La historia que nunca tuvimos

1. Lo que une la música

Aunque suene increíble, todo empezó con un mensaje.

Toda nuestra historia, todo lo que sucedió y todo lo que pasó o no, depende de este comienzo.

Tal vez no suena tan increíble porque estamos en el siglo XXI, donde todos los adolescentes están viciados con el móvil y hasta los abuelos chateando.

Pero lo que si sorprende, es lo que pudo causar ese simple mensaje.

Y la música también se lleva sus méritos, por lo mucho que te puede unir a alguien tener los mismos gustos musicales.

Gracias a ella, específicamente a la canción "Old Yellow Bricks" de mi grupo favorito "Arctic Monkeys",
comenzó nuestra historia.

Pero para explicaros mejor, os pondré en situación.

Me llamo Ashley y tengo 17 años.
Soy una gran fan de cantantes como Lil Peep y Billie Eilish, y grupos como Arctic Monkeys y desde que la conocí, The Neighborhood, pero para contaros eso me queda un poco todavía.

Soy la típica chica que siempre está con unos auriculares puestos, a la que le tienes que repetir la misma pregunta mil veces porque con la música no se ha enterado.

Podría explicaros los motivos exactos de mis obsesiones con esos artistas,
pero dejemoslos en qué a cada uno les descubrí en el momento perfecto, y me ayudó a seguir adelante el poder escuchar los sentimientos que me eran imposibles de explicar.

Para llegar a ella, primero tuve que conocer a: Marta.

Marta es una chica alegre y alocada, en eso me recuerda mucho a mi mejor amiga, y sin dudarlo, social y charlatana, porque sino fuese por esas cualidades, jamás la habría conocido.

Flashback

Estaba en el concierto de Billie Eilish,
en Los Ángeles. Sentía la emoción por todo el cuerpo, los pelos de punta y como me dolía la cara de tanto sonreír.

Mis padres me habían regalado la entrada por mi cumpleaños, sintiendo mucho no poder acompañarme, pero ellos y todos sabían que para mí no era problema ninguno.

Me gustaba pasar tiempo con mi familia y quedar con mis amigas, pero también dedicarme tiempo para mí sola.

Pienso que la única persona con la que siempre estarás es contigo misma, entonces, ¿no es importante conocerte mejor a ti antes que a nadie?

Por eso mismo, cuando tuve una sola entrada para el concierto de mi cantante favorita, lo único que vi fue la oportunidad de pasar la mejor noche de mi vida.

Mis hermanos mayores y yo estábamos hospedados en un hotel en el centro de la ciudad, formaba parte del regalo igual que la entrada.

Ellos habían decidido irse a alguna discoteca famosa paga disfrutar de la noche en la hermosa ciudad de Los Ángeles mientras yo estaría en el concierto.

No quedamos en reunirnos cuando yo saliera, o en un bar para cenar después, los tres queríamos disfrutar una noche sueltos por esta ciudad, por nuestra cuenta, así que la única norma era acabar en la habitación del hotel.

Así es como daba comienzo a una que sabía que sería de las mejores noches de mi vida, una noche que siempre recordaría.

Y sobretodo, porque conocí a una gran amiga.

Cuando la cola eterna ya había acabado, al fin me encontraba dentro del pabellón, sentada en mi asiento asignado por mis padres, esperando a que saliese la maravillosa cantante.