veia como la princesa que no era.
El demonio koeji le acompañaba con paz, ambos miraban al cielo, como si esperasen una señal, señal que pronto se hizo ver; una espada desendio del cielo abriendo un portal al este, ambos entraron y se perdieron en el, al llegar del otro lado se miraron con seguridad y asintieron, caminando hacia el palacio.

Guardias y demas al sentir ese suave y delicado perfume en particular voltearon con total euforia, pues solo una persona en ese mundo era dueña de aquel precioso perfume, corrieron tratando de asegurarse y se llevaban las manos al rostro al ver su acertacion.
En el palacio taeki, Inuyasha y Kagome hablaban tranquilamente, hasta que el hanyuo sintio sus fosas nasales ser llenadas del aroma de la chica que el creía muerta, se paro de pronto y con mucha angustia, pero incapaz de articular cualquier que fuese la frase, salio entonces despavorido buscando tan característico aroma hasta que dio con el, encontrar a la dueña de aquel aroma, no cabia de estupefacción y los ojos prontos se le aguaron, no dijo nada y solo corrio a encararla totalmente hayando la mas cruda pro dulce de las verdades, rin estaba frente a el.
Rin no se movió y solo pudo sonreir con su inmensa nostalgia, no hubo ruido hasta que Kagome se acerco frenética de la reacción de Inuyasha, estaba por reprenderlo por su abrupta huida pero, cualquier palabra murió al observar a la persona con Inuyasha, lágrimas calleron y corrio a abrazar a rin, quien le devolvió el abrazo con toda la fuerza que pudo, se separaron y al poco rato aparecio taeki y koeji.

- bien parece que tomaste una descision rin -

- taeki prométeme que me dejaras ir en cuanto esto termine -

- eso no es mi descision, sino de el lord del oeste -

- feew pues dudo mucho que pueda hacer algo planeo matar al malnacido -

- sr Inuyasha no diga esas cosas!!! -

- ah?? ... Perdón rin pero lo que te hizo no lo puedo dejar asi -

- me conformaré con salvar el oeste -

- ... No puedo prometerte tenerle con vida -

- por favor perdonelyo por ahora -

- bien, bien no le haré nada al desgraciado ese -

- gracias sr Inuyasha -

Ahora Kagome hablo desahogando toda su sorpresa.

- como es que estas viva ??? -

- bueno eso, por seguridad y la de cualquier persona.... Yo finji que habia muerto, de hecho asi hubiese sido, pero koeji-kun me salvo y me ah cuidado todo este tiempo -

- pero todos sufrimos pensando que habias perdido la vida a manos de un demonio -

- no hubiera estado alejado de la realidad.... En fin era lo mejor -

- pero si haces esto el sabra que estas viva -

- no es como que fuera a cambiar algo -

- realmente estas segura? -

Rin no dijo nada y con la mirada le suplico a kagome que no siguiera con ello, pronto todos se pusieron de acuerdo para llevar a cabo la toma de el oeste pero entonces un portal se abrió y dejo salir de el a irasue quien se veia un tanto pensativa, miro a todos sin interes hasta que reconoció a rin, corrio y la tomo de las mejillas, beso su frente y le sonrio con ternura, esto sonrojo con demasia a rin quien no sabia que hacer mas que quedarse tiesa.

- la luz de Sesshomaru ah vuelto, contigo todo esto acabara  y mi hijo saldra del letargo en el que se encuentra ademas del hechizo -

- oh lady irasue no es un hechizo el de verdad la ama -

- dime que no finjiste tu muerte solo por hacerle la vida facil a esa tipa -

- yo se lo que vi y el la beso con amor -

- sabes lo que realmente es amor ? -

- yo.... -

- bien tu sonrojo me dice muchas cosas asi que dejesmolo asi , bien que debemos hacer -

- bueno si todo sale bien partiremos mañana mismo asi descansan todos de su llegada -

- bien es prudente, ademas sirve que mi pequeña niña se prepara mentalmente para ver al malagradecido de mi hijo -

Todos rieron bajo y emprendieron la huida a sus respectivas habitaciones que mas tarde taeki alistaria, por la noche rin paseaba por los prados del este hasta que se sentó en una roca, la luna iluminaba su espacio, la vio con anhelo y pidio por sesshomaru, menciono su nombre entre sus labios y paso el viento llevándose su susurro, por un segundo pidio que llegara al demonio blanco, entonces la madre de el mismo llegó a hacerle compañía.

- sabes mi esposo decía que para que un daiyoukai lograra su supremacía, debia temer algo que proteger -

- por que me dice eso mi lady -

- oh sin tantas formalidades, al fin y al cabo ya nos conocemos -

- porque esta aqui -

- simple esa loca me queria lastimar y debia escapar antes de que me hiciera algo -

- tan fuerte es ? -

- no es la fuerza solo sino el tipo de magia que usa yo no soy inmune y menos el, asi que aunque gozeymos de grandes habilidades somos también suceptibles  a su molesta palabrería -

- porque me dice todo esto ? -

- porque el ah caido en sus magias, el realmente siente algo por ti, solo que o tu eres muy ingenua o el muy idiota para dar a saber sus intenciones -

El rubor adorno de nuevo las mejillas de rin, no dijo palabra alguna y desvío el rostro a cualquier lado opuesto a irasue.

- sabes no es casualidad el que se encontrarán en ese bosque -

- eh ? -

- si el destino es algo curioso y pues tu fuiste la luz que aparecio en la oscuridad de Sesshomaru y me alegro.... Bueno eso es para mi, en fin querida pon un poco mas de atención -

- pero..   -

Irasue se fue rápidamente evitando cualquier revocación de parte de Rin.

Sesshomaru....

Sesshomaru...

Un latido, la respiración tranquila y el lord del oeste en el suelo mas espantoso, pero al fin tranquilo.

Sesshomaru....

Sus oidos se llenaron del susurro y pudo reconocer la voz en el aquel susurro, la voz de la dulcura, la voz de la paz, la voz de la tranquilidad, la voz de la mujer que amaba.

- rin... espérame -