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Decir que tenía sueño era poco, porque todavía mantenía los ojos cerrados bajo su almohada, escuchaba algunos ruidos en su habitación y algunas quejas bajas de Jaehyun.

Sinceramente no estaba interesado en levantarse, tenía pensado seguir durmiendo pero la almohada con la que tapaba su rostro le fue arrebatada y aunque se negó a abrir los ojos, Jae lo obligó.

—Llegaremos tarde y hoy es un día especial.

Dongyoung estaba seguro que todo le importaba poco, realmente no era de su interés, ni siquiera recordaba porqué era "un día especial".

—Déjame dormir.

—Dodo. —escuchó nuevamente las quejas de Jaehyun y seguido sólo pudo escuchar el berrinche que el chico estaba haciendo. —Vamos, hoy es el gran juego, es un día importante para mí.

—Tú lo acabas de decir, es un día importante para ti, no para mí.

—¿Qué clase de amante eres?

Dongyoung entonces abrió los ojos, procesando aquella pregunta y tratando de no molestarse por una estúpida palabra.

Amante.

¿Qué clase de amante es?

—Hasta donde tengo entendido sólo soy el chico con el que te acuestas. —dijo, fuerte y claro. Se sentó en la cama y miró sin titubear a Jaehyun. —Si quieres a alguien que te apoye en tu día especial, no lo busques en mí, porque para eso tienes novia, y por si aún no lo sabes tu novia se llama Kim Jennie.

Jaehyun pareció no entenderlo, o al menos eso pensó Dongyoung.

—Dong—.

—No. —lo interrumpió. —No somos exclusivos, obviamente, si quieres que sea ese alguien que te apoye y esté incondicionalmente, ya sabes qué hacer, ya hablamos de esto.

Y con una mirada triste, Jaehyun asintió.

—Es difícil para mí, Dong.

—Entonces no esperes que te dé más de lo que tú me ofreces.

Los gritos se dejaron escuchar y la primera en salir corriendo hacia la cancha fue Jennie

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Los gritos se dejaron escuchar y la primera en salir corriendo hacia la cancha fue Jennie. Ella se tiró sobre su novio quien la recibió en un abrazo rápido.

Dongyoung observó todo desde lejos.

Suspiró y se puso de pie, tomó su chaqueta de la banca y se dispuso a salir de aquél lugar.

Mientras caminaba hasta la salida pudo escuchar que los celulares de todos comenzó a sonar en una notificación, supo inmediatamente de qué se trataba, seguramente uno de esos chismes que  publicaba alguien anónimo del instituto.

Dongyoung decía que todo era pura mierda, por esa misma razón era que no seguía aquella cuenta.

Pero entonces todos comenzaron a mirarlo y eso sí era raro, porque no eran algunas personas, todos en el lugar lo miraban, algunos sorprendidos y otros al parecer molestos.

Dongyoung no entendía qué pasaba, no hasta que su cerebro le dijo que seguramente salió un nuevo rumor sobre él y pensó: ¿otro más? Con el último había sido suficiente.

Detuvo su caminar y sacó su móvil de su bolsillo, entró a la estúpida página y observó el último chisme.

Sintió como su alma lo abandonaba.

"Gran partido el de hoy, nuestro equipo ganó como siempre y como recompensa les traigo un jugoso chismecito: Una aventura que está sucediendo desde hace un buen tiempo.

Ya todos saben que Kim Dongyoung está tachado como "el rarito" junto a otro chico que se cambió de institución, una lástima, pero bueno, siguiendo con Kim, ¿pueden creer que el muy maldito se está acostando con uno de los chicos más deseados de aquí? Pero que envidia.

Entonces se preguntarán, ¿quién es?

Bien, se los diré.

¿Sabían que Jung Jaehyun tiene una aventura con el rarito del instituto? Sí, el gran futbolista estrella se acuesta con Kim Dongyoung, mientras su hermosa novia piensa que se va a visitar a su abuelo. Menudo novio.

¿Qué piensan sobre esto? Tenemos fotos pero son bastante fuertes.

Besos a todos.

¡Feliciten a los amantes!

Y flores para Jennie, de preferencias negras."

Parpadeó sin poder creerlo, miró fijamente la pantalla y escuchó los murmullos de todos.

Cerró los ojos.

—¡Kim Dongyoung!

Y a lo lejos pudo escuchar el grito de Jennie.

The gay boy 》JaedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora