🎴Asashin🎴 - Illumi Zoldyck [Pausada]

Capítulo 3

Pudiendo llegar al final del recorrido, luego de subir unas escaleras. Se pudo tomar un descanso de algunos minutos en cuanto los últimos participantes que lograban llegar pasaban.

Me encontraba parada en mi sitio un tanto alejada, me balanceaba como una niña pequeña por más que no lo fuera.

Luego de un tiempo las puertas se cerraron, miramos atentos al examinador quien nos explicó que recién habíamos llegado a la mitad del recorrido y que aún debíamos seguirlo para que nos lleve a la segunda prueba.

-¡No lo escuchen!¡Está mintiendo!- grito un hombre desde una dirección, todos lo miramos- él no es el verdadero examinador, miren- dijo mostrando una especie de mono extraño, pero con un increíble parecido con el examinador.

Hice in gesto de desagrado para luego agacharme y dejar que las cartas de Hisoka pasarán sin problema. Me di media vuelta y mire con los ojos entrecerrados al arlequin quien me sonrió lascivo.

Rodee los ojos y mire en dirección a Illumi quien prácticamente mataba con la mirada al payaso. Y dirigí mi mirada al examinador quien detuvo el ataque.

-Tu eres el verdadero y él es falso- explicó.

- Muy bien, pero la próxima vez que lance un ataque hacia mi tendré que descalificarlo del examen, que no se repita- advirtió.

Sin más, comenzó a movilizarse una vez más por los ir comenzamos a seguirlo, todo iba bien hasta que un aproximado se cinco hombres se me acercaron.

-Pero miren que hermosa chica tememos aquí- dijo con diversión el que parecía ser el líder del grupo.

No exprese ningún gesto, y eso a ellos medio les molesto. Uno se acercó para tocarme pero si un salto hacia atrás para luego caer devuelta al suelo en pie a varios metros de distancia.

- Parece que la niña quiere jugar- se burló otro. Hice una mueca de desagrado en mi rostro. Sinceramente había entrado aquí sin las intenciones de matar a nadie, al parecer no me quedaba de otra.

Me dispuse a crear hilos lo suficientemente fuertes para atrapados a todos y cortarlo en varios pedazos, pero viendo quise darme cuenta, todos cayeron al suelo sin vida.

Al caer hacia adelante pude notar como todos tenían una aguja incrustada en su cabeza, ingle mis mejillas y entrecerre los ojos con fastidio.

- Oh vamos!- exclame- eran míos, yo podía contra ellos- dije cruzandome de brazos como una niña pequeña haciendo un berrinche.

- No valía la pena que tus manos se marcharán con sangre de ellos- se escuchó por entre la niebla. Sabía de quien se trataba, no todos los días una voz a si de relajada y sin preocupación alguna por su entorno se escuchaba.

- Si tu lo dices- dije rodando los ojos. No sabía donde se encontraba al no poder verlo, pero cuando sentí su presencia detrás mía no lo dude en ningún momento.

Gire rápidamente con mi pierna izquierda levantada con el objetivo de golpearle el rostro, fue inútil ya que él fue más rápido y detuvo el golpe con su mano. Tenía mi tobillo agarrado fuertemente, aún así el dolor no lo sentía.

-Es desconcertado de tu parte atacarle en lugar de darme las gracias- hablo. Hice una mueca y le saque la lengua.

- Yo nunca te lo pedí- dije histérica- ahora sueltame- mande, en cambio hizo algo que no esperé.

Con su pie desequilibro la pierna con la que me apoyaba en el suelo haciendo que me cayera de espalda al suelo.

- No inventes- dije con molestia, me dispuse a levantarme pero él no tenía esos planes, ya que tomó mis manos y las sostenía por sobre mi cabeza con fuerza para no liberarme y se colocó entre mis piernas quedando arriba mia.

-Creo que te juntas mucho con Hisoka- hable con diversión.

- No es eso, sólo me gusta tenerte en esta posición- dijo sincero como siempre- siento que tengo el control de ti completamente.

- Se que hay algo más- dije con una sonrisa divertida. Me lo confirmo cuando comencé a sentir un pinchazo en mi vientre.

- Así podre saber donde te encuentras- dijo para luego separarse. Mire mi estómago, notando como en la zona de mi ombligo se encontraba una de sus agujas incrustadas, pero esta en lugar de ser amarillas era de mi color favorito.

-¿La hiciste para mi?- pregunté levantándome, mire hacia su dirección y este se iba incrustado las agujas en su cabeza comenzando a cambiar.

- Hice muchas para ti, con diferentes funciones cada una- explicó, asenti y comenzamos a caminar hacia donde se podía sentir mayor cantidad de nen.

Llegamos hacia lo que sería el final del recorrido y me separe del Zoldyck y me senté en algun sitio para esperar a alguno más que falte.

Cuando estuvimos todos los que faltaban a excepción de los que murieron o se les acabo el tiempo para llegar, la puerta gigante que se encontraba allí se abrió para dejarnos entras a la segunda face de la prueba de cazador.