REY DEMONIO- HARRY STYLES

CONFIA EN MI

ISBEL*

Sostengo mis manos por encima de mi cabeza mientras con todas mis fuerzas tiro de la cuerda que las ata

-Es inútil, sabes que no lo lograrás- dice con su voz arrogante

-Harry, por favor- suplico observándolo de lado

-¿Estás seguro?- dice la mujer frente a mi mientras dudosa observa al hombre de ojos esmeralda posado en el umbral de la puerta

-Solo hazlo- dice mientras traga saliva con fuerza

-Lo siento, dolerá un poco pero estarás bien- dice ella dedicándome una mirada rápida y de prisa suministra un liquido blanco justo en mi cuello

Siento como arde y quema conforme entra, tiro de las cuerdas que atan mis muñecas y maldigo a la mujer que aún mantiene la aguja dentro de mi

-Está funcionando- dice ella mientras sujeta mi rostro y trata de abrir mis ojos

El cuerpo de Harry ya se encuentra a mi costado y con fuerza sujeta mi cadera haciendo que mi cuerpo se quede quieto sobre la cama

-Abre los ojos- demanda sobre mi rostro

-¡Suéltame!- grito tratando de quitármelos de encima

Sin mucho cuidado sujeta mi barbilla y con ayuda de la mujer abren mis ojos

Ambos rostros se encuentran encima del mío observándome con detenimiento

-¡Funcionó!- dice con emoción la mujer soltándome y dando pequeños brincos a nuestro costado

Veo el rostro de Harry relajarse mientras me suelta y suspira con fuerza

Siento mi cuerpo adolorido y cada articulación quemar al intentar moverme

-Es parte de mi sangre destilada con la tuya, parte de la de Damon y Cherry también van ahí, necesitas al menos un poco de poder para poder subsistir el mayor tiempo posible- dice Harry un tanto aliviado

-¿No es más fácil que me dejes morir ya?- digo molesta sintiendo como mi cuerpo empieza a retomar fuerza

Él solo me dedica una mirada dura

-¿Cómo te sientes?- pregunta la mujer que vagamente me recuerda a Jack, tienen el mismo lunar en el cuello y varios rasgos faciales se le asemejan

-Estoy bien- digo molesta

Veo como ella frunce sus labios y juntando sus manos agacha la mirada

-Perdón, tú no tienes la culpa, disculpa- digo automáticamente sintiendo la presión en mi pecho por haberla tratado así

-Está bien, no te disculpes, me imagino cómo te sientes, es normal- dice ella sonriendo un poco desganada

-No, no creo que puedas imaginarlo- digo tratando de contener mis palabras, el enojo me hace decir muchas cosas que no son correctas

-No puedes ser tan dura con quien quiere ayudarte- dice la voz de Harry detrás

-Me ayudarían si dejaran que pasara lo que tiene que pasar- digo observando como ella se dirige a desatar mis muñecas

-Lo que tiene que pasar es que retiremos esa maldición- dice Harry frunciendo su ceño

-Esto es agotador, tiene que haber un final- digo sintiéndome igual de molesta

-Existe un final, pero no es el que nuestros padres eligieron, podemos cambiarlo- dice esperanzado

-No, no podemos cambiarlo, solo nos queda aceptarlo, nosotros no nacimos para estar juntos, debes comprenderlo- digo tranquilizándome poco a poco