Capítulo Decimo

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María estaba en el despacho de Gabi,  haciendo tiempo para cuando el llegara, su sorpresa fue que cuando el llego.

Oh buenos días señora, la queda mucho tengo una reunión. _ mirando sé el reloj_. Cinco minutos.

¿Por qué  me sigues llamando señora?

Porque no quiere que lla tutee, por eso lo hago.

Esta bien, ya he terminado._ dijo recogiendo  las cosas de limpiar. _ un poco molesta,pero antes de marcharse  se giro y le dijo.

Escuché  él mensaje pero era muy tarde y no quise molestarte. _ abrio la puerta y se fue.

Gabi  se quedo parado sin saber qué hacer o que decir, el esperaba que no lo hubiera visto o simplemente habría pasado del tema.

La reunión  que tenia era un detective y lo qué quería evitar era que María se cruzará con él, así que como no estaba muy seguro le llamo y quedó con él  en la cafetería de enfrente.

Hola buenos días._ lo saludo Gabi.

Buenos días. _ estrechándose las manos, Gabi  fue al grano.

Me gustaría que averiguara donde vive trabaja esta mujer además  de en esta empresa,  si tiene algún lio  con alguien._ entregandoloe una foto de María.

¿A que se refiere con lio?

A si sale con alguien, de su sexo u distinto ¿me entiende?

Si perfectamente. _ el hombre  lo preguntaba por que al ver la foto, pensó  que era por que Gabi creia que el lio era con el otro cliente, pues ese cliente era el ex marido de María_. ¿ Quiere algo más?

No de momento ¿cuando tendrá la información?

Necesito algunos días  ya lo llamare para quedar.

Gabi salió de la cafetería y se dirigió al despacho,  se marcho un poco preocupado, pues le había extrañado el comentario del detective estaba cruzando la calle y le pareció que alguien lo observaba se dio cuenta de que era Jesús,  pero no le dijo nada,  entro lo saludo y cogio el ascensor hasta el despacho, cuando salía de el, se cruzo con María que estaba cogiendo un cafe de la maquina, al ver que ella no se había dado cuenta de que él estaba detrás,  la sonrió pero pasó sin decirle nada, entonces fue cuando ella lo vio pasar y eso la molesto, ni siquiera se había molestado en mirarla se dijo, ya se había disculpado,¿ que más  queria? Cada minuto que pasaba más indignada se sentía .

Y el solo hacia pensar en lo hablado con el detective,  pero solo ella era la culpable, si le hubiera dicho solo una vez, con las veces que se lo había preguntado,  con una sola vez, a el le hubiera  bastado,  la insistió y la insistió pero nada, pues a lo hecho pecho se dijo, peor de lo que estaban las cosas no iban estar.

Mientras tanto el detective,  espetaba que saliera María del edificio. Esto si que es bueno, dos clientes investigando las mismas cosas de la misma mujer, con la diferencia que de uno de ellos era su ex mujer y del otro ¿que era del otro? Pues quería saber lo mismo. Estaba pensando en ello cuando vio salir a María,  con la diferencia que edta vez no se dirigio a la boca del metro,  continuo andando,  estuvo así mucho rato,  el continuaba siguiéndola pero cada vez le resultaba más difícil, pues ella por la dirección que estaba era donde vivía su ex marido, ella continuó andando y de repente se detuvo en una esquina o al menos  eso le pareció a él,  allí estuvo un buen rato, de pontro la vio agitar la mano y llevársela a los labios,  estaba mirando hacia arriba,  el miro hacía arriba y vio a una niña,  por lo que aparentaba debía de ser su hija pequeña ya que el ex marido le había hablado de ellas.  Y por lo que pudo aoreciar la niña estaba encantada de vet a su msdre y no era  vomo le había contado el padre, total y a el que,  le pagaban por su trabajo no por dar la razón a uno u a otro,  con lad mismas se metio en un bar  que había en una esquina, tenia grandes ventanales con las lunas ahumadas, desdr fuera no se podia ver a la gente que se encontraba dentro,  pero desde dentro si podía ver los escaparates de lad butiques, erauna gran avenida,  el trafico era de sentido unico , menos mal que se le había ocurrido srguotla a pié,  en el coche le hubiese sido imposible,  y desde allí vería si se marchaba por un lado o por el otro,  de todas formas si volvía tendria que decírselo a su cliente, que su ex esposa visitaba el domicilio y veia a sus hijad, aunque por el momento en la ventana solo estaba la más pequeña,  estuvo esperando un buen rato serian ya casi las seis, cuando alguien se acercó al portal porque vio que María se metía más  en la esquina y el ahora casi no la veia, unos minutos  más tarde la vio salir de donde estaba y echaba andar en dirección donde él  estaba,  paso por delante del bar espero un par de minutos y salio tras ella, María siguió andando se paro en la parada del autobús, el detective,  al ver que se psrsba alli,  no quiso arriesgarse y cruzo al otro lado de la calle. Ya casi tenía todo lo que le habían pedido, de un tiro mataría  dos pájaros,  esperaría unos días más  y al final de la semana les entregaría a cada uno el informe, este trabajito había sido fácil,  solo deseaba que no le afectará  para mal a la mujer.

Queridos MiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora