Capitulo 9: "Tequilas"

72 11 32
                                    

Tenía su cabeza recargada sobre mi abdomen, disfrutando cada segundo de esa primera vez haciéndome suya. Yo veía el techo blanco, puro, totalmente contrario a lo que estábamos haciendo...

Levantó su cabeza para verme justo un segundo después de haber entrado finalmente, y me miró totalmente desconcertado. Ya no había más rastros de deseo. Lo miré extrañada, ya no entendía lo que estaba pasando, y quería saber qué pensaba. Pero no se detuvo, al contrario. Se puso de rodillas sobre aquella cama, y me alzó para tener mejor acceso a mi parte más caliente, y sin dudar un solo segundo, comenzó un vaivén casi peligroso. Había dejado de ser cauteloso, cuidadoso. Esa noche no hicimos el amor, simplemente fue sexo, si, sexo con otra puta más.

________________________________________________________

               (Ese mismo día, más temprano)

Yoongi no sabía nada de la ciudad donde estaba, no la conocía, así que me pidió ir a buscarlo al aeropuerto, la verdad es que yo tampoco la conocía muy bien, pero era un poco más fácil para mí, así que accedí. Mamá se sorprendió al principio, ya que sabía que no tenía ningún conocido aquí, pero luego se tranquilizó y me dijo que no me preocupara, ella podría cubrirme el turno de la noche. Le dije que no me esperara para cenar.

Llegué al mismo aeropuerto donde yo había estado el día que llegué, y me senté en una de las sillas de la banca de espera, Yoongi no había llegado.

Recibí un mensaje de Yoongi, el entraría por la puerta trece, y yo estaba en la once, no haría falta caminar mucho.

Me perdí en la sensualidad con la que camina naturalmente, vestía un sweter azul cielo con rayas blancas y un pañuelo azul con finas rayas grises y rojas amarrado a su cuello elegantemente y un pantalón blanco ajustado a su cuerpo.

Se distrajo tratando de encontrarme con la mirada, en su mano llevaba una pequeña maleta negra, supongo que es su equipaje. Llamé su atención con mi mano alzada agitándola en el aire, cuando me vió me sonrió dulcemente. Lo esperé parada ahí, mientras caminaba hacia mi.

— Mi Suk, que bueno verte de nuevo — Estaba muy emocionado, me dió un cálido beso en las mejillas, y extendió sus brazos hacia mi para darme un abrazo, que rico huele. ¿Así huele el cielo?

— Opino lo mismo, Yoongi. — Correspondí su abrazo, pero la tensión sexual me hizo apartarme. Sonreí tratando de ignorar eso, rogando que no se diera cuenta de mi sonrojo.

— ¿Tan rápido ya te sonrojas?

— Lo siento, es involuntario.

— Si, como no. Bueno, cuentame, ¿Qué tal te fué en las últimas cuatro horas sin mi?

— Solo fueron cuatro horas Yoongi, tu vuelo no tardó demasiado.

— Cuatro horas en las que pudiste extrañarme.

— Lo hice, ¿Tu lo hiciste?

— Irremediablemente.

Me dijo que tenía muchísima hambre, a lo que le ofrecí comer en mi casa. No tenía problemas, en presentarlo como mi amigo, al final de cuentas, eso era.

Sin embargo dijo que no, quería comer en un restaurante, o algo así, no me opuse a eso.

Comimos pizza, porque ni el ni yo sabemos de algún restaurante que valga la pena visitar, no dejó de regañarme por eso durante toda la tarde.

Durante nuestra conversación, tocamos nuevamente esos temas sensibles, a lo que me mostré ante él un poco cabizbaja. Me dijo que según Google Maps había un bar cerca, que deberíamos ir.

Luna y Estrella 💫 Min Yoongi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora