⭐ Cap 5 / Una sorpresa...? ⭐

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— ¿Tambien los mandarón? — Pregunto el motociclista al ver a los recién llegados.

— ¡Exacto! — Exclamó con una sonrisa la nadadora.

— ¿Y alguien sabe el porqué nos mandó a todos nosotros juntos? — Pregunto Ishimaru.

— Tengo una idea de eso — Menciono el castaño de baja estatura.

— ¿Como cúal? — Pregunto el pelirojo.

— Debe haber Sido por qué pensó que habían más involucrados que ayudaron a hacer esto. — Respondió.

— Ya veo, si que piensa en toda posibilidad. — Respondió el adivino.

Aoi saco una dona que tenía guardada envuelta en una servilleta. Comenzando a comer de ella.

— ¡Asahina - san!

— ¿Si?

— ¡No comas en horarios de trabajo! ¡Y no hables con los boca llena!

— ¡Pero tengo hambre Taka-kun! — Exclamó está en respuesta a su amigo.

A los demás con excepción del programador, se les asomó una gota en la cien al ver la escena que sus amigos estaban montando.

— ¡A-asombroso! — Exclamó el más bajo llamando la atención de los demás presentes.

— ¿Que paso?

— 6 hombres!, 6 hombres estan con Enoshima - san! — Exclamó sorprendido y un poco asustado el castaño.

En ese momento, la única mujer en la sala tomo un palo que vio tirado en el piso y se puso en esta, como si esperara algo o a alguien.

— ¿Oye que haces? — Pregunto Mondo.

— ¡Kiyokata-kun, correte! - le dijo mientras se ponia en posición -

— ¿¡Que demonios!? — Exclamó el ojiazul.

— ¡Bien!, denada — Menciono está.

— ¡Como que denada! ¡casi matas a Ishimaru! — Grito Mondo — ¿Te encuentras bien hermano?

— Un poco asustado y sorprendido

— ¡Perdón! — Exclamó apenada.

Mientras tanto León se sentía un poco excluido

Aoi: Y com-, ah!

Uno de los complices de Junko agarro a Asahina por el cuello

— ¡Que demonios! — Exclamó Mondo

León le pego en la cara, haciendo que suelte a Asahina

— ¿Te encuentras bien? — Pregunto Hagakure

— Eso, creo...

— Demonios, y faltan 4 — Menciono el de cabello naranja.

— ¡Tenias que hablar! - aparecierón los que faltaban -

— ¡Jajaja!

— ¿Encerio creen que nos ganaran?

— ¿y tienen a unas niñitas tambien?, Pff, Jajaja

Aoi: Calla! - Le tiro la silla que estaba al lado de chihiro

Los demás miraban sorprendidos a su amiga.

— Rayos me duele...¿Está rojo? — Pregunto está.

— ¡Maldita perra! - se dirigia corriedo hacia Asahina -

— ¡Alto ahí! - agarro a 2 desde la ropa

León encontro un bate en una de las esquinas

— ¡Jaja!, esto lo voy a disfrutar!

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          °•Vamos con nuestra Prota!•°
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Pov (T/n)

Maldición, se me había atrasado la hora del plan. Me había enfermado una maldita semana.

Maldición...

//FlashBack//

Venia bajando las escaleras, me sentia mal, mareada, cansada, decaida, etc...

— No te ves bien, (T/n) — Menciono el peli-verde.

— No me digas...- perdi el equilibrio - Ah!

Pero algo me impidio tocar el frio piso, era, Rantaro, estaba impidiendo que tocara el piso...

— ¿Te encuentras bien?

— U-un poco...vamos a la academia, se nos hace tarde!

— Ninguno de los 2 va a ir, estas enferma

— ¡No lo estoy! — Exclamé.

Me cargo al estilo princesa

— ¡Que demonios! ¡Sueltame! — Exclamé

— Si que eres terca

— ¿¡Disculpa!? ¡Suéltame de una puta vez!

Me llevo a mi cuarto, y me recosto

— Estas ardiendo, y ¿así me dices que no estas enferma?

— Tsk, lo unico que haces es demostrarme que soy debil... — Mencioné.

— ¿Por que te tratas así? — Me pregunto.

— ¡Prefiero no contartelo!

//Fin del FlashBack//

Me demore menos en curarme que lo normal.

Pero bueno.

Hay estaba yo! En la cocina poniendo los malditos anestecicos al troso de pastel o torta.

— Bien, todo esta listo

Subi las escaleras. estaba enfrente de la puerta de Rantaro

Toc Toc Toc

— ¡Pasa! — Lo escuché gritar.

— ¡Hola, puto idiota!

— Que amable eres — Se podía notar que lo decía con niveles extremos de sarcasmo.

— ¡Si, si, si solo ten este pastel!

— No me digas que se quemo la cocina — Me vio con una mirada preocupada.

— No tonto, lo compre.

Pero me miró con cara de no creerlo.

Silencio

Silencio

Silencio, incomodo

— Bien, bien lo robe — Dije fastidiada.

— Eso suena mas creible — Respondí.

— ¡Tsk, solo cometelo, y adios!

Cerre la puerta detras de mi...uff, ahora solo esperar asta las 2:45am, jaja

Reí.

Salí de casa, para dirigirme a la academia de una vez y poder hacer lo que tanto he anelando desde que se vino a mi mente.

— ¡Alto ahí! — Exclamó una voz masculina detrás mío.

— Demonios.... — Mencione en un susurro al ver a dos guardias allí.

— ¡Cuidado!

Pero que...

— ¿Ah?

— ¡Ah...!

— ¿Eh?, ¡ah!

Callerón muertos...

Nisiquiera pude ver de quién se trataba...

Y eran, Junko y Mukuro...

¡No, no, no, no,no!

Después de todo, al parecer nunca podré ser libre, no podré hacer nada sin que Junko y Mukuro se enteren...

Estoy condenada a estar bajo ellas...

Troblemaker - Rantaro Amami - Reescribir/Edición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora